El día 170 del año gregoriano (19 de junio) la Nave espacial "Tierra" está en el punto de su órbita que es el más cercano al Centro de la Galaxia. El centro es el único punto fijo de la Galaxia y por tanto punto fundamental de referencia. ¿Qué mejor momento natural de fin e inicio de órbita y de año? día 1 de la órbita del planeta. Y cada 19 de diciembre, el planeta está frente al Sol y el Centro galáctico.
En la tarde del pasado día 19 de diciembre del 2010 estábamos un amigo y yo en una cafetería charlando y tomando un café. La hora era alrededor de las 5 de la tarde y el Sol estaba ya muy cerca del horizonte, a poco del ocaso, tal como ocurre en esas fechas y a esa hora estando a 40º (de latitud sobre el ecuador, no de temperatura sobre 0) en el hemisferio norte del planeta. La situación del local, de amplios ventanales, en un barrio de edificios bajos permitía que la luz ya casi anaranjada del Sol entrase prácticamente rasante en el interior del local. Yo estaba sentado en una silla (no en una mesa) dentro del local, frente al Sol y por ello recibiendo la luz en pleno rostro mientras saboreaba el café y la conversación... y... el Sol, durante ese día, estaba justo en mitad de la franja de la Galaxia (la llamada Vía Láctea) y justo 4 grados por encima del Centro de la Galaxia. Fue una experiencia muy especial: un café con leche (y con conversación) en alineación con una estrella, el Sol (Centro del sistema planetario) y frente al Centro de la Galaxia, es decir: Centro galáctico, Sol, Tierra. Realmente esto puede vivirlo cualquier humano y en cualquier otra circunstancia cada 19 de diciembre. Esta circunstancia cósmica es algo tan cotidiano como cualquier momento personal especial que se celebra una vez al año.
Desde ese día la Nave espacial Tierra ha dado una órbita al Sol (ha pasado un año) y de nuevo es el día 19 de diciembre. Por la tarde, hacia las 16:30 horas, cuando el sol (de nuevo sobre el centro de la Galaxia) ya está declinando por el oeste, he estado tomando café en una cafetería cuyo ventanal está orientado hacia el este, de modo que la luz del sol no podía llegar directamente al interior del local. Sin embargo, mientras tomaba el café y escribía, ha ocurrido que los rayos de sol han llegado hasta mí, pues se han reflejado en el cristal del primer piso del edificio de viviendas que está frente a la cafetería, así que desde dentro del local he podido ver al sol y al centro galáctico reflejados en el cristal de la ventana de ese edificio gracias a un sutil y sencillo juego de hilos de luz, cristales, ángulos y reflejos... en el Espacio... del Ser galáctico, el mismo en el que está la Casa planetaria que habitamos, la Farola Sol y su Barrio, el Sistema solar...
Aquí vemos la misma escena anterior desde otro punto de la galaxia, de manera que podemos percibir cómo el Sistema solar (Sol, Tierra y demás planetas, etc) está entre Orión y el Centro de la galaxia.
Y cuando la Tierra está en el punto del 19 de diciembre, si volamos desde la Tierra al Sol y miramos hacia la región en la que está la Tierra, la vemos justo encima del brazo elevado de Orión:
Y también podemos SER la propia Galaxia (Ser galáctico o dimensión galáctica de nuestro SER) dando un gran paso hacia atrás y colocándonos en nuestro mismísimo Centro o Corazón galáctico. Así, vemos de canto, al Sistema solar, como una Bandeja de cristal sujetada por Orión llevando varias frutas (planetas) del Árbol galáctico (incluso se ve la inclinada órbita de Plutón).
