|
General: APOCALIPSIS 17Y 18 ULTIMO MJE DE DIOS CRISTO .
Elegir otro panel de mensajes |
|
ESCRITO ESTA EN LA SANTA BIBLIA PROFECIAS POR CUMPLIRSE PRESTO YA .
Después de esto vi bajar del cielo a otro Angel, que tenía gran poder, y la tierra quedó iluminada con su resplandor.
Gritó con potente voz diciendo: «¡Cayó, cayó la Gran Babilonia! Se ha conviertido en morada de demonios, en guarida de toda clase de espíritus inmundos, en guarida de toda clase de aves inmundas y detestables.Porque del vino de sus prostituciones han bebido todas las naciones, y los reyes de la tierra han fornicado con ella, y los mercaderes de la tierra se han enriquecido con su lujo desenfrenado.»
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 1
[V.1-> Después de esto. Se refiere a la secuencia en la cual los cap. 17 y 18 te fueron revelados a Juan, pero no necesariamente a la secuencia de los acontecimientos que allí se registran. Juan no quiere decir que los sucesos del cap. 18 acontecen cronológicamente “después” de todos los que se mencionan en el cap. 17. Ver com. Ap 4:1. Otro ángel. Otro ángel que no es el del cap. 17. Este ángel se une con el tercero del Ap 14:9-11 en la proclamación del mensaje final de Dios para el mundos (PE 277), y su mensaje repite el del segundo ángel del Ap 14:8 (CS 661). Del cielo. Juan vio a este ángel cuando descendía a la tierra y como viniendo de la presencia de Dios con una misión especial. Poder. Gr. exousía, “autoridad” (ver com. Ap 17:13). Este ángel llega desde la sala del trono del universo, comisionado para proclamar el último mensaje de misericordia de Dios y amonestar a los habitantes de la tierra del inminente destino que aguarda a “Babilonia la grande LA MADRE HIJAS Y ALIADOS ”. Alumbrada. O “iluminada”. A pesar de los esfuerzos satánicos por envolver a la tierra en tinieblas, Dios ahora la alumbra con la luz gloriosa de la verdad salvadora (ver com. 1:4-5,9). Gloria. Gr. dóxa (ver com. Jn 1:14; Rom 3:23). Puede considerarse que la “gloria” representa el carácter de Dios SU LEY DEL SINAI EN SU PUELO SELLADO PARA VIDA ETERNA (cf. Exo 33:18-19; Exo 34:6-7) como se revela particularmente aquí en el plan de salvación. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 2
[V.2-> Clamó con voz potente. Para que todos pudieran oír. El mensaje del cap. 18 deberá proclamarse durante el tiempo del fuerte clamor del tercer ángel (CS 661-662, 672-673, 711), y por lo tanto merece el más cuidadoso estudio. Ha caído. Ver com. Ap 14:8. Su caída espiritual será ahora demostrada y confirmada, y ella será castigada. Cf. Isa 13:21-22; Isa 21:9; Jer 51:8. La gran Babilonia MADRE E HIJAS UNIDAS ALIADOS . Ver com. Ap 14:8; Ap 17:5. Demonios ESPIRITISMO HECHICERIA SATANAS MISMO EN FORMA DE MARIA Y SU ESTADIA EN EL MUNDO IMITANDO A CRISTO EN SU SEGUNDA VENIDA SENTADOSE EN EL VATICANO PARA BENDECIR A LOS QUE TENDRAN LA MARCA DE LA BESTIA Apoc 16:10 CATECISMO DOMINGO . Ver com. Mar 1:23. “La gran Babilonia” está ahora completamente poseída por los demonios (ver com. Ap 17:5-6; Ap 17:14; cf. com. Mat 12:43-45). En un sentido especial quizá se haga referencia al espiritismo moderno (ver com. Ap 13:13; Ap 16:13-14; cf. PE 273-274; CS 614-615, 645; 682). Espíritu inmundo. Ver com. Mar 1:23. Ave inmunda y aborrecible. Se añaden sucesivas metáforas para intensificar la descripción de la completa perversidad y apostasía de Babilonia. El cap. 18 refleja literalmente la estructura de la antigua poseía hebrea (ver t. III, p. 25). ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 3
[V.3-> Todas las naciones el mundo entero . Ver com. Ap 17:2. Vino del furor catecismo Domingo la marca de la bestia papado . Ver com. Ap 14:8. Reyes de la tierra. Ver com. Ap 16:14; Ap 17:2; Ap 17:10; Ap 17:12. Han fornicado. Ver com. Ap 17:2. Mercaderes. Gr. émporos, “viajero”, “comerciante”. El lenguaje sumamente figurado del cap. 18 no establece claramente si estos “mercaderes” son literales o simbólicos; pero ambos sentidos son posibles. Si estos “mercaderes” son literales o simbólicos; pero ambos sentidos son posibles. Si estos “mercaderes” son simbólicos, representarían a los que abogan por las enseñanzas y mandamientos de “Babilonia la grande” (cf. Isa 47:11-15), las mercaderías que ella tiene para exhibir y vender a los habitantes del mundo con el fin de engañarlos (ver com. Ap 18:11). Potencia. Gr. dúnamis, “poder”. Aquí quizá tiene el sentido de “influencia”. Cf. com. Ap 5:12. Deleites. Gr. str’nos, “lascivia”, “voluptuosidad”, “arrogancia” (cf. com. Ap 18:7). ]
|
|
|
Primer
Anterior
2 a 6 de 6
Siguiente
Último
|
|
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 4
[V.4-> Otra voz. Como lo sugiere el griego, es otra voz angelical. Salid de ella. Hasta casi la terminación del tiempo algunos -tal vez muchos- de los hijos de Dios que están en la iglesiaMadre e hijas sin duda no habrán oído la exhortación de la Babilonia simbólica. Compárese la exhortación de Dios a su pueblo en los tiempos antiguos para que huyese de Babilonia (Isa 48:20; Jer 50:8; Jer 51:6; Jer 51:45). Así como el pueblo de Dios salió antiguamente de la ciudad de Babilonia para regresar a Jerusalén, de la misma manera su pueblo de hoy es llamado a salir de la Babilonia simbólica para que sea considerada entrar en la Nueva Jerusalén. Todos los que son verdaderamente hijos su voz y obedecerán la exhortación (ver com. Mat 7:21-27; cf. Jn 10:4-5). Esta la exhortación del segundo ángel de Ap 14:8 (ver CS 441, 66 f; PE, 277). Las razones inmediatas para este llamamiento imperativo se dan, en la última parte del versículo. Esta es la primera de las dos razones que se dan para salir inmediatamente simbólica. Los que participan de los pecados de Babilonia participarán de los castigos que vendrán por causa de ellos (cf. Jer 51:6). Sus pecados. En sentido general todos los que ella induce a los hombres a cometer, pero más específicamente los pecados que se presentan en el Ap 17:2-6 catecismo (ver com. Ap 18:6). En el cap. 18 se acusa a Babilonia delante del tribunal de justicia divina por cinco delitos: (1) orgullo y arrogancia, (2) materialismo y ostentación, (3) adulterio espiritual idolatría , (4) engaño con mentiras impone el catecismo 666 la marca de la bestia y (5) persecución inquisición (Ap 18:2-3; Ap 18:5; Ap 18:7; Ap 18:23-24). Sus plagas. O sea el castigo que está por como cumplimiento del “juicio” o “sentencia” del Ap 17:1 (ver com. Ap 16:19; Ap 17:1; Ap 17:17). La naturaleza de estas “plagas” se expone brevemente en los Ap 16:19; Ap 17:16; Ap 18:8; Ap 18:21solo los que tienen las plagas son los que se sometieron al papado a sus tradiciones catecismo 666 . La mayor parte del cap. 18 consiste en una impresionante descripción, aunque muy figurada e indirecta, de estas “plagas”. Las primeras cinco de las siete últimas plagas serán derramadas principalmente sobre los que cooperan con Babilonia -los reyes y los moradores de la tierra (Ap 17:1-2; Ap 17:8; Ap 17:12)-; pero el castigo contra Babilonia -las organizaciones religiosas apóstatas unidas MADRE E HIJAS DOMINGO CATECISMO ALIADOS , tendrá lugar durante la séptima plaga (ver com. Ap 16:19; Ap 17:1; Ap 17:5; Ap 17:16). La sexta plaga preparará el camino para ese castigó. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver.
