Mateo 23
1. Entonces habló Jesús a la gente y a sus discípulos, diciendo:
2. En la cátedra de Moisés se sientan los escribas y los fariseos.
3. Así que, todo lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo; mas no hagáis conforme a sus obras, porque dicen, y no hacen.
4. Porque atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo quieren moverlas. (Todos viven a costa del estado. No trabaja ninguno. Todos son progres "defensores de derechos humanos" pero defienden a sistemas que asesinaron a mucha gente. ESA ES LA JUSTICIA QUE HAY EN LA ARGENTINA. TODO MENTIRA. TODO $$$$$$$$)
5. Antes, hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres. Pues ensanchan sus filacterias, y extienden los flecos de sus mantos;
6. y aman los primeros asientos en las cenas, y las primeras sillas en las sinagogas,
7. y las salutaciones en las plazas, y que los hombres los llamen: Rabí, Rabí.
8. Pero vosotros no queráis que os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo, y todos vosotros sois hermanos.
9. Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos.
10. Ni seáis llamados maestros; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo.
11. El que es el mayor de vosotros, sea vuestro siervo.
12. Porque el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido. (Todo es sobervia, todo es vanidad. No hay amor. No hay otra explicacion racional de tanta hipocresia)
13. Mas ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque cerráis el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a los que están entrando.
14. ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque devoráis las casas de las viudas, y como pretexto hacéis largas oraciones; por esto recibiréis mayor condenación.
15. ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque recorréis mar y tierra para hacer un prosélito, y una vez hecho, le hacéis dos veces más hijo del infierno que vosotros.
16. ¡Ay de vosotros, guías ciegos! que decís: Si alguno jura por el templo, no es nada; pero si alguno jura por el oro del templo, es deudor.
17. ¡Insensatos y ciegos! porque ¿cuál es mayor, el oro, o el templo que santifica al oro?