Hola mis amados:
En la Palabra de Dios nos dice Jesús que no paguemos mal por mal, sino que con el bien venceremos el mal, que nuestro proceder deje mudo al ofensor, porque siempre esperan que nuestra reacción sea similar a la de ellos y al ver que no es así hará que avergonzado se vaya y si no pasa eso, tendremos la satisfacción de que hemos obrado bien para la Gloria de Dios.
CUANDO
Cuando alguien te de una rama con espinas, en vez de tomarla con indignación y correr el riesgo de pincharte las manos, recíbela con serenidad y plántala en el jardín de tu vida. Más, cuando recojas las rosas, no te olvides de mandar por lo menos una para ese alguien. Al fin de cuentas, fue ese alguien quien te dio la rama. Cuando alguien te dé un puntapié, en vez de devolvérselo, recuerda que diste un paso al frente, en tanto que él quedó un paso atrás. Cuando alguien te grite, no respondas con otro grito, para no correr el riesgo de quedarte también ronco. Cuando alguien te escupa, recuerda que un poco de agua y saliva harán que quedes aún más limpio que antes, mientras que el escupidor perdió un poco de saliva que actuaría benéficamente en su digestión. Cuando al fin, alguien se ría de ti, sonríe a ese alguien. Al final, él precisa mucho una sonrisa. ~ Luis Homero ~
¿LO TIENES TODO?
Se acercaba mi cumpleaños, pediré un deseo especial al apagar las velas de mi pastel, me decía mientras cruzaba el parque. Allí estaba, siempre sonriente, un mendigo junto a las palomas que revoloteaban cerca del estanque. De aspecto abandonado, este hombre miraba a las avecillas con una amplia sonrisa en su cara. Me senté a su lado al preguntarle por qué tanta felicidad. Quise también sentirme afortunado al conversar con él y sentirme orgulloso de mis bienes y de ser un hombre al que no le faltaba nada. Tenía un muy buen trabajo y aunque las horas a veces parecían interminables, mi familia tenía todo lo que quería. Me acerqué entonces al hombre y le pregunte, "Caballero ¿qué pediría usted como deseo en su cumpleaños?" Seguro que pedirá dinero, me dije, así le daré unos billetes y habré hecho la obra de caridad del año. Mi asombro fue cuando el hombre me contesta con la sonrisa de siempre, "Amigo si pidiese algo más de lo que tengo seria muy egoísta, yo ya he tenido todo lo que necesita un hombre en la vida y más" Yo estaba verdaderamente intrigado. A mi asombro él continuó "Yo vivía con mis padres y mi hermano antes de perderlos una tarde de junio, conocí el amor de mi padre y mi madre al darme todo lo que les era posible dentro de nuestras limitaciones económicas. Al perderlos, sufrí muchísimo pero entendí que hay otros que nunca conocieron ese amor y me sentí mejor. Cuando joven, conocí una niña de la cual me enamoré perdidamente, un día la besé y estalló en mí el amor hacia aquella joven tan bella que cuando se marcho, mi corazón sufría tanto, pero recordé en ese momento que hay personas que nunca han conocido el amor y me sentí mejor. Un día en este parque un niño correteando cayo al piso y comenzó a llorar, ayude a levantarlo, sequé sus lágrimas con mis manos y jugamos por unos instantes y aunque no era mi hijo, me sentí padre y feliz al saber que muchos no han conocido ese sentimiento. Cuando siento frío y hambre en el invierno, recuerdo la comida de mi madre y el calor de nuestra pequeña casita y me siento mejor porque hay otros que nunca lo han sentido y tal vez nunca lo sientan. Comparto mi pan con un amigo y siento el placer que da compartir con quien lo necesita, hay muchos que jamás sentirán esto. Mi querido amigo, que más puedo pedir a Dios o a la vida cuando lo he tenido todo y lo más importante es que estoy consciente de ello. Lo mismo que yo, nada. Estamos agradecidos del cielo de esto, y sé que usted pronto lo estará también". Quedé mirando el suelo unos instantes, estaba perdido en la grandeza de las palabras de aquel sabio, mis ojos parecían abrirse en la sencillez, después de unos minutos levanté mi vista, aquel hombre ya no estaba a mi lado, pero a lo lejos y avanzando con mucha dificultad veía su encorvada espalda buscando el soporte en un improvisado y viejo bastón. A mi lado sólo quedaron las lomas y un arrepentimiento enorme por la forma en que había vivido sin haber conocido la vida. Jamás pensé que aquel mendigo, tal vez un ángel, me daría el regalo más precioso que se le puede dar a un ser humano... LA HUMILDAD. ~ Anónimo
A veces no le damos el valor a lo que si lo tiene, es tan hermosos los sentimientos y recuerdos de infancia, sentir el amor de nuestros padres, el compartir con nosotros todo, no importando las falencias sino que había unidad y mucho amor, eso es mas valioso que cualquier otra cosa, por ende que avivemos esto en el interior para poder brindar a los demás como este mendigo tan sabio y especial.
Los amo y bendigo en Jesucristo.
MAGNOLIA
MÉTELA EN TU CORAZÓN
Según un predicador escocés, guardar la palabra en el corazón es meter una cosa buena en un buen lugar para un buen fin. Muchos tienen la Biblia en la cabeza, o en el bolsillo. Lo que necesitan es tenerla en el corazón. -D.L. Moody-
"En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti"
Salmo 119:11
|