8. Montalcino
Otro pueblo bonito de la Toscana de origen medieval, es Montalcino. Capaz de transportarte varios siglos atrás gracias a sus calles y palacios. Pasea tranquilamente por su centro, fíjate en los detalles, flipa con la Rocca, una fortaleza que domina Montalcino y entra en el Duomo y en Palacio de los Priores.
Para acabar la visita a lo grande, visita una bodega para probar su famoso vino: el Brunello di Montalcino, un vino tinto con cuerpo rotundo y voluptuoso *se hacía la somellier cuando es de las que beben Malibu con piña*