Se supone que en Navidad se trata de celebrar, el amor por los demás, la humildad, la paz y la fraternidad, pero ni nos acordamos de los necesitados, ni pensamos en los lugares donde hay guerra y hambre, ni nos sentimos cercanos de los pobres, ni transmitimos alegría o ilusión a nuestros semejantes. Solo pensamos en consumir, regalar, y que nos regalen….¿en eso se ha quedado el espíritu de la navidad?¿en un mero intercambio económico?, ya no se desean buenos sentimientos a nuestros amigos, familiares vecinos o conocidos. De repente todos aparentamos ser más ricos de lo que éramos, aunque nos endeudemos un poco mas, hay que regalar y comprar, empieza la gran fiesta del consumo!.
No importa derrochar, consideramos que la celebración de la navidad es comer, y cuantos mas platos variados hay en la mesa para cada ocasión, parece que sabemos celebrar mejor las fiestas navideñas, la navidad se ha transformado en glotonería, y por otro lado las compras de regalos para todos, y en la mayoría de las ocasiones son regalos inútiles, que no se usaran, pero al comprar no se fijan en el uso o la necesidad del regalo. La Navidad es, sin duda, el momento del año en que somos, casi por encima de todo, consumidores natos, este artículo refleja perfectamente esta ceguera consumista que arrastra cada vez más en estas fechas a más gente.
ITACA