Cuando tu Papá te trato como la niña de sus ojos y te hizo sentir tan especial y única. Cuando tu Papá te trataba tan bonito, con ternura, amor y cuidado. Cuando tu Papá te miraba de manera dulce y veías todo ese amor que tenía para tí. Cuando tu Papá venía solo para traerte tu pan calientito o lo que sea que tu le pidieras. Y tú sentías que eras lo más importante en su vida. Cuando tu Papá fue la persona que te amo sin condiciones con un enorme amor. Tú esperas volver a enamorarte de un hombre parecido a él. Si tienes una hija y la tratas con inmenso amor, ella se sentirá tan hermosa y tan especial que no tendrá remedio qué buscar a un hombre parecido. Porque ella sabe lo que es el verdadero amor. Thiago Ruiz