[V.5-> Sus pecados. Ver com. Ap 18:4; cf. Jer 50:14. Han llegado. Gr. kolláō, “pegarse”, “adherirse”. Se describe a los pecados de Babilonia apilados como una mole montañosa que se compacta y bien unida. Hasta el cielo. Así como este monte figurado hasta el cielo, así también la carrera criminal de “Babilonia la grande” (ver com. Ap 17:6) se eleva más y más delante de Dios exigiendo la debida retribución (Ap 16:19; cf. Gen 11:4-5; Gen 18:20-21; Esd 9:6; Jer 51:9; Dan 5:26-27; Jnn 1:2). Tal vez haya aquí una alusión a la torre de Babel (Gen 11:4). Se ha acordado. La paciencia de Dios está por agotarse; su castigo sobre la Babilonia simbólica está a punto de ser ejecutado (ver com. Ap 16:19). El verbo “acordarse” en relación con Dios comúnmente denota que él está a punto de retribuir a los seres humanos por determinada conducta, ya sea buena o mata (Gen 8:1; Exo 2:24; Sal 105:42; etc.). Sus maldades. Es decir, sus actos impíos y los resultados consiguientes, en forma particular los crímenes específicos de que se la acusa en los cap. 17 y 18 (ver com. Ap 17:6; Ap 18:6-7). ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 6
[V.6-> Dadle. Mejor “devolvedle”. La “ramera”, es decir, la organización apóstata “Babilonia la grande” (ver com. Ap 14:8; Ap 17:5), está por recibir la retribución plena de sus impiedades. El cielo, con absoluta justicia, no retiene ninguna parte del debido castigo. La retribución que recibirá Babilonia se describe brevemente en Ap 17:16-17 y con más detalles en el cap. 18. Cf. Jer 51:6. Como ella os ha dado. Su retribución corresponderá a sus obras; su castigo será en proporción a sus crímenes. Cf. Isa 47:3; Jer 50:15; Jer 50:29; Jer 50:51-24. Doble. Se le dará una doble medida (cf. Isa 40:2; Jer 16:18; Jer 17:18). Sus obras. Su trato para otros será la norma o regla con la cual Dios la tratará. El cáliz. Ver com. Ap 14:10; Ap 17:4. Preparadle. O “mezcladle”. En el mismo cáliz en el cual ella mezcló una bebida maléfica para que: otros la bebieran, Dios ahora mezclará una bebida terrible y la obligará a beberla (Ap 14:8; Ap 17:4; cf. Jer 50:15; Jer 50:29). ]
|
|
|
|
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 7
[V.7-> Cuanto. Ojo por ojo: el castigo guardará reciprocidad con su crimen; sus sufrimientos y lamentos estarán en proporción con su jactancia y disipación anteriores. Se ha glorificado y ha vivido en deleites. La primera parte del Ap 18:7 dice: “tantas cosas la han glorificado y hecho licenciosa”. ¡Tantas cosas han contribuido a su orgullo y lascivia! Su arrogante suficiencia propia la hizo confiar en el éxito final de su complot para aniquilar al pueblo remanente de Dios del sábado séptimo día y reinar en forma suprema sobre la tierra. Está orgullosa de su riqueza, popularidad y poder. Cf. Isa 47:6-10; Eze 28:2; Eze 28:4-5; Eze 28:16. Tormento. Ver com. Ap 17:16; Ap 18:4. Llanto. O “duelo” como resultado de las “plagas” (Ap 18:4) que la atormentan. Compárese con el lamento de los “reyes” y “mercaderes” (Ap 18:9; Ap 18:11). Dice en su corazón. Lo dice en el tiempo en que el ángel del Ap 18:4 proclama su mensaje de advertencia antes del fin del tiempo de gracia, y más tarde durante la sexta plaga (ver com. Ap 17:1). Un amor propio exagerado la ha llenado de confianza en su impío plan de gobernar el mundo. Su intento de engañar a otros ha resultado en su propio y total autoengaño. No sólo ha “embriagado” a otros, sino que ella también está embriagada catecismo engaño de Satanás domingo (ver com. Ap 17:2; Ap 17:6). Estoy sentada como reina. Nótese el tiempo presente del verbo (ver com. “dice en su corazón”). La verdadera iglesia es presentada en la Escritura como una “virgen pura” (ver com. 2Co 11:2). como la novia (“esposa”) de Cristo (ver com. Efe 5:23-32; cf. com. Ap 12:1; Ap 19:7-8). La gran ramera se hace pasar por la novia de Cristo delante de los moradores de la tierra, sobre los cuales pretende ejercer dominio en el nombre de Cristo; pero es una “reina” falsa (cf. Isa 47:6-10), una ramera católica vaticano que nunca tuvo un esposo legítimo, y sin embargo se jacta de sus conquistas. ¿Acaso no la agasajan los “reyes” y “los grandes” de la tierra (Ap 18:9; Ap 18:23)? ¿No están sometidos a su voluntad como instrumentos dedicados a sus proyectos nefastos? (ver com. Ap 17:2). No soy viuda. Como “viuda” no tendría posición legal ni podría aspirar a la lealtad de los moradores de la tierra. Cf. Isa 47:8; Isa 47:10. En tiempos del NT las viudas, tanto judías como romanas, debían depender de sus hijos si los tenían. Si no, se nombraba a algún hombre como tutor de la viuda, quien no tenía derecho a tomar decisiones ante la ley. Llanto. Lo que menos espera sin duda le sobrevendrá (ver com. Isa 47:11). ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 8
[V.8-> Por lo cual. Es decir, a causa de su arrogante jactancia, su orgullosa exaltación propia, su completa lascivia, su codicia inescrupulosa de poder y supremacía, y su atrevida oposición a la voluntad revelada de Dios de la Santa Biblia y a su ley del Sinaí . Un solo día. Algunos creen que se trata de tiempo profético, y que por lo tanto representa un año literal; pero otros consideran que el ángel está recalcando lo repentino e inesperado de las “plagas” que caerán sobre la Babilonia simbólica, especialmente por su falso sentido de seguridad (Ap 18:7), o que está hablando de un lapso indefinido. En vista de que se dice que el mismo suceso ocurre en “una hora” (Ap 18:10; Ap 18:17; Ap 18:19), parece preferible la segunda explicación (ver com. Ap 17:12; cf. Jer 50:29; Jer 50:31). Además, el tiempo de los verbos que acompañan a las palabras “día” y “hora” (Ap 18:10) sugiere un momento más bien que un período, y por lo tanto parece recalcarse lo repentino e inesperado antes que la duración. Cf. Isa 47:9; Isa 47:11; Jer 50:31; Jer 51:8. Sus plagas. Ver com. Ap 18:4. Muerte. Se presenta primero el resultado final de sus “plagas” (ver com. Ap 18:21). Llanto. Ver com. Ap 18:7. Hambre sin alimento sin agua por las plagas . Durante la cuarta plaga habrá un hambre literal sin comida para los del papado aliados ni agua ni pan ni nada (Ap 16:8-9) que sufrirán los partidarios de Babilonia papado hijas y aliados (cf. Ap 18:1-2); sin embargo, el castigo de Babilonia como organización ocurrirá durante la séptima plaga (Ap 18:18-19), -como es de esperarse en el caso de una entidad figurada tal como la Babilonia simbólica- y concuerda con el carácter sumamente poético y figurado de todo el capítulo 18. Será quemada. O “consumida por el fuego” (BJ). La mujer simbólica, Babilonia, por supuesto “será quemada” con un fuego figurado (cf. Efe 6:16; 1Pe 4:12; ver com. Ap 17:16). Su suerte se describe mediante una figura completamente diferente en el Ap 18:21. Hay una descripción de los acontecimientos aquí predichos en CS 711-715. Fuego. Cf. Jer 50:32; Jer 51:24-25; Jer 51:37. Poderoso. Es decir, es plenamente capaz de llevar acabo su voluntad sobre Babilonia (cf. Ap 17:17). La juzga. ”La ha condenado” (BJ). La evidencia textual establece (cf. p. 10) el texto “la juzgó”. El juicio pronunciado sobre Babilonia es tan cierto que el ángel habla de él como algo ya consumado. Ver com. Ap 16:19; Ap 17:1; Ap 17:17; Ap 19:2. Lo que le acontece no es un accidente, sino un acto deliberado de Dios. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 9
[V.9-> Los reyes de la tierra los que se unieron al papado y obtuvieron la marca de la Bestia . Ver com. Ap 16:14; Ap 16:16; Ap 17:2; Ap 17:12-14. Han fornicado se han unido a ella en el catecismo Domingo . Ver com. Ap 17:2. Vivido en deleites. Ver com. Ap 18:7. Llorarán. O “harán duelo por ella”, “sollozarán por causa de ella”, con llanto fuerte y abundante. Los desventurados “reyes” y “mercaderes” (Ap 18:11) de la tierra, al anticipar su propia suerte inminente se unen en una endecha de muerte por la altanera Babilonia, ahora atormentada sobre su ardiente hoguera fúnebre. El dramático efecto de los Ap 18:9-20, que describen el destino inexorable de la gran ramera Vaticano aliados , es destacado por su exótica forma literaria oriental: prolijidad poética realzada por figuras literarias. La exhortación del cap. 18 es en primer lugar emotiva, pero está reforzada por una lógica incisiva: para los que respondan a la exhortación de Dios de huir de la ira venidera (Ap 18:4), todavía hay la posibilidad de evitar la suerte inminente de Babilonia cómo evitar ser marcado por satanás papado con la marca de la Bestia salid de ella .]
