("La práctica del diálogo es un hermoso ejercicio de amor.")
No cabe la menor duda, que el diálogo es el arte de comunicarnos con las personas, diciendo lo que sentimos y pensamos.
No cabe duda, que es un vínculo recíproco, activo, cambiante que permite y exige que utilicemos palabras, silencios, gestos o actitudes para transmitir al otro, su propio y especial yo, y recibir también especiales respuestas de las otras personas.
Resulta interesante destacar qué fácil y humano es considerar que conceptos como diálogo, conversación, encuentros, comunicación constituyen los pilares que sustentan las relaciones humanas.
Pero frecuentemente, nos encontramos con gran cantidad de confusiones, enojos, equívocos, enemistades y comprobamos que la falta de comunicación, de diálogo son las principales causas de destrucción de las relaciones humanas.
La falta de tiempo, la falta de sinceridad, de confianza, la indiferencia, anulan el diálogo y afectan lamentablemente las relaciones entre las personas.
Si deseamos amarnos los unos a los otros, superar la soledad y compartir nuestra vida diaria con alegría y paz, debemos reconocer el valor del diálogo como base para profundizar las mejores relaciones entre las personas.