CARAL – MISTERIO INCA
Autor del Blog: Jorge Mier Hoffman en Machupicchu
Caral es la ciudad más antigua del Perú (más de 5000 años desde el presente) y sede de la primera civilización andina que forjó las bases de una organización social propia y singular, que junto a Mesopotamia, Egipto, india, China y Mesoamérica son los focos originarios de cultura en el mundo.
Vista panorámica de tres de las pirámides del Sector Alto tomada desde la cima de la Pirámide Mayor
Ser constructores de colosales edificios con forma de pirámide distingue a la gente de Caral de los demás pueblos de su tiempo en los andes. La pirámide en los andes es un edificio de grandes proporciones usado por los curacas (gobernantes) como el centro de sus actividades, ya sean religiosas, políticas o económicas. Era el símbolo y centro del poder. Allí se realizaron las ceremonias que garantizarían el orden establecido en fechas señaladas por un calendario ceremonial que emulaba el ritmo de la naturaleza.
Las pirámides de Caral son las más antiguas encontradas hasta la fecha en los Andes: datan de hace 5000 años (3000 a.C. aproximadamente). Construir estructuras de este tipo necesitó de un alto grado de tecnología y organización social para afrontar los problemas de su construcción y el elevado gasto de materiales y energía.
Mapa de ubicación.
Esta antigua ciudad de pirámides fue levantada en la margen izquierda del río Supe sobre una gran terraza que está a 350 metros sobre el nivel del mar. Este sitio ocupa un área de alrededor de 65 hectáreas. El valle de Supe es una estrecha quebrada fértil que en éste lugar tiene un ancho máximo de 1.5 kilómetros y alberga a lo largo de su recorrido un gran número de otros sitios con pirámides contemporáneos con Caral como: Era de Pando, Lurinhuasi, Miraya, Allpacoto, Aspero, Chupacigarro, entre otros.
El Proyecto Caral (PEACS)
Hasta antes de las investigaciones arqueológicas en Caral se consideraba que en los inicios de la civilización andina los antiguos peruanos se organizaron en pequeñas aldeas dedicados a la recolección de tubérculos o mariscos y la caza en pequeña escala. Se consideraba, también, que en los momentos previos a la aparición de la cerámica (1800 a.C.) aparecieron las primeras pirámides y templos, como La Galgada o Kotosh, respectivamente, y que los grandes conjuntos de monumentales pirámides corresponden al período siguiente: Inicial (1800 a.C. a 800 a.C.).
Sin embargo todo esto cambió, pues los trabajos e investigaciones realizadas desde 1994 por el Proyecto Especial Arqueológico Caral – Supe (PEACS) dirigidos por la Dr. Ruth Shady han demostrado, con fechados en base al método de datación del carbono 14, que en tiempos tan remotos como hace 5000 años (3000 a.C.) Caral era una vibrante ciudad de monumentales pirámides.
Vista frontal de la Pirámide Menor.
La Dra. Shady y los miembros del PEACS realizaron entre 1994 y 1995 una prospección en el valle de Supe, identificando sitios arqueológicos considerados muy antiguos, determinando sus características, parecidos y diferencias. Fue entonces que eligen a Caral como punto de inicio basados en la ausencia de restos de cerámica en superficie, la diversidad arquitectónica del sitio, el orden aparente en que están ubicadas las pirámides y la monumentalidad de dichas estructuras. En 1996 se iniciaron las excavaciones que no han parado hasta la actualidad (año 2006). Más aún, han elaborado un “Plan Maestro”, documento que da los lineamientos necesarios para convertir el valle de Supe y su patrimonio cultural monumental en un eje de desarrollo socioeconómico integral y sostenible en la región costera nor-central del Perú (Shady 2004).
Caral, cuna de la civilización andina
Se ha planteado sobre Caral que fue cede de una comunidad formada por varios linajes y dirigida por las cabezas o representantes de dichos linajes (Shady, Dolorier y Casas 2000) en donde uno de ellos sería el “principal” (¿Curaca?) y los otros sus contrapartes. Los Curacas de estos linajes conducirían y organizarían la vida de los habitantes de las diversas ciudades y pueblos contemporáneos a Caral como Aspero, Allpacoto, Miraya, Kotosh y La Galgada entre otros. Todos ellos compartían una misma tradición y formaron una amplia y bien organizada red de reciprocidad e intercambio (Shady, Dolorier y Casas 2000). Caral debió ser la cabeza de toda esta red.
Escalinata en el Templo del Altar Circular.
Lo que los mantuvo unidos fue la religión, que se usó como medio de cohesión y coerción (Shady 2004). La religión en esa época fue la política del estado para el control de la población (Shady 2004), de la producción de bienes y su circulación. Ello está representado en los grandes monumentos de carácter religioso (las pirámides) con sus plazas, atrios y altares del fuego sagrado en donde se llevaron a cabo las diferentes festividades del calendario ceremonial, símbolo de su identidad cultural (Shady 2004). Las periódicas reuniones y actividades conjuntas como la renovación de las pirámides permitían el reconocimiento del poder y fortalecían la identidad cultural (Shady 2004).
Todo lo anterior es la base de la civilización andina y están presentes en Caral como los exponentes más antiguos de las principales instituciones peruanas de la época prehispánica, como la reciprocidad (sistema de intercambio y circulación de bienes y servicios), el calendario ceremonial (ligado a la producción, el cultivo y la pesca) o la construcción y renovación de los templos, entre las más destacadas.
Caral hoy
Como hace 5000 años Caral es de gran importancia en la historia del Perú, como centro de investigaciones permanentes, creadores de ciencia y cultura y como polo de desarrollo que impulsará a su región hacia el desarrollo económico y social.
Festival turístico y cultural organizado por el PEACS con la participación de la población local en Caral.