|
|
|
|
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 7
[V.7-> Cuanto. Ojo por ojo: el castigo guardará reciprocidad con su crimen; sus sufrimientos y lamentos estarán en proporción con su jactancia y disipación anteriores. Se ha glorificado y ha vivido en deleites. La primera parte del Ap 18:7 dice: “tantas cosas la han glorificado y hecho licenciosa”. ¡Tantas cosas han contribuido a su orgullo y lascivia! Su arrogante suficiencia propia la hizo confiar en el éxito final de su complot para aniquilar al pueblo remanente de Dios del sábado séptimo día y reinar en forma suprema sobre la tierra. Está orgullosa de su riqueza, popularidad y poder. Cf. Isa 47:6-10; Eze 28:2; Eze 28:4-5; Eze 28:16. Tormento. Ver com. Ap 17:16; Ap 18:4. Llanto. O “duelo” como resultado de las “plagas” (Ap 18:4) que la atormentan. Compárese con el lamento de los “reyes” y “mercaderes” (Ap 18:9; Ap 18:11). Dice en su corazón. Lo dice en el tiempo en que el ángel del Ap 18:4 proclama su mensaje de advertencia antes del fin del tiempo de gracia, y más tarde durante la sexta plaga (ver com. Ap 17:1). Un amor propio exagerado la ha llenado de confianza en su impío plan de gobernar el mundo. Su intento de engañar a otros ha resultado en su propio y total autoengaño. No sólo ha “embriagado” a otros, sino que ella también está embriagada catecismo engaño de Satanás domingo (ver com. Ap 17:2; Ap 17:6). Estoy sentada como reina. Nótese el tiempo presente del verbo (ver com. “dice en su corazón”). La verdadera iglesia es presentada en la Escritura como una “virgen pura” (ver com. 2Co 11:2). como la novia (“esposa”) de Cristo (ver com. Efe 5:23-32; cf. com. Ap 12:1; Ap 19:7-8). La gran ramera se hace pasar por la novia de Cristo delante de los moradores de la tierra, sobre los cuales pretende ejercer dominio en el nombre de Cristo; pero es una “reina” falsa (cf. Isa 47:6-10), una ramera católica vaticano que nunca tuvo un esposo legítimo, y sin embargo se jacta de sus conquistas. ¿Acaso no la agasajan los “reyes” y “los grandes” de la tierra (Ap 18:9; Ap 18:23)? ¿No están sometidos a su voluntad como instrumentos dedicados a sus proyectos nefastos? (ver com. Ap 17:2). No soy viuda. Como “viuda” no tendría posición legal ni podría aspirar a la lealtad de los moradores de la tierra. Cf. Isa 47:8; Isa 47:10. En tiempos del NT las viudas, tanto judías como romanas, debían depender de sus hijos si los tenían. Si no, se nombraba a algún hombre como tutor de la viuda, quien no tenía derecho a tomar decisiones ante la ley. Llanto. Lo que menos espera sin duda le sobrevendrá (ver com. Isa 47:11). ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 8
[V.8-> Por lo cual. Es decir, a causa de su arrogante jactancia, su orgullosa exaltación propia, su completa lascivia, su codicia inescrupulosa de poder y supremacía, y su atrevida oposición a la voluntad revelada de Dios de la Santa Biblia y a su ley del Sinaí . Un solo día. Algunos creen que se trata de tiempo profético, y que por lo tanto representa un año literal; pero otros consideran que el ángel está recalcando lo repentino e inesperado de las “plagas” que caerán sobre la Babilonia simbólica, especialmente por su falso sentido de seguridad (Ap 18:7), o que está hablando de un lapso indefinido. En vista de que se dice que el mismo suceso ocurre en “una hora” (Ap 18:10; Ap 18:17; Ap 18:19), parece preferible la segunda explicación (ver com. Ap 17:12; cf. Jer 50:29; Jer 50:31). Además, el tiempo de los verbos que acompañan a las palabras “día” y “hora” (Ap 18:10) sugiere un momento más bien que un período, y por lo tanto parece recalcarse lo repentino e inesperado antes que la duración. Cf. Isa 47:9; Isa 47:11; Jer 50:31; Jer 51:8. Sus plagas. Ver com. Ap 18:4. Muerte. Se presenta primero el resultado final de sus “plagas” (ver com. Ap 18:21). Llanto. Ver com. Ap 18:7. Hambre sin alimento sin agua por las plagas . Durante la cuarta plaga habrá un hambre literal sin comida para los del papado aliados ni agua ni pan ni nada (Ap 16:8-9) que sufrirán los partidarios de Babilonia papado hijas y aliados (cf. Ap 18:1-2); sin embargo, el castigo de Babilonia como organización ocurrirá durante la séptima plaga (Ap 18:18-19), -como es de esperarse en el caso de una entidad figurada tal como la Babilonia simbólica- y concuerda con el carácter sumamente poético y figurado de todo el capítulo 18. Será quemada. O “consumida por el fuego” (BJ). La mujer simbólica, Babilonia, por supuesto “será quemada” con un fuego figurado (cf. Efe 6:16; 1Pe 4:12; ver com. Ap 17:16). Su suerte se describe mediante una figura completamente diferente en el Ap 18:21. Hay una descripción de los acontecimientos aquí predichos en CS 711-715. Fuego. Cf. Jer 50:32; Jer 51:24-25; Jer 51:37. Poderoso. Es decir, es plenamente capaz de llevar acabo su voluntad sobre Babilonia (cf. Ap 17:17). La juzga. ”La ha condenado” (BJ). La evidencia textual establece (cf. p. 10) el texto “la juzgó”. El juicio pronunciado sobre Babilonia es tan cierto que el ángel habla de él como algo ya consumado. Ver com. Ap 16:19; Ap 17:1; Ap 17:17; Ap 19:2. Lo que le acontece no es un accidente, sino un acto deliberado de Dios. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 9
[V.9-> Los reyes de la tierra los que se unieron al papado y obtuvieron la marca de la Bestia . Ver com. Ap 16:14; Ap 16:16; Ap 17:2; Ap 17:12-14. Han fornicado se han unido a ella en el catecismo Domingo . Ver com. Ap 17:2. Vivido en deleites. Ver com. Ap 18:7. Llorarán. O “harán duelo por ella”, “sollozarán por causa de ella”, con llanto fuerte y abundante. Los desventurados “reyes” y “mercaderes” (Ap 18:11) de la tierra, al anticipar su propia suerte inminente se unen en una endecha de muerte por la altanera Babilonia, ahora atormentada sobre su ardiente hoguera fúnebre. El dramático efecto de los Ap 18:9-20, que describen el destino inexorable de la gran ramera Vaticano aliados , es destacado por su exótica forma literaria oriental: prolijidad poética realzada por figuras literarias. La exhortación del cap. 18 es en primer lugar emotiva, pero está reforzada por una lógica incisiva: para los que respondan a la exhortación de Dios de huir de la ira venidera (Ap 18:4), todavía hay la posibilidad de evitar la suerte inminente de Babilonia cómo evitar ser marcado por satanás papado con la marca de la Bestia salid de ella .]
|
|
|
|
LOS REYES DE LA TIERRA VAN A PROPORCIONARLE ESCLAVOS A LOS QUE TENGAN LA MARCA DE LA BESTIA
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver.
