Hola mis amados:
Todos tenemos predilecciones, algunos la lectura, otros los chocolates, viajar, coleccionar algo y podría enumerar miles de cosas, pero piensa por un momento que tú para el Señor eres Su predilección, que privilegio saber esto, que Su mayor placer es amarnos, que somos Su especial tesoro, que nos hizo a Su imagen y semejanza y que anhela que tengamos una relación especial con El, por eso que nada te haga pensar lo contrario y que disfrutes siempre de la dulce Presencia del Santo de Israel
PREDILECTOS DE DIOS
Cuando nació mi primera hija, la quería tanto que casi me dolía. Tontamente llegué a pensar que no iba a poder querer tanto a nuestro próximo hijo, o que tendría que dividir mi amor entre los dos para ser justa. Pero cuando nació nuestra segunda hija descubrí con alegría que la amaba tan intensamente como a la primera, aunque de una manera única.
Ese descubrimiento me recordó que nuestro gran Dios es capaz de amar a cada uno de sus hijos totalmente sin quitarle amor a ninguno, porque ama a cada uno de manera única. Por tanto, todo creyente que pide ayuda a Dios la recibirá tan completamente como si nadie más necesitara su atención.
En la vida y enseñanza de Jesús encontramos amplia evidencia de esto. En Juan 10, Él declaró que es «el buen pastor» que llama, cuida y conoce a sus propias ovejas por nombre y es conocido por ellas (vv.3,11,14). Jesús entonces comparó esta relación entre pastor y ovejas con la relación que Él disfruta con su Padre (v.15). ¡Qué especiales somos para Él!
En respuesta a aquellos que nos advierten para que no actuemos como si el Señor tuviera predilectos, una vez escuché a un predicador decir: «¡Claro que Dios tiene predilectos! ¡Todos somos sus predilectos!» Como hijos suyos podemos estar seguros de Su atención y amor. -
Juan 10:3 y a sus ovejas llama por nombre, y las saca.
DISFRUTANDO O QUEJADOTE?
“Dios nos hará responsables por todas las cosas que puso en esta tierra, que debemos disfrutar y que no hemos tomado el tiempo para hacerlo
“Me enseñaste a vivir como a ti te gusta. ¡En Tu presencia soy muy feliz! ¡A Tu lado soy siempre dichoso!” Salmo 16:11 (BLS)
¿Estás quejándote o estás disfrutando la vida? ¿Estás dejando que la vida te pase de largo?
Nosotros queremos disfrutar la vida, de hecho Dios nos hizo para disfrutar la vida, disfrutar Su creación, la familia y el trabajo, todo lo hizo Dios. Sin embargo, muchos viven en el estado de la queja, viviendo sin querer queriendo una vida mediocre, una vida aburrida o un matrimonio de segunda. Todos soñamos con una vida mejor, con una vida de primera, desde niños estamos soñando, llegamos a la universidad y estamos soñando, nos casamos y estamos soñando con una vida excelente. ¿Por qué llegamos a soñar? La verdad es que Dios nos ha creado a Su imagen y semejanza, y Él tiene sueños para conmigo. Dios tenía sueños con Adán y Eva cuando los colocó en el paraíso, Dios tenía un plan hermoso con el hombre y a causa de la desobediencia perdió muchos privilegios, y ocurrió un colapso en la humanidad que hace que muchos en día no disfruten la vida. Satanás vino a matar, robar y destruir, pero Jesús vino a darnos vida en abundancia. Los sueños que Dios tiene contigo son de bienestar, Dios desea que tú tengas éxito y la mayoría no está experimentando el éxito y viven arrastrándose por el lodo. Muchos han sido golpeados por las realidades de la vida y están paralizados con los sueños destrozados, tienen miedo de volver a soñar.
Vivimos en un mundo donde la tragedia y el dolor es el pan de cada día, matrimonios que empezaron felices hoy ya no lo son, y acaban en divorcio. Negocios que empezaron bien, hoy están en quiebra o en bancarrota. Personas que estudiaron una carrera y están trabajando en algo que no les gusta, y nada que ver con su carrera. Muchos hoy viven frustrados, angustiados, estresados en sus trabajos, en su ministerio, que no saben qué hacer, que se preguntan si esta es la vida ¿Cuál es el sentido?, y déjame decirte que esa no es la vida que Dios diseñó para ti.
Dios hizo de ti y de mí un ganador, alguien único y especial. Ahora me dirás que eso es fácil decirlo, que tu realidad es otra, y tienes razón. Alguien dijo: “Somos lo que pensamos”. Eres lo que piensas, lo que estés pensando va a determinar tu destino. Si piensas que eres un perdedor, vas a actuar como un perdedor, y si cambias tu manera de pensar, comienzas a pensar en lo que Dios dice que tú eres, vas a actuar como un ganador y podrás disfrutar más de la vida.
Es tu elección seguir quejándote de la vida o disfrutarla. Tú decides si quieres ir tras tus sueños o quedarte así como estás, esperando a ver qué sucede.
“La felicidad debe ser encontrada en el camino, no al final del sendero, porque entonces el paseo se habrá terminado y ya será muy tarde.” Rupert R. Updegraff
Hoy es un buen día para tomar acción sobre tu vida, primeramente busca la dirección divina y luego busca la ayuda de personas que te lleven a una vida de excelencia. No dejes que tu vida acabe en la queja de no ser feliz, de no haber alcanzado ni siquiera un sueño, de no haber disfrutado con tu pareja, con tus hijos. No te pierdas el paseo, no dejes que los ladrones, asesinos y destructores de sueños acaben con tu vida. Hoy es tiempo de Elevarte y remontarte en las alturas.
Pedro Sifontes
Hoy en día las personas se viven quejando, del afán, del tiempo, de que no pueden, de que se sienten impotentes muchas veces y así van por la vida con esas quejas, es que no han ido al Señor a entregar Sus cargas, a disfrutar de Su especial Compañía, a dar gracias por todo lo que acontece, sea bueno o malo, porque Él está a nuestro lado y ha prometido no dejarnos ni abandonarnos entonces la vida asidos de la mano de Jesús es lo mejor que podemos tener, cambia la queja por la amistad de Cristo el Señor.
Los amo y bendigo en Jesucristo.
MAGNOLIA
MÉTELA EN TU CORAZÓN
Según un predicador escocés, guardar la palabra en el corazón es meter una cosa buena en un buen lugar para un buen fin. Muchos tienen la Biblia en la cabeza, o en el bolsillo. Lo que necesitan es tenerla en el corazón. -D.L. Moody-
"En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti"
Salmo 119:11