Que voy a hacer,
nada consuela al que tiene dolores,
y sin alivio a sus penas...
Que lejos están ,
los días alegres del ayer,
cuando todo parecía un carnaval
pleno de alegría...
Si todo esto forma parte del ayer,
ya nada consuela al que sufre,
y no tiene alivio a su dolor, solo
hay en su corazón el hielo del desamor...
Cuidado, mucho cuidado,
en el atardecer se ve como va
cabizbajo el poeta , pues ya nada
lo alienta y solo las penumbras espera
pues en ellas con soltura deja a flote
su pena y dolor...
No importa si la puerta de la
sala ha quedado abierta, los
fríos de afuera son tibios comparados
con los témpanos en que se ha
vuelto envuelto el triste trovador...
No tengo mas palabras para decir
adiós, solo un ruego les hago si acaso
alguien preguntara por el , decirles sin
pena, no les veremos mas por aquí,
pues vino la esbelta dama de negro y
con cuidado en sus brazos le lleva...
Autor: José Antonio/Corazón de león