El Gobierno Municipal, en el marco de la conmemoración de los 75 años del complejo arquitectónico central de Bariloche, inició el proceso de restauración, tanto del espacio como del mecanismo de relojería en si.

Al respecto, la intendenta María Eugenia Martini señaló que "fue un trabajo muy arduo poder recuperar la historia de nuestro Centro Cívico con lo bueno, con lo malo, con las contradicciones, pero que es el punto de encuentro de todos los barilochenses".

Esto lo dijo en el acto de inauguración realizado este martes por la mañana donde además, invitó a "los chicos de todos los colegios" para "conocer que hace 75 años alguien como Bustillo, como Estrada pensaron en una plaza integrada de donde se puede ver el lago y tener un encuentro con la naturaleza".

La jefa comunal destacó al trabajo del actual relojero local Pablo Sanz quien está "siempre cuidando que el reloj funcione, que no se atrase y acude en cualquier momento para su mantención".

En el acto estuvo presente también Olga de Stanoievitch, viuda de Jorge quien durante 20 años se dedicó a el mantenimiento de la maquinaria y expresó su "emoción y agradecimiento con el reconocimiento a mi esposo. El fue muy felíz y venía todos los días a ver a "su nene". Después vino Pablo que siguió con el trabajo espectacularmente", reconoció.

Entre los presentes a la reinauguración, la senadora nacional Silvina García Larraburu, también se mostró emocionada pues "tengo el mejor recuerdo de Jorge, visité su taller que era como un laboratorio".

Recordó que el relojero asistía a la torre "todas las mañanas de una manera muy metódica", y trabajaba en el reloj con dedicación. "Es un orgullo que hoy podamos estar viviendo este aniversario y reencontrarnos con nuestras raíces. Es bueno que podamos recordar los conceptos con que se ideó esta aldea de montaña".

Con este fin se reacondicionó todo el espacio, con una inversión de unos 450 mil pesos, respetando los lineamientos de preservación del patrimonio histórico: entre otras tareas, se realizó un extenso trabajo de pintura, se cambió por completo la instalación eléctrica y se construyó una estructura de vidrio y pvc alrededor de las cuatro esculturas talladas, para protegerlas y al mismo tiempo permitir que los visitantes puedan verlas en detalle.

Además, se instaló una muestra con imágenes históricas de la construcción del Centro Cívico y de los orígenes de Bariloche.

La reapertura de la torre y la inauguración del Paseo del Reloj tiene lugar en el marco de la semana de actividades conmemorativas por el 75 aniversario del Centro Cívico, y a partir de allí el espacio quedará abierto a los visitantes durante todo el día.

De aquí en adelante, aquellos grupos escolares o privados interesados en coordinar visitas guiadas, podrán hacerlo en la Oficina de Informes Turísticos, ubicada en el Centro Cívico.

El reloj de la torre del Palacio Municipal, en el Centro Cívico, fue instalado entre 1940 y 1941 por Gino Libano, con partes originales de origen alemán y danés que la maquinaria aún conserva al día de hoy. Además del mecanismo de relojería, la instalación incluyó la colocación de una gran campana fundida en bronce que lleva impresa la marca Cronos, y las ya clásicas cuatro figuras talladas en madera que, dos veces por día, aparecen sucesivamente debajo del reloj al dar las 12 y las 18 hs.

Las esculturas fueron realizadas por el artista español Casals, que buscó simbolizar lo que en aquel momento histórico representaba las diversas identidades que componían la comunidad del Bariloche de comienzos del siglo XX: el habitante originario, el labrador, el misionero y el militar. Después de pasar décadas sin funcionar, fue restaurado y mantenido durante casi 20 años por Jorge Stanoievitch. (Bariloche Opina)

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