[V.10-> Parándose lejos. Sin duda porque comprenden que hace poco habían estado colaborando con Babilonia (Ap 18:3), estaban implicados en sus “pecados catecismo iniquidad ”, y por lo tanto están destinados a compartir sus “plagas” (Ap 18:4). Se dan cuenta de que su suerte está inexorablemente unida a la de ella. No prestaron atención a la exhortación de Dios “salid de ella” (Ap 18:4), y pronto deberán compartir su suerte. Cf. Eze 27:33; Eze 27:35. Ay, ay. Los “reyes” habían esperado recibir “autoridad” (ver com. Ap 17:12) permanentemente con su amante, la Babilonia simbólica; ella les había asegurado que estaba entronizada como “reina” para siempre, y que si echaban su suerte con ella también gozarían de un dominio sin fin (ver com. Ap 17:2); pero comprendiendo demasiado tarde la insensatez de tal proyecto, ahora son acosados por un intenso remordimiento. Gran ciudad. Ver com. Ap 14:8; Ap 17:5; Ap 17:18; Ap 18:7. En el texto griego es muy enfático el reconocimiento de que la Babilonia simbólica tuvo antes poder y grandeza; pero ahora se ve claramente cuán vanas eran sus pretensiones, porque “poderoso es Dios el Señor, que juzga” (Ap 18:8). Babilonia. Ver com. Ap 17:5; Ap 17:18. Una hora. Ver com. Ap 17:12; Ap 18:8. Juicio. Gr. krísis, “juicio”, pero con énfasis en su ejecución, en contraste con kríma, “juicio”, con énfasis en la sentencia (ver com. Ap 17:1). El cap. 17 trata principalmente de la sentencia contra Babilonia; el cap. 18, de la ejecución de esa sentencia. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 11
[V.11-> Mercaderes. Según una interpretación, estos “mercaderes” son los que dirigen literalmente el comercio y los negocios de la tierra, cuyo apoyo financiero y material ha contribuido tanto al lujo, el esplendor y el buen éxito de Babilonia la grande (ver com. Ap 18:7; Ap 18:12-15). Según otra interpretación, éstos son “mercaderes” simbólicos que representan a los vendedores de la mercadería espiritual de Babilonia, los que han vendido sus doctrinas y mandamientos a los reyes y moradores de la tierra (ver com. Ap 16:13-14; Ap 17:2; Ap 17:4; ver com. “mercaderías”). En el Ap 18:23 se dice que estos “mercaderes” son los “grandes de la tierra”. Cf. Isa 23:2; Isa 23:8; Isa 23:17-18; Isa 47:13; Isa 47:15. Lloran y hacen lamentación. Ver com. Ap 18:9. Ninguno compra. Los reyes y los habitantes de la tierra están desilusionados, y se niegan a tener algo que ver con Babilonia. Cf. Isa 23:14; Eze 26:15-18. Mercadería. Gr. gómos, la “carga” de un barco; también la “carga” que lleva un animal; por lo tanto “mercaderías”. Según la primera interpretación mencionada arriba, se trataría de artículos de la industria y el comercio; pero de acuerdo con la segunda interpretación serían las doctrinas y los mandamientos de la Babilonia simbólica, llamados en otro lugar su “vino” (ver com. Ap 17:2). El carácter sumamente simbólico del cap. 18 (ver com. Ap 18:9) tiende a favorecer la segunda interpretación (ver com. “mercaderes”). en la destrucción de Babilonia se pondrá n al flujo de mercaderías corruptas que han sido vendidas y distribuidas en su nombre, y en las cuales ha engañado al mundo. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 12
[V.12-> Mercadería de oro. Los intentos de clasificar los 28 artículos de comercio que se numeran en los Ap 18:12 y Ap 18:13 para deducir de ellos algún significado oculto, carecen de valor exegético. La prolijidad y el carácter ético del cap. 18 sugieren que el propósito e esta lista es destacar la amplitud de los intereses comerciales de Babilonia, si es que se acepta la primera interpretación menciona en el comentario del Ap 18:11, o de acuerdo con la segunda interpretación, para destacar lo abarcante de sus doctrinas y mandamientos corruptos catecismo Domingo misa (ver com. Ap 16:13-14; Ap 17:2; Ap 17:4). Hay una lista similar de “mercaderías” en Eze 27:3-25; Eze 27:33. Madera olorosa. Madera olorosa usada para incienso. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver.
[V.13-> Especias aromáticas. Mejor “amomo”, una planta de la India que tiene semillas aromáticas. Incienso. Ver com. Mat 2:11. Mirra. Gr. múron, “mirra” (ver com. Mat 2:11). Olíbano. Árbol que produce incienso. Vino. Si bien unos pocos MSS omiten el vino, la evidencia textual establece (cf. p. 10) su inclusión. Bestias. Gr. kt’nos, animales domésticos como ganado y bestias de carga. Carros. Gr. réd’, palabra de origen galo o celta, introducida en Asia Menor por los galos que se convirtieron posteriormente en los gálatas. Réd’ es un coche o carruaje de cuatro ruedas. El uso de esta palabra en el Apocalipsis sugiere que el autor había vivido en Asia Menor y se había familiarizado con un término de esa región. Esclavos. Literalmente “cuerpos” (cf. Rom 8:11, etc.). Por supuesto, como mercadería esto significaría “esclavos”. Almas de hombres PERSONAS . Mejor “es decir, seres humanos”. En la Biblia la palabra “alma” a menudo significa “ser humano” o “persona” (ver com. Sal 16:10; Mat 10:28). Compárese con “y cien mil personas” (1Cr 5:21), literalmente “las almas de hombres cien mil”; “con hombres... comerciaban en tus ferias VAN A SER COMERCIO MUNDIAL DE ESCLAVOS EN TODO EL MUNDO ” (Eze 27:13), literalmente “almas de hombres”. Algunos han considerado que “almas de hombres” es una referencia a la naturaleza espiritual de los seres humanos de que aquí se trata. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver. 14
[V.14-> Frutos. Gr. opōra, “frutos” o más específicamente “la estación de los frutos maduros”, a fines del verano o principios de otoño. Simbólicamente puede referirse al tiempo que anticipaba la gran ramera cuando podría gozar plenamente de los frutos de sus deseos (ver com. Ap 17:4; Ap 17:6; Ap 18:7). Codiciados por tu alma. Es decir, “de tu deseo”. “Alma” a menudo equivale al pronombre personal (ver com. Sal 16:10; Mat 10:28; Ap 18:13). Exquisitas y espléndidas. Literalmente “las cosas gordas y espléndidas”, es decir todo lo que contribuía a su vida de suntuosidad y lascivia (ver com. Ap 18:7). Te han faltado. La determinación de la suerte sombría que ha sobrecogido a Babilonia, se repite seis veces con palabras similares en los Ap 18:21-23. Babilonia desciende ahora a la “perdición” descrita en el Ap 17:8; Ap 17:11, para no resurgir jamás. Cf. Jer. 51-26; Eze 26:21; Eze 27:36; Eze 28:19. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver.
[V.23-> Lámpara. Ver com. Ap 1:12. La impenetrable oscuridad de la noche describe vívidamente la ausencia de toda vida. Esposo. Finalizará toda vida social y de familia (cf. Jer 25:10). Tus mercaderes. Ver com. Ap 18:11. Los grandes. Cf. Isa 23:8; Eze 26:17; Eze 27:8; Ap 6:15. Hechicerías espiritismo aparición de Satanás como Jesús en la tierra como María Milagros . Es decir, los engaños practicados por Babilonia para asegurar para sí la obediencia de los habitantes de la tierra. Ver Ap 13:14; Ap 16:14; Ap 19:20; com. Ap 17:2; cf. Isa 47:9; Isa 47:12-13. ]
Apocalipsis (de Juan) 18-> Ver.
