Las experiencias prácticas de cómo se
nos da en arras el Espíritu
"En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verddad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa" Efesios 1:13-14.
"el cual también nos ha sellado, y nos ha dado las arras del Espíritu en nuestros corazones" 2Cor. 1:22.
Las arras del Espíritu se nos dan para que las disfrutemos.
Cuando me siento desilusionado o deprimido, el Espíritu se
infunde en mí y me reanima. Yo experimento las arras
cada día y a cada momento. Las arras también denotan
que algo nos es dado como garantía, al darsenos el Espíritu
como arras, somos reanimados y estimulados. Cuando las
cosas no tienen esperanza, las arras nos llenan de esperanza.
Dios comenzó a darsenos en arras desde el día que fuimos salvos, y esto continua hasta el día de hoy. por eso el creyente que está en el espíritu no tiene ninguna duda de que Dios está con él. creemos en esto espontaneamente
y sin dificultad porque cada día recibimos las arras
del Espíritu. Dios se da a nosotros en arras continuamente
Cuando estoy débil, Él se infunde en mí como arras y
se convierte en mi aliento. Cuando mis esperanzas decaen,
Él se entrga a mí como arras y me infunde ánimo. Cuando parece que mi fe se desvanece, Él se da a mí como arras
y de inmediato mi fe revive. cuando parce que ya no siento
amor por los hermanos (as), el Espíritu se me imparte como arras y siento dentro de mí más amor por los santos.