Mucho cuidadito, porque las altas temperaturas pueden provocar con
demasiada facilidad mareo, debilidad, dolores de cabeza, naúseas y vómitos.
Y si el golpe de calor es prolongado, es probable que derive en una
insolación y las consecuencias pueden ser incluso mortales.
Así que, por favor, procura mantenerte fresco/a, hidratado/a,
evita exponerte al sol y salir a la calle en las horas de más calor,
y toma buena nota de los siguientes trucos de la abuela.
Remedios en caso de golpe de calor o insolación
Si sufres un golpe de calor, humedece enseguida con
agua las flexuras de los codos y las muñecas.
En caso de insolación, coloca un paño seco en la coronilla y deja
caer encima un vaso de agua. No te asustes, saldrán burbujas como si hirviese.
No dejes de acudir al médico si los síntomas no desaparecen.