LA GRACIA DEL NUEVO PACTO Al tener tanto miedo de ofender al Dios de la Ley Mosaica, se pierde la libertad de criterio y sensibilidad a la dirección del Espíritu de Dios, confiando así el criterio a otros hombres que "imponen", mediante sus "recomendaciones", los criterios que de manera similar recibieron de otros. Así, mantienen tradiciones que difícilmente pueden dar rienda suelta al gozo del Señor en la adoración y el gozo del Espíritu en el diario vivir. Todo esto porque, o por ignorancia o intención premeditada, se rechaza que la iglesia descansa sobre el fundamento del nuevo pacto en la sangre de Cristo. Así, se impone sobre las consciencias el rigor de una ley de pacto que hace tiempo caducó, con el trágico y tan dañino resultado de que siempre ejercerá su efecto, a corto o largo plazo, en las vidas que inocentemente, o a sabiendas, se someten a ella. Debemos considerar, además, cuál ha de ser la postura evangélica, pastoral de los evangelistas, pastores y demás ministros de Cristo a la luz de que nuestra vida espiritual nos llegó, nuestro llamado se comunicó y nuestro ministerio Dios dado se desarrolla sobre el fundamento del nuevo pacto en la sangre de Cristo y no en un pacto viejo, caducado, ya reemplazado. Consideremos las palabras del apóstol Pablo en su segunda carta a los Corintios; prestemos cuidadosa atención a lo que nos dice:
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"...Dios... nos capacitó como ministros de un nuevo pacto, no de la letra..." 2 Corintios 3:6 __________________________________
"Siendo manifiesto que sois carta de Cristo expedida por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo; no en tablas de piedra sino en tablas de carne del corazón. Y tal confianza tenemos mediante Cristo para con Dios; no que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios, el cual asimismo nos capacitó como ministros de un nuevo pacto, no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, pero el espíritu vivifica. Y si el ministerio de muerte grabado con letra en piedras fue con gloria, tanto que los hijos de Israel no pudieron fijar la vista en el rostro de Moisés a causa de la gloria de su rostro, la cual había de perecer, ¿cómo no será más bien con gloria el ministerio del espíritu?... porque si lo que es pasajero tuvo gloria, mucho más glorioso será lo que permanece" (2 Corintios 3:3-8, 11). Pienso que le será provechoso volver a leer esa porción antes de que siga con estas líneas. ¿Ve usted cómo el apóstol enuncia tan clara y enfáticamente la verdad de que él (y entiéndase los demás ministros verdaderos de Dios) era "ministro de un nuevo pacto"? Esas no son palabras huecas o adornos en su vocablo. ¡No! El establece aquí la clara, contundente y radical diferencia entre aquel tipo de ministerio que trata con la letra y las tablas de piedra y el que produce su efecto en tablas de carne del corazón.
SEÑOR, SOLO TU GRACIA ME BASTA !!
PEDRO PABLO
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