VICTORIA EN MEDIO DE LA ADVERSIDAD
DANIEL 6: 22 Mi Dios envió su ángel, el cual cerró la boca de los leones, para que no me hiciesen daño, porque ante él fui hallado inocente; y aun delante de ti, oh rey, yo no he hecho nada malo.
23 Entonces se alegró el rey en gran manera a causa de él, y mandó sacar a Daniel del foso; y fue Daniel sacado del foso, y ninguna lesión se halló en él, porque había confiado en su Dios.
Aunque tu alma esté entre leones, los leones están encadenados. Cuando Daniel fue echado en el foso de los leones, los leones estaban hambrientos y lo habrían devorado pronto; pero ustedes saben por qué razón no pudieron tocarlo. Ah, el ángel llegó. Justo cuando los fieros leones estaban a punto de atacar a Daniel, descendió veloz del cielo, y se puso enfrente de ellos. "¡Silencio!", -gritó- y ellos se quedaron inmóviles como una piedra. Eso dice el texto: "Mi Dios envió su ángel, el cual cerró la boca de los leones." Ellos tenían dientes poderosos, pero sus bocas estaban cerradas.
Cuando el pueblo de Dios está en el horno, el Hijo de Dios está también en el horno. Él no dejará solos a aquellos que no lo abandonan. Si nos asimos a Él, tengan la seguridad de que Él se asirá a nosotros hasta el fin. Entonces, no teman a los leones. Nuestro Sansón se volverá contra ellos, y los destrozará en un instante si la hora es llegada.
Además, ustedes, cuyas almas están entre leones, deben recordar que saldrán ilesos del foso de los leones. Daniel fue echado en el foso. Darío no pudo dormir esa noche, y no esperaba encontrar ningún hueso de Daniel cuando fue en la mañana, y, por eso comenzó a llamarlo a voces. Cuán sorprendido se quedaría cuando Daniel respondió que su Dios lo había preservado. Cuán agradecido estaría de sacarlo del foso.
Tú también, amado hijo de Dios, saldrás ileso del foso. Habrá una resurrección de los cuerpos del pueblo de Dios al final. El calumniador podrá difamar el carácter de un hombre verdadero, pero ni un solo carácter de los hombres verdaderos será enterrado jamás lo suficiente para que se pudra. Su justicia se proyectará como luz, y su juicio como el mediodía. No necesitan tener miedo, sino que, así como Daniel salió del foso hacia la dignidad, así todo hombre que sufra por Cristo recibirá honor y gloria e inmortalidad "en aquel día."
Recuerden que si están entre leones ahora, se aproxima rápidamente el día cuando estarán entre ángeles. Nuestro Dios y Señor, después de estar en el desierto con las bestias salvajes, vio que "vinieron ángeles y le servían."
QUE LA GRACIA DE DIOS REINE EN TU VIDA SIEMPRE.