Necesitaba decirselo a mi alma, a mi vida, a mi corazon.
Necesitaba decircelo urgentemente,
que Dios es bueno,
que Dios es maravilloso,
y que el me creo con un proposito.
y alli estaba,
en la Palabra de Dios.
Lo dice con una gran promesa, que Dios no ha desamparado a los que en El han confiado.
Eso me lleno de vida, me dio esperanzas, y nuevamente, las alas de mi fe, se renovaron, un nuevo sol brillo ante mis ojos, y volvi a creer en Dios, con mas fuerza, con mas vigor, con mas certeza.
La alegria visito mi corazon,
senti deseos de ver el dia de mañana,
de correr por los campos
como corren los cervatillos.
Pude disfrutar de las huellas
que dejan las gaviotas en el viento,
del lenguaje de las flores,
de las caricias de las manos de Dios
en mi alma,
y de la voz del Espiritu Santo.
Este dia, mi alma necesitaba que le dijera
que Dios es bueno.
y Dios me lo confirmo,
me ayudo,
me levanto
y me amo.