[V.24-> La sangre de los santos de los que obedecen la Santa Biblia y la ley del Sinaí sábado séptimo día su sello de Cristo cuando caen las plagas sobre el papado y aliados . Ver com. Ap 16:6; Ap 17:6. Profetas. Ver com. Ap 18:20. Todos los que han sido muertos. La Babilonia simbólica representa la religión apóstata a través de todos los siglos (ver com. Ap 14:8; Ap 17:5-13); sin embargo, los cap. 13 al 18 se refieren más específicamente a la culminación de la apostasía en el fin del tiempo. Por lo tanto, “todos los que han nido muertos” puede muy bien incluir, en sentido general, a los mártires de todas las edades; pero sin duda se refiere especialmente a los que darán sus vidas en la lucha final del gran conflicto entre el bien y el mal, y quizá también a los que Babilonia se propone matar, pero se lo impide la intervención divina (ver com. Ap 17:6; cf. Isa 47:6; Jer 51:47-49. ]
|
|
|
|
LA MARCA DE LA BESTIA EL CATECISMO APOCALIPSIS 13:17 y que nadie pueda comprar nada ni vender, sino el que lleve la marca con el nombre de la Bestia o con la cifra de su nombre.
18 ¡Aquí está la sabiduría! Que el inteligente calcule la cifra de la Bestia; pues es la cifra de un hombre. Su cifra es 666.
Apocalipsis (de Juan) 13-> Ver.
[V.17-> Comprar ni vender 666 solo podrán comprar comida o vender los que se unen al papado para obedecerle su marca . Esta drástica medida será tomada en un esfuerzo por obtener el cumplimiento de los dictados de la imagen EEUU protestantismo aposta ayuda al papado a someter al mundo edad media ; pero no será eficaz (ver com. Ap 14:1; Ap 14:12). Esta medida sin duda traerá consigo el decreto de muerte inquisición (ver com. Ap 13:15). La marca catecismo Domingo 666 . Ver com. Ap 13:16. O el nombre. La evidencia textual establece (cf. p. 10) la omisión de la conjunción “o”. Si se omite, la frase “el nombre de la bestia papado ” estará en aposición con la palabra “marca”. El pasaje entonces podría decir: “la marca: el nombre de la bestia 666 domingo catecismo ” (BA). Esto significaría que la marca que vio Juan en visión era el nombre de la bestia. Esta relación puede compararse con el sello de Dios sábado séptimo día Apoc7:2cap14:7cap14:12 CAP15:2 que se coloca en la frente de los santos (Ap 7:2), con respecto a los cuales Juan declaró más tarde: tenían “el nombre... de su Padre escrito en la frente” Juan cap14:15(Ap 14:1). CE Ap 14:11. Sin embargo, la conjunción “o” aparece en el P47, el más antiguo manuscrito griego que se conoce del Apocalipsis. En tal caso, las frases “la marca catecismo Domingo ”, “el nombre de la bestia papado ” y “el número de su nombre 666 ” unidas por la palabra “o” pueden indicar grados de afiliación con la bestia o su imagen; pero Dios condena esta unión en cualquier grado que sea (Ap 14:9-11). Número de su nombre. Ver com. Ap 13:18. ]
Apocalipsis (de Juan) 13-> Ver. 18
[V.18-> Aquí hay sabiduría. Compárese con la frase “para la mente que tenga sabiduría” (Ap 17:9). La sabiduría que aquí se alaba es sin duda a la cual se refiere Pablo en Efe 1:17. Los seres humanos pueden comprender los misterios de la Palabra de Dios únicamente por medio de la iluminación divina (1Co 2:14). Entendimiento. O “inteligencia”. Los que deseen saber el significado del número misterioso, podrán entenderlo. Cuente. O “calcule”. Número de la bestia. Debe notarse que la bestia ya ha sido plenamente identificada (ver com. Ap 13:1-10). El número proporciona una evidencia que confirma esta identificación. Desde los comienzos del cristianismo se ha debatido mucho el significado del número 666. Uno de los primeros en escribir sobre el tema fue Ireneo (c. 130-202). Identificó a la bestia como el anticristo. Creía que los valores numéricos de las letras de su nombre sumarían 666, y sugirió como muy probable el nombre Teitan el cual a veces se consideraba divino. También sugirió, pero como mucho menos probable, el nombre Latéinos, que era el nombre del último reino de los cuatro que vio Daniel. Pero al mismo tiempo previno que “es por lo tanto más seguro y menos peligroso esperar el cumplimiento de la profecía, que hacer conjeturas y buscar aquí y allí nombres que puedan presentarse pues pueden encontrarse muchos nombres que poseen el número mencionado” (Contra herejías v. 30. 3). El número 666 se ha aplicado a numerosas figuras políticas de la historia desde los días de Ireneo. Pero debe notarse que como la bestia ya ha sido identificada, el número -sea cual fuere su significado- debe tener relación con ese poder; de lo contrario, no habría razón válida para que el ángel diese a Juan en este momento de la narración profética la información contenida en el Ap 13:18. Una interpretación que se divulgó en el período siguiente a la Reforma, fue que 666 representa o equivale a Vicarius Filii Dei, que significa “vicario del Hijo de Dios”, uno de los títulos del papa de Roma. El valor numérico de las letras que componen este título suma, como sigue, 666 V 5 I 1 C 100 A ---- R ---- I 1 V (U=V) 5 S ---- F ---- I 1 L 50 I 1 I 1 D 500 E ---- I 1 666 Esta interpretación está basada en la identificación del papa como el anticristo, concepto que se expuso claramente en la Reforma. El principal expositor de esta interpretación fue Andreas Helwig (c. 1572-1643; ver L. E. Froom, The Prophetic Faith of Our Fathers, t. 2, pp. 605-608). Desde los días de 338 Helwig muchos han adoptado esta interpretación. Como este Comentario identifica a la bestia como el papado, también acepta este punto de vista como el mejor que se ha presentado hasta ahora, aunque reconoce que en el criptograma puede implicarse más de lo que contiene esta interpretación. En cuanto al título Vicarius Filii Dei, la revista católica Our Sunday Visitor, del 18 de abril de 1915, informó en respuesta a la pregunta: “¿Cuáles son las letras que se supone que están en la corona del papa, y qué significan, si es que tienen significado?” Respuesta: “Las letras grabadas en la mitra del papa son éstas: Vicarius Filii Dei, que en latín significan Vicario del Hijo de Dios. Los católicos sostienen que la iglesia, que es una sociedad visible, debe tener una cabeza visible” (p. 3). La edición de la misma revista del 15 de noviembre de 1914, admitía que los números latinos sumados daban un total de 666, pero añadía que muchos otros nombres también dan ese total. En el número del 3 de agosto de 1941, p. 7, nuevamente se trató el tema Vicarius Filii Dei, y se afirmó que ese título no está escrito en la tiara del papa. La tiara, se afirmaba, no lleva inscripción alguna (p.7). La Catholic Encyclopedia distingue entre mitra y tiara. Describe la tiara como un ornamento que no es litúrgico, y la mitra, como uno que se usa para ceremonias litúrgicas. Si la inscripción Vicarius Filii Dei aparece en la tiara o en la mitra, no tiene verdadera importancia. Se admite que el título se aplica al papa, y eso es suficiente para los propósitos de la profecía. Número de hombre. La bestia representa una organización humana. Seiscientos sesenta y seis. Si bien algunos MSS dicen 616 y 646, la evidencia textual tiende a confirmar el número 666. ] Apocalipsis 16:2 El primero fue y derramó su copa sobre la tierra; y sobrevino una úlcera maligna y perniciosa a los hombres que llevaban la marca de la Bestia y adoraban su imagen
Apocalipsis (de Juan) 16-> Ver. 1
