Aprende a servirme, porque sólo por este sendero me encontrarás.
Olvídate de ti mismo, porque sólo entonces se me encuentra.
No busques a los Grandes cuando estos pueden estar muy cerca tuyo.
Tú eres como el hombre ciego que busca la luz del sol.
Tú eres como el hombre hambriento al que se le ofrece alimento y no comerá.
La felicidad que buscas no está muy lejos; se encuentra en cada piedra común.
Estoy ahí si tan solo miraras. Yo soy El que Ayuda si me permites ayudar.