También, cada 19 de junio, la Tierra está en el punto de su órbita que está más cercano a la excéntrica órbita de Mercurio, es decir que es el punto de la órbita de la Tierra que está alineado con el punto del afelio (punto más alejado del Sol) de la órbita de Mercurio. Por tanto, al revés que en el 19 de junio, cada 19 de diciembre la Tierra está en el punto de su órbita que está más alejado de la órbita de Mercurio, es decir que es el punto de la órbita de la Tierra alineado con el punto del perhelio (punto más cercano al Sol) de la órbita de Mercurio.
La Isla de Agua que llamamos "Tierra" flota orbitando en torno un Faro luminoso que llamamos "Sol", el cual a su vez es uno más del Océano galáctico que es la Galaxia o Ser galáctico el cual tiene su centro u Ombligo. Entre los "náufragos" y tripulantes humanos que estamos en la Nave Tierra, los astrofísicos piensan que es un agujero negro, una especie de Remolino, lo cual es un chupador de la propia luz de las fuentes luminosas que lo conforman, como las pupilas de los ojos chupan luz. Si nosotros somos náufragos, el Ser galáctico sería un gran autófago.
Tras cada hombre viviente se encuentran treinta fantasmas, pues tal es la proporción numérica con que los muertos superan a los vivos. Desde el alba de los tiempos, aproximadamente cien mil millones de seres humanos han transitado por el planeta Tierra. Y es en verdad un número interesante, pues por curiosa coincidencia hay aproximadamente cien mil millones de estrellas en nuestro universo local, la Vía Láctea. Así, por cada hombre que jamás ha vivido, luce una estrella en ese Universo.
(Arthur C. Clarke, Prólogo de la novela "2001: Una Odisea Espacial")
Igual que el punto de "en punto" del reloj, el Centro de la galaxia es el punto de referencia fundamental del Ser galáctico (galaxia) para nuestra orientación en el Espacio, el cielo espacial, y el planeta (Madre) en el que estamos, así como la estrella Sol, hacen de puente para ayudarnos. Cualquier célula hematíe que trabaja en el río de la sangre tiene como punto de referencia el corazón, la bomba que bombea sangre e impulsa el vital líquido y a sus "peces" transportadores de oxígeno. El Sol vendría a ser el primer centro de la primera rueda del Reloj galáctico en el que está el Ser planetario de Agua y Tierra (y también nosotros, al menos físicamente). De hecho, cada 19 de junio la Nave Tierra cruza entre el Sol y el Centro de la galaxia. Es el mismo mecanismo que el de la aguja de los segundos cruzando cada minuto entre el centro del reloj y las "en punto". Eso significa que cada año tenemos el Centro galáctico en el cielo de la noche durante unas 6 semanas antes y después del 19 de junio.
La siguiente escena muestra nuestra continua conexión con el Centro galáctico (y con el Centro del planeta, el Corazón de la Madre) y vemos la diferencia en 1 mes (30 grados de desplazamiento de la Tierra por su órbita) mientras pasamos los días desde el 19 de junio al 19 de julio. Si haces click sobre la imagen de la Tierra o del Sol puedes comprobar la diferencia.
Observa que el Sol (Centro del Barrio planetario de la Tierra) y el Centro de la galaxia son puntos fijos unidos por una línea y que sólo la Nave Tierra se desplaza en torno al Sol cruzando dicha línea cada 19 de junio. El mecanismo de un reloj es semejante al éste. Mientras el 19 de junio estamos entre la línea del Centro de la Tierra (Corazón de la Madre) y el Centro de la galaxia a las 12 de la noche, 1 mes después (19 de julio) estamos en la misma línea pero ya hacia las 10 de la noche (2 horas menos o 30 grados más al Oeste). De esta forma, teniendo en cuenta el movimiento del planeta en el Espacio, podemos mantener intuitivamente durante todo el año nuestra orientación respecto al Centro de la Galaxia, punto fundamental de nuestro universo galáctico, de manera que podemos saber en cualquier momento del año (y del día) hacia dónde está el Centro galáctico mientras estamos en una de sus flotantes islas en el Espacio (una de aire y agua, y tierra). Es igual que saber en qué momento del día estamos respecto al mediodía (o en qué momento del año gregoriano respecto al comienzo del año gregoriano) pero en la dimensión espacial y a otra escala. Cuando perdemos la referencia temporal del mediodía nos sentimos perdidos en el tiempo del día.