[V.1-> Oí. Ver com. Ap 1:2; Ap 1:10. Una gran voz. Cf. Ap 1:10. Desde el templo. Esta pareciera ser la voz de Dios porque los siete ángeles portadores de las siete plagas ya habían salido del templo (Ap 15:6) y “nadie podía entrar en el templo” (ver com. Ap 16:8). Siete ángeles. En cuanto al significado del número “siete” en el Apocalipsis, ver com. Ap 1:11. Id. Aunque Juan no especifica el momento en que se da esta terrible orden, el contexto demuestra que será proclamada inmediatamente después del fin del tiempo de gracia, pero antes de la venida de Cristo (cf. com. Ap 15:8). Es evidente que la serie de calamidades sin precedentes que aquí se predice es aún futura (ver com. “derramad... las siete copas de la ira de Dios Cristo ”). El hecho de que la primera plaga se derrame sobre los hombres que han recibido la marca de la bestia y adoran su imagen catecismo Domingo santificar las fiestas (Ap 16:2), sitúa las plagas después del aparecimiento de la imagen EEUU LAUDATO SI CATECISMO DOMINGO y de la colocación de la marca 666 (ver com. Ap 13:14-17), y después del pregón del tercer ángel Apocalipsis 14 , que amonesta contra la bestia y su señal 666 (ver com. Ap 14:9-11). Además, el hecho de que las siete últimas plagas constituyan la plenitud de la ira divina sin mezcla de misericordia (Ap 14:10; Ap 15:1; Ap 16:1), claramente muestra que ha terminado el tiempo de gracia para aquellos sobre los cuales caerán que tendrán la marca de la bestia y su imagen papado a y aliados (ver com. Ap 22:11). El hecho de que durante la quinta plaga sede del vaticano los hombres aún sufran las llagas de la primera plaga (Ap 16:11), claramente señala que las plagas serán derramadas una tras otra y dentro de un período relativamente corto (ver com. Ap 16:2). También parece que el juicio de la Babilonia simbólica durante la séptima plaga papado aliados tendrán las plagas Apoc 16:13,14 (Ap 16:19), precederá al juicio de los reyes de la tierra en el momento de la venida de Cristo (ver com. Ap 17:16; Ap 18:11; Ap 18:20; Ap 19:21-19; cf. Ap 6:15-17; Ap 14:14). Derramad... las siete copas. Es decir, castigad la tierra con las calamidades representadas por las siete copas (Ap 15:7). Las siete últimas plagas son parecidas en ciertos aspectos a las diez plagas de Egipto (Exo 5:1 a 12:30). Ambas son una manifestación de la superioridad de la autoridad y el poder de Dios. Ambas terminan con la derrota decisiva de los hombres que han preferido desafiar a Dios, y por lo tanto concluyen con la liberación de su pueblo escogido de una situación que de otra manera sería irremediable. Ambas demuestran la justicia de Dios y dan honra y gloria a su nombre. Cada una de las diez plagas de Egipto fue completa y dolorosamente literal, y cada una tenía el propósito de demostrar cuán falsas eran las pretensiones de la religión falsa y cuán vano era confiar en ella (ver com. Exo 7:17; Exo 12:12; cf. PP 344, 822-824). Las siete últimas plagas también serán literales, y cada una asestará un golpe decisivo contra algún aspecto de la religión apóstata católica aliados Madre e Hijas , y por lo tanto tienen matices simbólicos. Por ejemplo, es evidente que el primer ángel no derramó un compuesto químico literal contenido en una copa literal sobre los hombres que habían recibido una señal literal impuesta por una bestia literal; pero el ángel quizá sea literal, y los hombres sobre quienes cae su copa son sin duda literales, y sus sufrimientos son igualmente literales. El contenido simbólico de la tercera plaga es evidente (Ap 16:5-6). La ira de Dios. Ver com. 2Rey 13:3; Ap 14:10. Quizá pueda preguntarse por qué Dios atormenta a los hombres de una manera tan terrible como la que se describe en el cap. 16, después de la terminación del tiempo de gracia, cuando ya no habrá oportunidad para arrepentirse. ¿Por qué no viene Cristo inmediatamente para poner fin al reinado del pecado papado y aliados ? En los tiempos del AT Dios permitió a menudo diferentes calamidades, como invasiones, hambres, enfermedades, terremotos y otras más, como medios de corrección y disciplina para llamar a la gente al arrepentimiento (Isa 1:5-9; Isa 9:13; Isa 10:5-6; Isa 26:9; Jer 2:30; Jer 8:3; Ose 7:10; Jne 1:4; Jne 2:12-14; Amo 4:6-11; Hag 1:5-11; ver com. 1Sa 16:14; 2Cr 18:1-8). Es evidente que las siete últimas plagas no pueden tener un propósito tan benévolo (ver com. “Id”); pero a pesar de todo no puede quedar duda de que las plagas cumplen una función necesaria 853 en el cumplimiento del plan del ciclo. Puede observarse que las primeras cinco plagas son en cierto sentido de naturaleza similar, pues su propósito es inducir a los hombres a comprender que han estado luchando contra Dios (ver CS 698); pero en vez de arrepentirse lo maldicen con más odio que nunca antes, y se vuelven más rebeldes y contumaces (Ap 16:9; Ap 16:11; Ap 16:21). Las plagas sirven para revelar el espíritu de rebelión que domina totalmente sus corazones. Se comprueba que la cizaña siempre será cizaña (cf. Mat 13:24-30; Mat 13:36-43), y que ¡ajusticia de Dios se hace evidente al destruirla (cf. CS 728). Por otra parte, las pruebas del gran tiempo de angustia que acompañará a las siete plagas demostrarán cuál es el carácter de los santos. También los inducirán a confiar más plenamente en Dios. Cf. com. Ap 7:4. Así como la disposición de morir por otro es la manifestación suprema del amor (Jn 15:13), así también el deseo de matar representa el máximo odio. Durante las dos últimas plagas se producirá una situación que revelará plenamente esa diferencia, aun a los mismos participantes, y tanto para los hombres como también para los ángeles se destacará ¡ajusticia de Dios al poner fin a la historia humana (ver Rom 14:11; Fil 2:10; CS 696-698; cf. PP 265; cf. com. Ap 16:13-14; Ap 16:16-17). Entonces quedará demostrado ante el universo que todos los que componen el pueblo remanente preferirían morir antes que desobedecer a Dios, y que los que escogieron servir a Satanás papado y aliados , matarían inquisición , si les fuera permitido, a todos los que estorbaron su propósito de regir la tierra. Sorprendidos en el mismo acto de intentar hacer cumplir el decreto de muerte, están sin excusa delante de Dios. Ver com. Ap 16:17. De esta manera se traza una línea muy clara entre los que sirven a Dios y los que no le sirven, y por medio de los inconversos se permitirá que el diablo demuestre cómo hubiera sido el universo si se le hubiese permitido dominarlo a su antojo (ver CS 41). Cf. com. Ap 7:1. Sobre la tierra. O sobre los habitantes de la tierra. ]
CATECISMO 666 MARCA DE LA BESTIA PAPADO Y ALIADOS Cuáles son los Diez Mandamiento de la Ley de Dios?CATECISMO
Los Diez Mandamientos de la Ley de Dios son:
1º Amarás a Dios sobre todas las cosas. 2º No tomarás el Nombre de Dios en vano. 3º Santificarás las fiestas.DOMINGO 4º Honrarás a tu padre y a tu madre. 5º No matarás. 6º No cometerás actos impuros. 7º No robarás. 8º No dirás falso testimonio ni mentirás. 9º No consentirás pensamientos ni deseos impuros. 10º No codiciarás los bienes ajenos
DANIEL 7 :25 RATIFICA AL ANTICRISTO PAPADO Y 2TESAL CAP2Y APOCALIPSIS CAP13Y CAP17:8
Daniel 7-> Ver. 25
