ESTÁS AUSENTE
Cuatro paredes frías y sombrías
me anuncian la inminente despedida.
¡Y fueron tantos años de mi vida
los que dediqué, a amarte sin falsías!.
Se llenó tu alma entera de mi aliento
le di impulso a tus sueños quizá locos,
te brindé mi cariño y no fue poco.
Viniste tú a mi por amor; hambriento.
Es mejor que me muestre indiferente.
Me enteré que en tu vida hay algo nuevo
es copa amarga, la acepto y la bebo
¡adelante!, no quiero retenerte.
En mi mesa y mi cama estás ausente,
y mis oraciones por ti son diarias.
Mi almohada impregnada de plegarias
me dan fuerzas y vivo mi presente.
Mary Torres