Poniendo fe en el destino
me comencé a preguntar,
por qué no estás tú conmigo
por qué no te puedo amar.
Esto que siento por dentro
para ti no es amor,
es imposible no serlo
te lo dice el corazón.
El amor que yo sentía
no lo pude contener,
eso ya lo presentía
cuando te empecé a querer.
Sólo una cosa te pido
que no desprecies mi amor,
no lo dejes al olvido
no lo ignores, por favor.
Es posible con el tiempo
que se llegue a extinguir,
al no verte ni un momento
dejará de existir.
Yo le dije muchas veces
a mi pobre corazón,
que de ti se olvidará
que sería lo mejor.
Que echara todo al olvido
no perdería la razón,
sería ese un buen motivo
para olvidarte mi amor.
Pero el amor es ingrato
y no te deja olvidar,
y por más que trato y trato
mi amor se vuelve a avivar.
Más el amor no es eterno
como tú lo puedes ver,
y espero llegue el momento
que te deje de querer.
El amor es un capricho
que te nubla la razón
que te entume los sentidos
sin contar al corazón.