Las imágenes anteriores están montadas de forma que vemos como si el plano de la órbita de la Tierra coincidiera con el de la Galaxia. Esto nos facilita comprender mejor el punto de "En Punto" de la órbita de la Tierra, pero realmente el plano de la órbita de la Tierra forma un ángulo de unos 60 grados con el plano de la Galaxia, a lo cual se suma el hecho de que el propio planeta Tierra está inclinado respecto al plano de su órbita. Esto podemos apreciarlo si tomamos el plano galáctico como base y lo miramos de canto, y tomando su Centro como punto de referencia, y nos colocamos en un punto "detrás" del Sistema Solar para ver también de canto el plano de la órbita de la Tierra.
De este modo podemos considerar tal momento como el Fin e Inicio del Año de la Tierra (cuando para nosotros es 19 de junio del calendario gregoriano), y como Mitad del Año de la Tierra al momento en que se coloca frente al Sol y el Centro galáctico (cuando para nosotros es 19 de diciembre). ¿Qué sería de nosotros si no conociéramos el reloj ni el calendario? Nos sentiríamos perdidos en el día y el año del tiempo histórico. Así, nos sentimos perdidos en el Tiempo de la Tierra y de la Galaxia. Ni siquiera sabemos que estamos en un Reloj de dimensión galáctica y de enormidad relativa.
Si a ese momento de Mitad de Año de la Tierra (19 de diciembre) se uniera la Luna pasando entre la Tierra y el Sol y haciendo un eclipse nos permitiría ver la Vía Láctea en pleno día. Eso también ocurre, pero con menos frecuencia. Así que si este día 19 de diciembre (o durante una semana antes y después) la Luna eclipsara al Sol al mediodía, veríamos la espléndida franja de la Vía Láctea en pleno día con el Sol (eclipsado por la Luna) y la Luna (eclipsando al Sol) estarían justo encima del Centro de la Galaxia. Podríamos contemplar la belleza y majestuosidad de esa faja de estrellas y polvo de estrellas que llamamos "Vía Láctea", Árbol cósmico en una de cuyas Ramas (sistema solar) hay una Fruta con mucha agua (un planeta) en la que estamos y desde la que podemos ver el Árbol, aunque no distinguir su Raíz (su centro).
Claro que lo veríamos con "permiso" de las nubes que, si estuvieran sobre la región en la que estamos mientras ocurre ese eclipse tan especial, sería un chasco, pues no ocurre "todas las vidas" (no ya todos los años de una vida ni todos los días de todos los años).
Sí ocurrió, por ejemplo, el 24 de noviembre del año 29 de la era cristiana, pues hace 2000 años el paso del Sol sobre el centro galáctico ocurría hacia el 24 de noviembre. Aquel día del año 29 la Luna se unió a la alineación creando un eclipse, como fue el eclipse en Jerusalen. Pasó entre la Tierra y el Sol y proyectó su sombra sobre la superficie de la Tierra y la sombra de la Luna pasó por la región de Jerusalén entre las 12 y las 15 de la tarde. Quien lo viera con un cielo despejado habría visto la franja de la Vía Láctea. Esta era la alineación vista desde la cenital.
El desfase de 25 días del calendario romano juliano/gregoriano entre el 24 de noviembre y el 19 de diciembre en 2000 años humanos (2 días para la Madre Tierra y sus Hijos) es la señal de la imposibilidad de crear estructuras calendáricas "vivas y conscientes" que se adapten por sí solas a la dinámica de los movimientos de la Tierra y el Sol en la dimensión espacial del Universo multidimensional. Realmente eso es labor de algo vivo y consciente de lo que estamos dotados por el simple hecho de existir: la intuición y conciencia multidimensional con la que podemos fluir en tal dinámica universal como un ser y astro más y evolucionar como una unidad más del Universo o Ser universal.
