RENUNCIA
Se puede renunciar a muchas cosas
sin causar efectos en nuestro interior,
se puede vivir normalmente cuando se
renuncia conciente y que no tenga valor.
Pero, cuando se renuncia a un amor…
por diferencias en nuestra forma de ser,
se paraliza el alma y los días son grises
en cada día de nuestro simple amanecer.
Renunciar a un amor de algunos años
es como vivir en una oscura habitación,
que ni siquiera te das cuenta que se hizo
de día, porque no hay en ti protección.
Esa protección que se siente cuando estás
con esa persona que amas, y él lo sabe.
Al sentir sus labios… el mundo ante ti,
serenamente y tiernamente se abre.
Renunciar es algo personal y privado,
y aún así, que injusto es nuestro destino…
que con solo pensar en lo que hacemos,
se nubla ante nosotros, un camino confundido.
Y confundido será hasta la eternidad,
donde juntos nos encontraremos un día dormidos ,
seguros que en aquel lugar, no habrá nada
que nos pueda hacer renunciar
a un amor que tan bello fue y merecido.
Autora
@M.Prunera
-Llum-