El Efecto determinará la Causa
Hará aproximadamente unos 15 años en una reunión de masones, un hermano comentaba de un hecho extraño que le había sucedido a través de varios años, y era el de que, no pasaba mucho tiempo y se topaba con la misma mujer así desde que era niño y ella niña, y con la cual nunca había intercambiado conversación alguna, y que de hecho la había visto en ese momento de la plática hacia una semana pero ella ya con hijos. Él nunca supo su nombre, ni dónde vivía.
A esa conversación yo reaccioné, volteo y le digo que a mí me ha pasado lo mismo con una mujer, nadie del grupo de masones ahí reunidos le tomó importancia a la que se volvería una interesante conversación. Bien, quizá a usted que me hace el favor de leerme la habrá pasado algo así.
Entonces sigo la conversación con él, le comento si, si a mí me ha pasado lo mismo y me desconcierta, y le comento: si, la verdad no supe la primera vez que vi a esa mujer, pero yo tendría menos de 10 años, y le aclaro, no me enamoré de ella , aunque era una linda jovencita, de cabello castaño y liso, pero si me llamaba la atención.
Luego de niños la deje de ver por un tiempo, y la vuelvo a ver de nuevo caminando en la Plaza la Purísima de Monterrey, yo iba a tomar un camión de transporte, y ella caminaba por la calle Hidalgo y pasó de largo. Luego de eso , la veía con frecuencia en ese mismo lugar por un buen tiempo, creo ella estaría en una escuela del IMSS y yo en una escuela de inglés por el mismo sector, pasó la época de cursos y la deje de ver.
Más tarde, la veía en la Televisión, pues salía ella en un comercial, anunciando ya no recuerdo que, y así al ver la televisión , con frecuencia la veía, hasta que la frecuencia de ver ese comercial ya lo veía como algo mecánico y no le tomé importancia.
De hecho nunca supe su nombre, pero un día, un primo mío cumplía años y me invitó a su fiesta ahí en la colonia Cd. Satélite , ahí vi de nuevo a ese enigmática chica, fue en un momento saliendo de la fiesta salí a buscar algo en mi coche y ella se aproximó y me dijo que bonito tu coche, le dije gracias y ella en segundos se retiró sin más, en eso que llegaba mí en ese momento bellísima novia del otro lado, y mi intención de seguir a esa enigmática mujer se esfumó y me fui a dar de paseos en ese momento mi tan atractiva novia, que luego de esa fiesta vería a mi novia dos o tres veces más, recuerdo esa guapísima novia me dijo , no puedo ser novia de un chico tan feo , y tan tonto, yo tendría en ese momento unos 14 o 15 años.
Y sí, luego de un tiempo me preguntaba por esa enigmática mujer, y un día, me la encuentro en un Gigante, la primer tienda Gigante que instalaron en Monterrey, allá por la Avenida Lázaro Cárdenas, ella iba con un bebé de carriola y yo con mi hijo ya de 3 o 4 años.
El Hermano con el que llevaba la conversación, me comentó mi historia es parecida, muy parecida pero con algunas variantes, y yo le comento que esto iba más allá de lo casual, y agregó que como esa tengo otras anécdotas igual o más interesantes, donde le digo que en el Monterrey esotérico le llamamos “La Red”, más no sé si en otros lugares del mundo le digan así, “La Red” es entre otras cosas algo que invisiblemente nos une a muchos, que estamos en el mismo digamos egregor, y nos interrelacionamos de alguna manera como un poderos engranaje, donde todos somos piezas importantes , y que en momentos determinados provoca algo que cambia toda la escena.
Lo que comento ahora, es un caso ejemplificativo de cómo funciona el universo, un caso digamos entendible, pero el sistema está repleto de estos hecho que por ser tan constantes no nos percatamos de ellos, hechos como, de cuando conocimos a nuestra pareja, o cuando en un momento exacto de nuestra vida determinó para siempre el rumbo total hacia donde estamos parados hoy.
Alcoseri