Los hijos nacen, crecen, se desarrollan, evolucionan y, como parte
de esa evolución, está el momento de emprender el vuelo.
Nosotras, como madres, aunque estamos conscientes de que la
separación en algún momento llegará, es difícil aceptar que esa
persona a quien tanto amamos y a quien le dimos la vida, tiene
que ser libre.
Por eso, es importante enseñar a los niños a decir adiós y,
sobre todo, mentalizarnos de que nuestro papel com
o guías de vida es enseñarlos a volar sus propias rutas.