Día 1: DIVINO CORAZÓN DE JESÚS.
"He aquí el Corazón que tanto ha amado a los hombres". Jesús mismo nos da su Corazón. Nos lo ha dado todo. Pero permanezco insensible a sus dones. Me olvido de su amor y busco lo que en el fondo no me llena.
Día 2: DIOS ME AMA.
Jesucristo nos muestra al Padre para que le conozcamos y sepamos que es todo amor. Nuestro Dios es Misericordioso. ¿Cómo correspondo a tanto amor? ¿Amo a Dios con todo el corazón, con todo el ser y entendimiento?
Aunque me olvide de Dios, Él no se olvidará nunca de mi.
Día 3: CONFIANZA EN EL CORAZÓN DE CRISTO.
La fe es la ayuda de nuestra vida. Tan necesaria como el aire y la comida. A veces no la expresamos, nos avergonzamos de ser creyentes, la separamos de nuestra vida y se debilita. Cristo lo arriesgó todo por nosotros ¿Y yo qué estoy dispuesto a ofrecer? Jesús pide tu fe para obrar en ti.
Día 4: LA ORACIÓN.
Los apóstoles pidieron al Señor que les enseñara a rezar. Rezar es mantener fresca la relación con Dios. ¿Cuándo rezo? ¿Cómo es mi comunicación con Él? Apartarse de la oración es apartarse de Dios y escuchar otras voces. Sólo Dios habla desde el corazón al corazón, ahí es donde se hace entender y nos impulsa a actuar desde él.
Día 5: LA VIDA, UN REGALO PARA AMAR.
El Corazón de Jesús nos habla del amor a Dios y a los hermanos. No basta con no odiar, no hacer el mal, no ser egoísta. Cristo nos pide hacer el bien, servir, amar, construir. Mi vida ¿se contenta con no hacer el mal o busca hacer el bien?
El Corazón de Jesús anima, consuela, da esperanza, fortalece, perdona, ofrece,...
Día 6: HUMILDES Y SENCILLOS DE CORAZÓN.
Jesús valoró la humildad y sencillez. Ser y vivir desde la humildad es el fundamento de todas las virtudes. El ejemplo lo tenemos en la Virgen María, Dios se fijó en la humildad de su sierva y ella le dejó actuar. Es entonces cuando Dios hace obras grandes a través nuestro.
Día 7: EL CORAZÓN DE JESÚS EN TU CORAZÓN.
Dios penetra lo más profundo de nuestro ser y nos conoce mejor que nosotros mismos. Ante Él no cabe la mentira o el engaño. Vivir desde la verdad contagia y crea amistad, confianza, seguridad. Vivir la vida con autenticidad construye el Reino del Corazón de Cristo y nos hace portadores de su luz y verdad.
Día 8: POR MARÍA AL CORAZÓN DE JESÚS.
Jesús nos da a su Madre. Por voluntad suya, María se convierte en madre de todos. Sus Gracias nos vienen a través de ella. ¿Cómo amo a la Madre de Jesús? ¿Recurro a ella y le rezo?
Ella es ejemplo de seguimiento al Corazón de Jesús, ejemplo de discípula fiel hasta el final. La llena de Gracia para inundamos de las Gracias de su Hijo.
Día 9: EL SANTÍSIMO SACRAMENTO.
Una dulce palabra sale del sagrario: "Venid a mi todos los que estáis cansados y agobiados, que yo os aliviaré". Así habla el Corazón de Dios. Él quiere ser tu fuerza, tu consuelo, tu sentido. Necesitamos alimentamos de Él y beber de la fuente que mana de su Corazón. Desea que vivamos cada día en el Corazón de Jesús. Espera tu respuesta.
ORACIÓN
Corazón de Jesús, llena nuestro mundo de tu amor Tú que, a pesar de las debilidades y egoísmos de los hombres, haces comprender que se ensancha tu Corazón, cuando ves crecer la Civilización del Amor. Haz de nosotros almas generosas que se entreguen por entero a tu proyecto de salvación sobre la humanidad. Sagrado Corazón de Jesús en ti confío. Amén.
PETICIÓN
Sagrado Corazón de Jesús, tú conoces nuestras necesidades e intenciones. Nos has dicho: "pedid y se os dará", lo hago con fe sincera y te confio esta petición... Todo lo espero de tu infinita bondad si es para tu gloría y para nuestro bien. Amén
LETANÍAS
Corazón de Jesús, bondad y amor infinitos. Ruega por nosotros.
Corazón de Jesús, fortaleza de los que sufren. Corazón de Jesús, consuelo de los afligidos.
Corazón de Jesús, digno de toda alabanza.
Corazón de Jesús, salvación de los que en tí esperan. Corazón de Jesús, paciente y lleno de misericordia.
Corazón de Jesús, fuente de vida.
OFRECIMIENTO AL SAGRADO CORAZÓN DE JESUS
¡Divino Corazón de Jesús! Por medio del Corazón Inmaculado de María, te ofrezco las oraciones, obras y trabajos de este día, para corresponder a tu gran amor. Te presento mi vida entera para que se haga tu voluntad y no la mía. Haz que toda mi persona contribuya a la construcción de tu Reino. Que mi corazón responda a los impulsos de tu Corazón. Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.