HOMBRE SIN TIEMPO
La noche yace exhausta entre mis dedos
deforme y difusa,
pues aún tengo la tibieza de tu piel
seduciéndome,
y el candor de tus labios
con el sabor de un mañana
que me dejará la delicia de tu rostro
entre mi alma y tu cuerpo.
Porque soy el fuego encubando tus aguas
en la cálida elocuencia
de las flores y el cielo,
y de cada mordisco que el tiempo reclama.
Soy tu poesía, tu hembra bravía
la màs breve amapola
florecida en invierno
el epitafio absoluto en tu bosque de abrojos.
Y aquí me encuentro
como mariposa al viento
reclamando la eternidad
de un breve momento.
Jadeando tu nombre
de hombre sin tiempo.
by: Fay Gwillyon
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