[V.25-> Hablará palabras. Arameo millin (singular millah), simplemente, “palabras”. La expresión “grandes cosas” (Dan 7:8; Dan 7:20) es una traducción del vocablo arameo rabreban. Millah se traduce “asunto” en Dan 2:5; Dan 2:8; Dan 2:10-11; Dan 2:23; Dan 5:15; Dan 5:26; Dan 7:1; “palabra” en los Dan 4:31; Dan 4:33; Dan 5:10; Dan 7:11; Dan 7:25; Dan 7:28; “edicto” en 3:28; 6:12 y “respuesta” en 2:9. Contra. Arameo letsad. Si bien tsad significa “lado”, letsad no significa, como se esperaría, “al lado”, sino “contra”. Pero aquí parecería significar además “ponerse en lugar de”. Al oponerse al Altísimo, el cuerno pequeño pretendería ser igual a Dios (ver com. 2Ts 2:4; cf. Isa 14:12-14). La literatura eclesiástica abunda en ejemplos de las pretensiones arrogantes y blasfemas del papado. Ejemplos típicos son los siguientes tomados de una gran obra enciclopédica escrita por un teólogo católico del siglo XVIII: “El papa es de una dignidad tan grande y es tan excelso, que no es un mero hombre, sino como si fuera Dios y el vicario de Dios... ”El papa está coronado con una triple corona, como rey del cielo y de la tierra y de la regiones inferiores... ”El papa es como si fuera Dios sobre la tierra, único soberano de los fieles de Cristo, jefe de los reyes, tiene plenitud de poder, a él le ha sido encomendada por Dios omnipotente la dirección no sólo del reino terrenal sino también del reino celestial... ”El papa tiene tan grande autoridad y poder que puede modificar, explicar e interpretar aun las leyes divinas... ”El papa puede modificar la ley divina, ya que su poder no es de hombre sino de Dios, y actúa como vicerregente de Dios sobre la tierra con el más amplio poder de atar y soltar a sus ovejas. ”Cualquier cosa que se diga que hace el Señor Dios mismo, y el Redentor, eso hace su vicario, con tal que no haga nada contrario a la fe” (traducción de Lucio Ferraris, “Papa II”,Prompta Bibliotheca, t. VI, pp. 25-29). Quebrantará. O, “desgastará”. Esto se describe antes con las palabras, “este cuerno hacía guerra contra los santos, y los vencía” (Dan 7:21). La frase describe una persecución continua e implacable. El papado reconoce que ha perseguido y defiende tales hechos como el legítimo ejercicio del poder que pretende haber recibido de Cristo. Lo siguiente está tomado de The Catholic Encyclopedia: ”En la bula ‘Ad exstirpanda’ (1252), Inocencio IV dice: ‘Cuando los que hayan sido condenados como culpables de herejía hayan sido entregados al poder civil por el obispo o su representante, o la Inquisición, el podestá o primer magistrado de la ciudad los llevará inmediatamente y ejecutará las leyes promulgadas contra ellos, dentro del término máximo de cinco días’... Ni podía quedar duda alguna en cuanto a cuáles disposiciones civiles se indicaban, porque los pasajes que ordenaban quemar a los herejes impenitentes 858 estaban incluidos en los decretos papales de las constituciones imperiales ‘Commissis nobis’ e ‘lnconsutibilem tunicam’. La bula antes mencionada ‘Ad exstirpanda’ permaneció de allí en adelante como documento fundamental de la Inquisición, renovada o puesta nuevamente en vigencia por varios papas, Alejandro IV (1254-61), Clemente IV (1265-68), Nicolás IV (1288-92), Bonifacio VIll (1-1303) y otros. Por lo tanto, las autoridades civiles estaban obligadas por los papas, so pena de excomunión, a ejecutar las sentencias legales que condenaban a los herejes impenitentes a la hoguera” (Joseph Blötzer, art. “Inquisition”, t. VIII, p. 34). Pensará. Arameo sebar, “procurar”, “intentar”. Se indica un esfuerzo premeditado (CS 499-500). Tiempos. Arameo zimnin (singular, zeman), término que indica tiempo fijo, como en los Dan 3:7-8; Dan 4:36; Dan 6:10; Dan 6:13, o un lapso como en los Dan 2:16; Dan 7:12. En el Dan 2:21 se da una sugestión en cuanto al significado de la expresión “cambiar los tiempos’. Allí se usan juntas otra vez las mismas palabras arameas que significan “mudar” y “tiempos”. Sin embargo, en ese pasaje Daniel dice que es Dios quien tiene la autoridad de mudar los tiempos. Es Dios quien rige el destino de las naciones. Es él quien “quita reyes, y pone reyes” (Dan 2:21). “En la palabra de Dios contemplamos detrás, encima y entre la trama y urdimbre de los intereses, las pasiones y el poder de los hombres, los instrumentos del Ser misericordioso, que ejecutan silenciosa y pacientemente los consejos de la voluntad de Dios” (Ed 169). Es también Dios quien determina el “tiempo” (arameo zeman) cuando los santos poseerán el reino (Dan 7:22). El esfuerzo del cuerno pequeño para mudar los tiempos indicaría un esfuerzo premeditado para ejercer el derecho divino de dirigir el curso de la historia humana. La ley. Arameo dath, palabra usada para referirse tanto a la ley humana (Dan 2:9; Dan 2:13; Dan 2:15; Dan 6:8; Dan 6:12; Dan 6:15) como a la divina (Esd 7:12; Esd 7:14; Esd 7:21; Esd 7:25-26). Es evidente que aquí se hace referencia a la ley divina, ya que la ley humana puede ser cambiada según la voluntad de la autoridad civil, y tales cambios difícilmente podrían ser el tema de la profecía. Al investigar si el papado ha intentado cambiar las leyes divinas o no, encontramos la respuesta en la gran apostasía de los primeros siglos de la era cristiana cuando fueron introducidas numerosas doctrinas y prácticas contrarias a la voluntad de Dios revelada en las Sagradas Escrituras. El cambio más audaz corresponde al día de descanso semanal. La iglesia apóstata admite sin ambages que es responsable de la introducción del descanso dominical, y pretende que tiene el derecho de hacer tales cambios (CS 499-500). Un catecismo autorizado para sacerdotes dice: “La Iglesia de Dios [es decir, la Iglesia Católica] en su sabiduría ha ordenado que la celebración del día sábado fuese transferida al ‘día del Señor’ “ (Cathechism of the Council of Trent, traducción de Donovan, Ed. 1829, p. 358). Este catecismo fue escrito por orden del gran Concilio de Trento y publicado bajo los auspicios del Papa Pío V. Durante los tiempos del NT los cristianos observaron el sábado, séptimo día de la semana (ver com. Hch 17:2). “ transición del sábado al domingo fue un proceso gradual que comenzó antes de 150 d. C. y continuó durante unos tres siglos. Las primeras referencias históricas que tenemos en cuanto a la observancia del domingo por profesos cristianos aparecen en la Epístola de Bernabé (cap. 15) y en la Primera apología de Justino Mártir (cap. 67), obras que datan aproximadamente del 150 d. C. Ambas condenan la observancia del sábado e instan a observar el domingo. Las primeras referencias auténticas al domingo como “día del Señor” proceden de fines del siglo II y provienen del llamado Evangelio según San Pedro y de Clemente de Alejandría (Misceláneas, v. 14). Antes de la revolución judía instigada por Barcoquebas en 132-135 d. C.,, el Imperio Romano reconocía al judaísmo como una religión legal y al cristianismo como una secta judía. Pero como resultado de esa revolución los judíos y el judaísmo se desprestigiaron. Para evitar la persecución que siguió, de allí en adelante los cristianos trataron por todos los medios posibles de dejar en claro que no eran judíos. Las repetidas referencias que hacen los escritores cristianos de los tres siglos siguientes a la observancia del sábado como una práctica “judaizante”, junto con el hecho de que no hay referencia histórica de la observancia cristiana del domingo como día sagrado antes de la revolución judía, indican el período comprendido entre los años 135-150 como el tiempo cuando los cristianos empezaron a atribuirle santidad de día de reposo al primer día de la semana. 859 Sin embargo, la observancia del domingo no reemplazó inmediatamente a la del sábado sino que la acompañó y completó. Durante varios siglos los cristianos observaron ambos días. Por ejemplo, a comienzos del siglo III, Tertuliano observó que Cristo no había anulado el sábado. Un poco más tarde, en las Constituciones apostólicas, libro apócrifo, (ii. 36) se amonestaba a los cristianos a “guardar el sábado y la fiesta del día del Señor”. A principios del siglo IV el domingo había alcanzado una clara preferencia oficial sobre el sábado. En su Comentario sobre el Salmo 92 Eusebio, principal historiador eclesiástico de esa época, escribió: “Todas aquellas cosas que era deber hacer en el sábado, las hemos transferido al día del Señor, como que le pertenecen de manera más apropiada, porque este día tiene preferencia y ocupa el primer lugar y es más honorable que el sábado judío”. La primera acción oficial de la Iglesia Católica que expresa preferencia por el día domingo fue tomada en el Concilio de Laodicea (c. 364 d. C.). El canon 29 de ese concilio estipula que “los cristianos no han de judaizar y estar sin trabajar en sábado, sino, que han de trabajar ese día; pero honrarán de especial manera el día del Señor, y como cristianos que son, si es posible, no harán ningún