PROMESAS PARA LOS DESCARRIADOS.Quien encubre su pecado jamás prospera; quien lo confiesa y lo deja halla perdón.Proverbios 28:13..Si confesamos nuestros pecados, El es fiel y justo para perdonarnos los pecados y para limpiarnos de toda maldad.1Juan 1:9
“El Señor siente mucha compasión por los que sufren. ¿Qué pecados son demasiado grandes para que él no los perdone? Es misericordioso; por eso está infinitamente más dispuesto a perdonar que a condenar. Es benévolo y no busca el mal en nosotros; sabe de qué estamos hechos; recuerda que somos tan sólo polvo. En su ilimitada compasión y misericordia perdona todos nuestros yerros; nos ama abundantemente cuando aún somos pecadores
“El amor de Dios aún implora al que ha escogido separarse de él, y pone en acción influencias para traerlo de vuelta a la casa del Padre... La misericordia y compasión del amor divino, a manera de una cadena de oro, rodea a cada alma en peligro”
“¿Has vagado lejos de Dios?... Levantaos e id a vuestro Padre. El os saldrá al encuentro muy lejos. Si dais, arrepentidos, un solo paso hacia él, se apresurará a rodearos con sus brazos de amor infinito. Su oído está abierto al clamor del alma contrita. El conoce el primer esfuerzo del corazón para llegar a él. Nunca se ofrece una oración, aun balbuceada, nunca se derrama una lágrima, aun en secreto, nunca se acaricia un deseo sincero, por débil que sea, de llegar a Dios, sin que el Espíritu de Dios vaya a su encuentro. Aun antes de que la oración sea pronunciada, o el anhelo del corazón sea dado a conocer, la gracia de Cristo sale al encuentro de la gracia que está obrando en el alma humana”
“No importa cuál haya sido la experiencia del pasado ni cuán desalentadoras sean las circunstancias del presente, si acudimos a Cristo en nuestra condición actual —débiles, sin fuerza, desesperados—, nuestro compasivo Salvador saldrá a recibimos mucho antes de que lleguemos, y nos rodeará con sus brazos amantes y con la capa de su propia justicia.
“Así como el pastor ama a sus ovejas, y no puede descansar cuando le falta aunque sólo sea una, así, y en un grado infinitamente superior, Dios ama a toda alma descarriada. Los hombres pueden negar el derecho de su amor, pueden apartarse de él, pueden escoger otro amo; y sin embargo son de Dios, y él anhela recobrar a los suyos”
“El cielo espera y anhela el regreso de los pródigos que se han alejado del redil para vagar”
“[Dios] mandaría todos los ángeles de la gloria para socorrer a las almas fieles y poner un cerco en derredor de ellas, antes que permitir que sean engañadas y extraviadas por los prodigios mentirosos de Satanás”
“Los ángeles de gloria hallan su gozo en dar, dar amor y cuidado incansable a las almas que están caídas y destituidas de santidad. Los seres celestiales desean ganar el corazón de los hombres; traen a este obscuro mundo luz de los atrios celestiales; por un ministerio amable y paciente, obran sobre el espíritu humano para poner a los perdidos en una comunión con Cristo aun más íntima que la que ellos mismos pueden conocer”
“No escuches al enemigo cuando te sugiere que te mantengas alejado de Cristo hasta que hayas mejorado; hasta que seas bastante bueno para allegarte a Dios. Si aguardas hasta entonces, no te acercarás nunca a él. Cuando Satanás te señale tus vestiduras inmundas, repite la promesa del Salvador: ‘Al que a mí viene, no le hecho fuera’. (Juan 6:37.) Di al enemigo que la sangre de Cristo te limpia de todo pecado”
“Ahora él [Dios] te invita. Ahora, precisamente ahora, te pide que vuelvas a él sin demora, y él te perdonará y sanará misericordiosamente todos tus desvíos”
“Cuando la tormenta de persecución se desate realmente sobre nosotros, las verdaderas ovejas oirán la voz del verdadero Pastor. Se harán esfuerzos abnegados para salvar a los perdidos, y muchos que se han descarriado del redil se volverán para seguir al gran Pastor”
“El Señor considera de supremo valor la santidad de su pueblo, y permite que sobrevengan reveses sobre individuos, familias e iglesias, con el propósito de que su pueblo pueda discernir el peligro en que se halla y se sienta inducido a humillar su corazón en arrepentimiento delante del él. Tratará con ternura a los que yerran. Les dirigirá palabras de perdón y los vestirá con el manto de la justicia de Cristo. Los honrará con su presencia.
“Los ángeles, que harán por vosotros lo que no podéis hacer por vosotros mismos, esperan vuestra cooperación. Esperan que respondáis a la atracción de Cristo... La obra de los ángeles consiste en acercarse a los probados, tentados y sufrientes. Trabajan mucho tiempo e incansablemente para salvar a las almas por las cuales Cristo murió .