La alineación de la Tierra entre Orión y el Sol y con el Centro galáctico se produce una vez cada año porque la Nave Tierra da vueltas al Sol, pero con la Luna (Luna nueva) es más significativa, pues se produce cada 19 años, y aún más si -visto desde la Tierra- la Luna eclipsa al Sol, lo cual no se produce cada 19 años porque depende del grado de inclinación que en ese momento tenga la órbita de la Luna cuando ésta pasa entre la Tierra y el Sol, pues tal órbita oscila y está en relación con otros factores que hacen más imprecisa la regularidad. De hecho, tal eclipse volvió a ocurrir 475 años más tarde (año 504) y luego 437 años después (año 941). El siguiente sí se produjo otra vez 475 años después (año 1416). Y el siguiente en 1919 (503 años después).
Es eclipse ocurrió en línea Sol / Centro galáctico. 1983 años después, el 15 de junio de 2012, ocurrió otro también esa línea: un eclipse total de Luna. En ciclos mayas 1983 años son 100 Katunes.
La imagen siguiente es una visión del firmamento desde las Islas Galápagos, situadas en pleno océano Pacífico, al oeste del país Ecuador, en el ecuador del Planeta Agua. Desde ahí durante la noche del 19 de junio podemos ver el Ombligo del Ser Galáctico entre los "archipiélagos" (constelaciones) de Escorpio, Ofiuco y Sagitario (el escorpión, el serpentario y el centauro arquero).
La doble imagen es tomada desde el ecuador de la Tierra o Cintura de la Madre Tierra a las 12 de la medianoche del 19 de diciembre. Por ejemplo desde las Islas Galápagos. Vemos la franja de la Vía Láctea y el punto en el que está el Centro de la galaxia. También podemos apreciar los ángulos que forma dicha franja con el horizonte (en este caso ecuatorial) de la Tierra y con la trayectoria aparente que sigue el Sol (la eclíptica, el camino zodiacal, y que viene a representar el plano de la órbita de la Tierra). Vemos que la franja galáctica y el plano de la órbita de la Tierra (o eclíptica del Sol) forman casi un ángulo recto.
La línea azul es el ecuador de la esfera celeste de la Tierra, proyección de su propio ecuador debido a que el planeta está inclinado 23 grados respecto al ángulo recto con el plano de su órbita (la eclíptica). Si pasas el cursor del ratón, una segunda imagen muestra otra vista, ésta desde el espacio, para apreciar mejor la escena con la referencia más natural de la eclíptica en horizontal, y vemos también el mismo sector de la zona ecuatorial del planeta Tierra, en este caso planeta Agua porque lo que vemos es agua del Océano Pacífico en el que están las Islas Galápagos desde las que tomamos la primera vista.
Galaxias, estrellas y un apacible espejo de agua se han combinado en este memorable paisaje de tierra y cielo (clic en la imagen para ampliarla a 960 x 760 píxeles o verla bastante más grande).
El panorama es un mosaico de 12 fotografías tomadas el mes pasado en elSalar de Atacama, un gran depósito de sal en el norte de Chile.
A la izquierda de la imagen se ve la novia del fotógrafo cuando registraba la misma fotogénica escena.
Además de incontables estrellas, el cielo incluye laPequeña y la Gran Nube de Magallanes a la izquierda, mientras que la banda central de la Vía Láctea cruza el firmamento en diagonal desde la esquina superior derecha de la imagen (los objetos astronómicos mencionados están identificados en la imagen de la derecha).
Si continúan la línea de la Vía Láctea, podría parecerles que la galaxia estaría incendiando un sector del horizonte, pero en realidad esa luz se debe al alumbrado público de una ciudad cercana.