trabajo en ese día. Sin embargo, si se los encuentra judaizando, serán excluidos de Cristo”. Este concilio dispuso que hubiera culto en el día sábado, pero designó a ese día como día laborable. Es digno de notarse que ésta, la primera ley eclesiástica que ordena la observancia del domingo, especifica el judaizar como la razón para evitar la observancia del sábado. Además, la rígida prohibición de la observancia del sábado es una evidencia de que muchos estaban todavía ‘judaizando’ en ese día. En realidad, los escritores cristianos de los siglos IV y V con frecuencia amonestan a sus correligionarios en contra de esa práctica. Por ejemplo, alrededor del año 400, Crisóstomo observa que muchos guardaban aún el sábado a la manera judía y estaban así judaizando. Los registros de la época también revelan que las iglesias de Alejandría y Roma fueron las principales en fomentar la observancia del domingo. Por 440 d. C. el historiador eclesiástico Sócrates escribió que “aunque casi todas las iglesias del mundo celebran los sagrados misterios cada semana en sábado, sin embargo los cristianos de Alejandría y Roma, por una antigua tradición, han dejado de hacer esto” (Ecclesiastical History v. 22). Alrededor de la misma fecha Sozomenos (o Sozomeno) escribió que “la gente de Constantinopla, y de casi todas partes, se reúne en el sábado, tanto como en el primer día de la semana, costumbre que nunca se observa en Roma ni en Alejandría”. Hay pues tres hechos claros: (1) El concepto de la santidad del domingo entre los cristianos se originó, principalmente, en su esfuerzo de evitar prácticas que los identificaran con los judíos, y provocaran así persecución. (2) La iglesia de Roma desde muy antiguo fomentó una preferencia por el domingo; y la creciente importancia que se le dio al domingo en la iglesia primitiva, a expensas del sábado, siguió muy de cerca al crecimiento gradual del poder de Roma. (3) Finalmente, la influencia romana prevaleció para hacer que la observancia del domingo fuese motivo de una ley eclesiástica, en la misma forma en que prevaleció para establecer otras prácticas tales como la adoración de María, la veneración de los santos y de los ángeles, el uso de imágenes y las oraciones por los muertos. La santidad del domingo descansa sobre la misma base que esas otras prácticas que no se encuentran en las Escrituras, y que fueron introducidas en la iglesia por el obispo de Roma. Hasta tiempo, y tiempos, y medio tiempo. La palabra aramea ‘iddan, que aquí se traduce “tiempo”, aparece también en el Dan 4:16; Dan 4:23; Dan 4:25; Dan 4:32. En estos pasajes la palabra ‘iddan indudablemente significa “un año” (ver com. Dan 4:16). La palabra que se traduce “tiempos”, que también proviene de ‘iddan, era puntuada por los masoretas como plural, pero los eruditos generalmente están de acuerdo en que debiera puntuarse como dual, indicando así “dos tiempos”. La palabra que se traduce “medio”, pelag puede también traducirse “mitad’. Por eso, es más aceptable la traducción de la Versión Moderna: ‘Un tiempo, y dos tiempos, y la mitad de un tiempo”. Al comparar este pasaje con profecías paralelas que se refieren al mismo período, pero designándolo de otras maneras, podemos calcular el total del tiempo implicado. En Ap 12:14 se denomina a este período “un tiempo, y tiempos y la mitad de un tiempo”. Un poco antes, en Ap 12:6, se hace 860 referencia al mismo período al decir “mil doscientos sesenta días”. En Ap 11:2-3 la expresión “mil doscientos sesenta días” equivale a “cuarenta y dos meses”. Así queda claro que un período de tres tiempos y medio corresponde con 42 meses, que a su vez son representados como 1.260 días, y que un “tiempo” equivale a 12 meses o 360 días. Este período puede llamarse un año profético. Sin embargo, no debe confundirse un año profético de 360 días ó 12 meses de 30 días cada uno con el año judío, que era un año lunar de extensión variable (tenía meses de 29 y de 30 días), ni con el calendario solar de 365 días (ver t. 11, pp. 114-115). Un año profético significa 360 días proféticos, pero un día profético representa un año solar. Esta distinción puede explicarse así: Un año profético de 360 días no es literal sino simbólico. Por eso sus 360 días son proféticos, no literales. Según el principio de día por año, ilustrado en Num 14:34 y Eze 4:6, un día en profecía simbólica representa un año literal. Así un año profético, o “tiempo”, simboliza 360 años naturales, literales, y de la misma manera un período de 1.260 ó 2.300 o de cualquier otra cantidad de días proféticos representa la misma cantidad de años literales (es decir, años solares completos, marcados por las estaciones que son controladas por el sol). Aunque el número de días de cada año lunar era variable, el calendario judío se corregía con la adición ocasional de un mes extra (ver t. II, pp. 106-107), de modo que para los escritores bíblicos -al igual que para nosotros- una larga serie de años siempre era igual al mismo número de años solares naturales. En cuanto a la aplicación histórica del principio de día por año ver pp. 41-80. La validez del principio de día por año ha sido demostrada por el cumplimiento preciso de varias profecías calculadas por este método, en particular la de los 1.260 días y la de las 70 semanas. Un período de tres años y medio contados en forma literal es completamente exiguo para cumplir los requisitos de las profecías de 1.260 días con relación al papado. Pero cuando, de acuerdo con el principio de día por año, el período se extiende a 1.260 años, la profecía tiene un cumplimiento excepcional. En julio de 1790, treinta obispos católicos se presentaron ante los que encabezaban el gobierno revolucionario de Francia para protestar por la legislación que independizaba al clero francés de la jurisdicción del papa y lo hacía responsable directamente ante el gobierno. Preguntaron si los dirigentes de la revolución iban a dejar libres a todas las religiones “excepto aquella que fue una vez suprema, que fue mantenida por la piedad de nuestros padres y por todas las leyes del Estado y ha sido por mil doscientos años la religión nacional” (A. Aulard, Christianity and the French Revolution, p. 70). El período profético del cuerno pequeño comenzó en 538 d. C., cuando los ostrogodos abandonaron el asedio a Roma, y el obispo de Roma, liberado del dominio arriano, quedó libre para ejercer las prerrogativas del decreto de Justiniano de 533, y aumentar de allí en adelante la autoridad de la “Santa Sede” (ver com. Dan 7:8). Exactamente 1.260 años más tarde (1798) las espectaculares victorias de los ejércitos de Napoleón en Italia pusieron al papa a merced del gobierno revolucionario francés, quien informó a Bonaparte que la religión romana sería siempre la enemiga irreconciliable de la república, y que “hay una cosa aún más esencial para alcanzar el fin deseado, y eso es destruir, si es posible, el centro de unidad de la iglesia romana, y depende de Ud., que reúne en su persona las más distinguidas cualidades del general y del hábil político, alcanzar esa meta si lo considera factible” (Id., p. 158). En respuesta a esas instrucciones y por orden de Napoleón, el general Berthier entró en Roma con un ejército francés, proclamó que el régimen político del papado había concluido y llevó al papa prisionero a Francia, donde murió en el exilio. El derrocamiento del papado en 1798 marca el pináculo de una larga serie de acontecimientos vinculados con su decadencia progresiva, y también la conclusión del período profético de los 1.260 años. Ver la Nota Adicional al fin de este capítulo, donde hay un bosquejo más completo del surgimiento y la decadencia del papado. ]
|
|
|
Primer
Anterior
2 a 6 de 6
Siguiente
Último
|
|
|
|
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados | |
|
|