Pruebas en edad avanzada .... Amor y paciencia ....

 

Muchas veces tengo que advertiros que perseveréis en amor y paciencia hasta el fin de vuestra vida. Si queréis alcanzar la última cumbre, no deben cesar las pruebas. Vosotros habéis iniciado el camino de vuestra vida conscientemente con la voluntad de seguir en él hasta el fin, para alcanzar de esta manera un grado de Luz en que vais a ser seres bienaventurados. Y mientras este camino no haya terminado, tampoco habrán terminado las pruebas, cuyas aprobaciones cada vez significan haber subido un escalón más hacia las Alturas.

De ningún modo debéis temer el último tramo de vuestro camino por la Tierra porque entrasteis en unión conmigo, lo que siempre significa que me encuentro a lado de vosotros... aunque a veces os encontréis solos y abandonados de Mí - de El que se encuentra tanto más cerca de vosotros cuanto mayor es la desdicha en que os encontráis.

Por eso, siempre sed conscientes de que continuamente debéis poner en práctica el amor y la paciencia... que la actividad en el amor os proporciona fuerza para poder cumplir con lo más pesado - o vencerlo, y que la paciencia os producirá una fuerza interior que es una buena defensa contra el adversario, el que precisamente quiere derrumbar vuestra paciencia para que os excitéis e intranquilicé is - un estado que le facilita su actividad y en que tiene mucho éxito. 

Sed conscientes de que con la paciencia podéis vencer todo, porque entonces le dominaréis y pronto sentiréis mi cercanía - aunque Yo nunca os había abandonado.

Si vuestra vida pasara de manera totalmente uniforme sin la menor prueba o sacudida, vuestro desarrollo quedaría parado, y el resto de vuestra vida en la Tierra sería tiempo perdido, lo que arrepentiríais una vez que estéis en el Más Allá. Pues al acercarse el final de la vida es natural que para cada hombre todo resulte más conflictivo, por lo que sus éxitos espirituales son valorados mucho más, dado que requieren una voluntad y esfuerzos mucho mayores que en el caso de hombres resistentes que todavía se encuentran en la flor de la fuerza de su vida.

Y sed conscientes de que cada día que todavía os está concedido en la Tierra es una Gracia, porque podéis obrar para el bien de vuestra alma - lo que sólo sabréis apreciar dignamente cuando ya habréis dejado el cuerpo atrás. Consta que Yo sé de los esfuerzos que todo esto os costará, y podéis estar seguros de que os pagaré la recompensa correspondiente.

De lo contrario, no tendríais que esperar nada de especial si vuestra vida terrenal transcurriera de manera uniforme, sin exigiros la aplicación de vuestra voluntad ni la puesta a prueba de vuestra fe. Y una vez que haya llegado el último día, me agradeceréis que Yo os haya regalado la Gracia de una vida terrenal muy larga, porque entonces también podréis apreciar qué clase de bienes acumulasteis - suponiendo que hayáis bien aprovechado el tiempo de vuestra estancia en la Tierra.

Pase lo que os pase, ¡Yo siempre estoy cerca de vosotros! Sed conscientes de esto y –cuando os toquen desgracias para poneros a prueba y para que os pongáis en vuestro sito– siempre predominarán el amor y la paciencia en vosotros. Pero no permitís al enemigo de vuestra alma que os domine, porque si íntimamente os rebeláis y perdéis toda paciencia, precisamente esto para él es un arma con la que os irrita para luego imponerse él mismo - en general con éxito.

Pero si os mantenéis equilibrados, y llenos de paciencia os entregáis a vuestro destino, entonces el adversario no puede con vosotros, mientras que Yo puedo surtir tanto más efecto, y seguro que no os abandono en vuestra desgracia y vuestro tormento si tan sólo aprobáis estas pruebas y si os entregáis a Mí, en plena confianza de mi Ayuda...

 

Amén