La Pequeña Nube de Magallanes. El navegante portugués Fernando de Magallanes y su tripulación tuvieron todo el tiempo del mundo para estudiar el cielo austral mientras realizaban la primera navegación alrededor del planeta Tierra. En consecuencia, dos maravillas celestes fácilmente visibles para los observadores del hemisferio austral se conocen como las Nubes de Magallanes. Estas nubes cósmicas se conocen en la actualidad como galaxias irregulares enanas que, además, son satélites de la Vía Láctea, una galaxia espiral mucho más grande. La Pequeña Nube de Magallanes abarca en realidad unos 15 mil años-luz y contiene varios cientos de millones de estrellas. Situada aproximadamente a 210 mil años-luz de distancia en la constelación del Tucán ("Tucana" en latín), es, entre las galaxias satélites conocidas, la cuarta más cercana a la Vía Láctea, después de la galaxia enana de Can Mayor, la galaxia enana elíptica de Sagitario y la Gran Nube de Magallanes. La espléndida vista también muestra en primer plano dos cúmulos globulares de estrellas: NGC 362 (abajo a la derecha) y 47 Tucunae. Este último es un cúmulo espectacular que se halla a sólo 13 mil años-luz de distancia y en la imagen se ve a la izquierda de la Pequeña Nube de Magallanes (clic en la imagen para ampliarla). Leer la entrada completa.
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 16 de septiembre de 2014. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito de la imagen y derechos de autor: Alex Tudorica(AIfA, U. Bonn).
Nota: Síganme en Twitter (@astrosofista) para saber más sobre el universo y mi mundo. Desde que comencé a tuitear hace seis equinoccios, unos 30 mil tweets ilustran y amplían las más de 1200 entradas publicadas en el blog desde entonces. ¿Qué esperan para unirse a esta gran conversación? Ya somos más de dos mil trescientos.
LA ISLA DE PASCUA O DE RAPA NUI ESTÁ SITUADA EN UN PARALELO DE LA ESFERA TERRESTRE CUYA PROYECCIÓN A LA ESFERA CELESTE ES EL PARALELO EN EL QUE ESTÁ EL PUNTO DEL CENTRO DE LA GALAXIA
La Isla de Pascua (Rapa Nui o Isla Grande, en el idioma rapanui) es una es una situada en la Polinesia, al sur del Océano Pacífico, que pertenece a Chile y está a 3.600 km. de su costa. Tiene una superficie de 163,6 km² y una población de 3.791 habitantes.
El nombre de Isla de Pascua le viene porque fue descubierta el día de Pascua de Resurrección, y es conocida mundialmente por las estatuas o Moais. En la foto de la isla se indica la situación de dos de los alineamientos de moais, y a continuación la ampliación de uno de ellos.
Es una isla volcánica, siendo sus tres volcanes mas grandes El Ranu Raraku, el Rano Kau y el Maunga Terevaka.
806. Juan 16:21 La mujer cuando da a luz, tiene dolor, porque ha llegado su HORA; pero después que ha dado a luz un niño, ya no se acuerda de la angustia, por el gozo de que haya nacido un hombre en el mundo.
Alchemy refers to a range of philosophies and ancient practices which seek to prepare or develop the "elixir of Life" or "immortality" or "longevity" using the philosophers' stone, accomplish the transmutation of base substances into gold, and attain ultimate wisdom. Many alchemical sources treat the various substances, equipment and processes used in alchemical workshops in an allegorical sense, as metaphors for a spiritualdiscipline. Alchemy, in its physical procedures and investigations can be viewed as a protoscience, the precursor to modern chemistry, having provided many procedures, equipment and names of substances which are still in use.
I had discovered, early in my researches, that their doctrine was no mere chemical fantasy, but a philosophy they applied to the world, to the elements, and to man himself. ~ William Butler Yeats