Haz Click               "Pero de día mandará Jehová su misericordia, Y de noche su cántico estará conmigo, Y mi oración al Dios de mi vida". Salmos 42:8  Usar nuestro talento para cuidar de otros   Mateo 24:24 "Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recojes donde no esparcistes."   REFLEXION: Ninguno de nosotros puede afirmar que el Señor no nos ha dado nada, porque al menos hemos recibido un talento. Este talento es la  semilla para sembrar y los bienes para esparcir. De modo que, debemos segar donde el Señor no ha sembrado y recoger donde no ha aventado. Lo que el Señor nos dio contiene el elemento productivo. Dondequiera que usemos nuestro talento habrá un resultado productivo, pero éste fruto depende de que ejercitemos este talento y lo pongamos en uso. El talento producirá si lo usamos; pero si lo escondemos, no producirá ninguna ganancia. Algunos argumentan que no tienen tiempo para ir a visitar a los santos; sin embargo pierden mucho tiempo en chismorreos y charlas vanas. Si vamos al Señor y le pedimos por Su gracia y misericordia de dejar de hablar cosas vanas, ahorraríamos mucho tiempo, el cual podriamos invertir en cuidar de los santos. En el recobro del Señor, cada hermano y hermana debe llevar la carga de cuidar de otros, en especial de los jovenes y de los nuevos conversos. Después de las reuniones, muchos acostumbran a visitar a los que ya conocen. En lugar de hacer esto, deberían aprovechar la oportunidad visitar a los nuevos hermanos y a los jovenes, y aun para comunicarse por alguien que haya trpozado y por quien han estado orando. Si cada uno de nosotros practicara esto, serían atendidos todos los jovenes y los creyentes débiles. Aunque usted sea una persona muy ocupada, todavía tiene tiempo de cuidar de alguien más, siempre y cuando tenga el corazón de hacerlo y esté dispuesto a ejercitar su talento. Si tan sólo invirtiéramos diez minutos con alguien. podríamos ser de gran ayuda para la edificación de esa persona. Cuando alguien es pastoreado de esa manera, se sentirá contento, reconocerá que ha sido ayudado y deseará recibir más ayuda. Si todos practicamos eso, nadie será desatendido.                         Fondo Myriam_Lhamya