Sucesos finales de los impíos .
La resurrección especial de los impíos,
He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén Apocalipsis 1:7.
“Los que le traspasaron”, los que se mofaron y se rieron de la agonía de Cristo y los enemigos más acérrimos de su verdad y de su pueblo, son resucitados para mirarle en su gloria y para ver el honor con que serán recompensados los fieles y obedientes.—
Caifás, alzando la diestra hacia el cielo, se dirigió a Jesús con un juramento solemne: “Te conjuro por el Dios viviente, que nos digas si tú eres el Cristo, Hijo de Dios”...
Todos los oídos estaban atentos, y todos los ojos se fijaban en... [Jesús] mientras contestaba: “Tú lo has dicho”. Una luz celestial parecía iluminar su semblante pálido mientras añadía: “Y aun os digo, que desde ahora habéis de ver al Hijo del hombre sentado a la diestra de la potencia de Dios, y que viene en las nubes del cielo”.
Por un momento la divinidad de Cristo fulguró a través de su aspecto humano. El sumo sacerdote vaciló bajo la mirada penetrante del Salvador... Por un momento se sintió como delante del Juez eterno, cuyo ojo, que lo ve todo, estaba leyendo su alma y sacando a luz misterios que él suponía ocultos con los muertos.
La escena se desvaneció de la visión del sacerdote... Rasgando su manto... pidió que... se condenase al preso por blasfemia. “¿Qué más necesidad tenemos de testigos?—dijo—. He aquí, ahora mismo habéis oído su blasfemia. ¿Qué os parece?” Mateo 26:65, 66. Y todos lo condenaron.—
Así hicieron su decisión los dirigentes judíos. Su decisión fue registrada en el libro que Juan vio en la mano de Aquel que se sienta en el trono, el libro que ningún hombre podía abrir. Con todo su carácter vindicativo aparecerá esta decisión delante de ellos el día en que este libro sea abierto por el León de la tribu de Judá.—
Cuando Cristo venga por segunda vez... lo verán como Rey celestial... entonces los sacerdotes y gobernantes recordarán claramente la escena en la sala del juicio. Cada circunstancia aparecerá delante de ellos como escrita en letras de fuego.—Apocalipsos 19:20 DESPUES DE LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO MIL AÑOS DESPUES .
Pero la Bestia fue capturada, y con ella el falso profeta - el que había realizado al servicio de la Bestia las señales con que seducía a los que habían aceptado la marca de la Bestia y a los que adoraban su imagen - los dos fueron arrojados vivos al lago del fuego que arde con azufre.
21 Los demás fueron exterminados por la espada que sale de la boca del que monta el caballo, y todas las aves se hartaron de sus carnes.»
[V.20-> La bestia. Ver com. Ap 17:3; Ap 17:5. Apresada. O “capturada”. La fase de la batalla después de la aparición de Cristo es corta y dramática, porque desde su comienzo la “bestia” y el “falso profeta” son capturado (ver com. Ap 16:17; Ap 16:19). Falso profeta. Es decir, el protestantismo apóstata, que es engañado por Satanás y coopera con él (ver com. Ap 13:11-17; Ap 16:14). Un “profeta” es el que habla en nombre de otro (ver com. Mat 11:9). Este “profeta” habla en nombre de la primera bestia, en relación con la curación de su “herida mortal (ver com. Ap 13:12; Ap 17:8), para persuadir al mundo para que se una en homenaje a ella. Señales... engañado. Ver com. Ap 13:13-14; Ap 16:14; Ap 17:2; Ap 18:2-3; Ap 18:23. Marca de la bestia. Ver com. Ap 13:16 cf. Ap 14:9; Ap 16:1. Imagen. Ver com. Ap 13:14; Ap 14:9. Un lago de fuego. O “el lago que es fuego”. Esta frase dirige inmediatamente la atención del lector a una frase idéntica en Ap 20:10, la que a su vez parece llevar a la conclusión de que las dos se refieren al mismo acontecimiento caracterizado por el fuego, es decir, la destrucción de los impíos final de los mil años; pero el hacerlo presenta un problema. Es muy evidente que en el cap 19 se tratan acontecimientos relacionado con la segunda venida de Cristo; por lo tanto, sostener que este lago de fuego describe un acontecimiento al final de los mil años, es sacar este versículo de su contexto. Siempre es mejor, hasta donde sea posible, hallar un explicación que permita que una determina da declaración mantenga su secuencia histórica en un pasaje de las Escrituras. En cuanto al Ap 19:20, esto es posible si se toma com premisa razonable que habrá un castigo divino con fuego tanto al principio como al fin de los mil años. “Permítaseme decir que hay dos lagos de fuego la segunda venida de Cristo ,la tercera venida de Cristo juicio final contra los impíos , uno en cada extremo de los mil años (RH 21-1-1862). ]