sábado 24 de abril de 2010
by DraCaroline
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A través
de la historia ha existido una gran confusión en relación con los
conceptos de culpa y vergüenza. La vergüenza, por ejemplo, casi se
ignoro en la literatura psicológica hasta la última década. A menudo
hablandos del sentimiento de culpa de un individuo cuando es en realidad
vergüenza lo que está sintiendo.
"Y qué? -podrías pensar. "Importa tanto que se confundan las
dos?" Pues si, si nuestra confusión trae como resultado una falta de
entendimiento de nosotros mismos y otros en una terapia inefectiva o en
una continuoa pobre autoestima. Nuestra confusión de vergüenza y culpa,
además, trae como resultado ignorar la dinámica de la culpa debilitante
(viviendo en un estado constante de culpa).
Por ejemplo, se ha dicho que los niños
adultos de alcohólicos sienten culpabiliad si alguien los golpea en
medio de la calle. Creo que no entendieron que no era meramente solo la
culpabilidad expresada sino en su lugar una debilitante culpabilidad. La
culpabilidad debilitante resulta de una debilitante vergüenza.
Existen 5 factores principales que han
contribuido a una histórica confusión entre culpabilidad y vergüenza:
- A causa de ser la vergüenza de
naturaleza aislada, es más fácil expresar sentimientos de culpabilidad
- Existe
más poder personal en la experiencia de la culpa. Sentimos más culpa
por lo que hemos hecho o no hecho y por eso, tienen control sobre
nuestras futuras decisiones. Cuando experimentamos vergüenza, sentimos
desampararo e impotencia.
- Cuando experimentamos culpa, nos da
miedo el castigo, pero cuando recibimos el castigo o reparamos el daño,
se resuelve la culpa. Cuando experimentamos vergüenza, sentimos miedo al
abandono. Hay poco que yo pueda hacer
para borrar la poca valía que como persona siento yo mismo.
- Sentimientos
de vergüenza y culpa frecuentemente ocurren juntos. Frecuentemente se
encuentran fusionados la vergüenza y la culpa y por eso se confunden.
Esto principalmente se aplica a la culpa debilitante a diferencia de la
culpabilidad apropiada.
- A menudo nos sentimos con vergüenza de
nuestra vergüenza. Aunque tengamos miedo del castigo, existe usualmente
alivio en sentirse culpable. El miedo de un abandono más adelante, sin
embargo, a menudo previene la expresión de experiencias avergonzantes o
aún al conciente awareness de sentimientos de vergüenza.
Queridísimos
lectores cuando experimentamos culpa, le echamos la culpa a nuestra
conducta. Cuando experimentamos vergüenza culpamos nuestro carácter y
nuestro ser mismo. Cuando sentimos culpa, podríamos pensar "¿Cómo pude hacer esto?" ¿Cómo puedo reparar
el daño? ¿Cómo puedo pagar el daño que he hecho?; y cuando
sentimos vergüenza, pensamos "Que
estúpida persona soy. Que barbaridad soy un idiota y un tonto. ¿Quién
cariños me va a amar si soy una persona que no vale nada?".
La culpa amigos y amigas se relaciona con
algo malo que hiciste. Cuando sentimos culpa sentimos que le debemos
algo a otro. La vergüenza es asociada con ser malo o sentir inferior y
sin valía. Cuando estamos avergonzados, existe amigos míos una herida en
nuestro propio ser y una pobre autoestima.
Por ejemplo, un adolescente puede sentirse
atraído a la novia de su mejor amigo. El puede sentirse culpable por esa
atracción. Si su amigo encuentra su diario en el que cuenta todas estas
cosas, no solo sentirá culpa sino vergüenza.
Si por
ejemplo vas por la calle manejando y le pegas a un carro. Bueno piensas
tengo que arreglar esto porque te sientes culpable, tienes que reparar
el daño. Pero si creciste con una familia que aborrecía los errores, vas
a cargar el sentimiento de vergüenza por el accidente. "Me siento como un idiota por haber hecho
esto. No voy a culpar a mi amigo si nunca en la vida me vuelve a dirigir
la palabra". El resultado esperado será el rechazo.
Sigan
enviando su consultas gratis a dracaroline@dracaroline.com que con
cariño y respeto orientaré.
Dios Padre, Jesús y María, Padre Pío
muchas gracias por sus intercesiones
DraCaroline
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