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†☼♥REFLEXIONES♥†♥ : PALABRAS Y UNA NOCHE TORMENTOSA
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Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: MAGVBIL  (Mensaje original) Enviado: 05/02/2011 22:37
  
 
 
Hola mis amados:
 
La Palabra de Dios nos dice que el poder de la vida y de la muerte lo tenemos en la lengua, pues con las palabras podemos matar o dar vida, no hay nada mas especial que quien escuche lo que decimos se sienta ministrado, ayudado, consolado o con el bienestar que le produjimos al hablar, de esta forma es que dejamos huella en los demás y estamos llamados a ser bendición, por tanto que nos recuerden por lo que dijimos a cada uno.
 
PALABRAS
 
"y cuando la leyeron, se regocijaron por el consuelo que les impartía." Hechos 15:31
Había un problema serio en las iglesias de Asia Menor. El evangelio había crecido muchísimo y había superado los límites de la comunidad judía. Ahora, en la Iglesia de Cristo, convivían judíos y gentiles bajo la misma Gracia. Pero a los judíos les costaba mucho dejar sus costumbres de tantos años. Querían seguir viviendo con la ley de Moisés.
Así que se generó una situación de tensión y conflicto entre los dos grupos. Los grupos más ortodoxos sostenían que los cristianos debían cumplir con los mandamientos de Deuteronomio y los grupos más liberales se negaban rotundamente. En el medio, había muchos que no sabían que hacer. Y eso generaba mucho dolor.
Se hizo un concilio en Jerusalén para solucionar el conflicto, y la resolución fue coherente y espiritual. Y para comunicarla, los ancianos de Jerusalén envían una carta a los hermanos de Antioquia para aclararles sus dudas. La carta es leída en la iglesia, y los hermanos fueron consolados y regocijados por esas palabras.
Una simple carta reconfortó sus corazones y los alegró. La situación no había cambiado demasiado, las diferencias seguían estando, los grupos antagónicos seguían queriendo imponer sus posiciones, pero ellos estaban consolados.
El viernes mandé un mail, donde contaba que estaba un poco cansado.
Son muchas las cargas cotidianas, las dificultades, el día sigue teniendo 24 horas y harían falta 3 o 4 más para poder cumplir con todas las cosas, pero hubo algo que me impactó. Recibí cientos de mails que alegraron y consolaron mi corazón. Mensajes de amigos queridos y de queridos desconocidos. Palabras de aliento, de comprensión, de consuelo, de compartir en oración, de sostén, de apoyo, de cariño.
Y Dios volvió a hacer el milagro de aplicar su Gracia a una necesidad espiritual. ¡A todos los que escribieron, muchísimas gracias! ¡A todos los que oran, muchísimas gracias! ¡A todos los que no escribieron pero quisieron hacerlo, muchísimas gracias! A todos los que apoyan, sostienen, consuelan, alienta, perfuman, y velan por mi corazón, ¡¡muchísimas gracias!!
Sanaron mi alma, confortaron mi corazón, regocijaron mi mente, y consolaron mi espíritu. Tal vez pienses que fue solo un mail, para mí, fue una caricia de Dios.
Tus palabras sanan.

UNA NOCHE TORMENTOSA
 
En una noche tormentosa hace  muchos años, un hombre de edad avanzada y su esposa entraron a un pequeño hotel en Filadelfia.  Intentando conseguir resguardo de la copiosa lluvia, la pareja se aproxima al mostrador y se dirige al conserje:
-    "Buenas noches, ¿puede darnos una habitación?".
El conserje, un hombre atento con una cálida sonrisa le dijo:
-    "Hay tres convenciones simultáneas en Filadelfia y todas las habitaciones de nuestro hotel y la de los otros están ocupadas. 
El matrimonio se angustió pues era difícil que a esa hora y con ese tiempo horroroso fuesen a conseguir dónde pasar las noche.  Pero el conserje les dijo:
-    "Señores, no puedo enviarlos afuera con esta lluvia.   Si ustedes aceptan la incomodidad, puedo ofrecerles mi propia habitación. Yo me arreglaré en un sillón de la oficina.
El matrimonio lo rechazó, pero el conserje insistió de buena gana y finalmente terminaron ocupando su habitación.
A la mañana siguiente al pagar la factura, el huésped pidió hablar con el conserje y le dijo:
-    "Usted es el tipo de gerente que yo tendría en mi propio hotel.  Quizás algún día construya un hotel para devolverle el favor que nos ha hecho".  El conserje tomó la frase como un cumplido y se despidieron amistosamente. 
Pasaron dos años y el conserje recibió una carta de aquel hombre, donde le recordaba la anécdota y le enviaba un pasaje ida y vuelta a New York con la petición expresa de que lo visitase.  Con cierta curiosidad el conserje no desaprovechó esta oportunidad de visitar gratis New York y concurrió a la cita. 
En esta ocasión el hombre mayor le llevó a la esquina de la Quinta Avenida y la calle 34 y señaló con el dedo un imponente edificio de piedra rojiza y le dijo:
-    "Este es el Hotel que he construido para usted".
El conserje miró anonadado y dijo:
-    ¿Es una broma,  verdad?".
-    "Puedo asegurarle que no", le contestó con una amable sonrisa el hombre. 
Y así fue como William Waldorf Astor construyó el Waldorf Astoria original y contrató a su primer gerente de nombre George C. Boldt (el conserje en la noche lluviosa).  Obviamente George C. Boldt no imaginó que su vida estaba cambiando para siempre cuando hizo aquel favor para atender al viejo Waldorf Astor en aquella noche tormentosa. 
No tenemos muchos "Waldorf Astor" en el mundo, pero un jefe satisfecho o un cliente sorprendido pueden equivaler a nuestro Waldorf-Astoria personal.
 
Hay un refrán que dice que quien es acomedido come de lo que esta escondido, en este mensaje le sucedió a quien dejo que esta pareja pudiera pasar la noche en una cama y el no importaba don donde, por eso el servir trae recompensa  como lo vemos aca, que nos distingamos siempre por esto.
 
Los amo y bendigo en Jesucristo.
 
MAGNOLIA
 

MÉTELA EN TU CORAZÓN 

Según un predicador escocés, guardar la palabra en el corazón es meter una cosa buena en un buen lugar para un buen fin. Muchos tienen la Biblia en la cabeza, o en el bolsillo.  Lo que necesitan es tenerla en el corazón. -D.L. Moody-

"En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti"

Salmo 119:11








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