Hola mis amados:

Mucha razón tiene este escritor Ruso al ver por su experiencia que la belleza física es pasajera y no debe ser el centro de atracción, sino la del carácter fuerte, de lo que hay en nuestro interior es lo que se refleja y deja huella en los demás, por esa razón acéptate como eres exteriormente y afirma, haz crecer y brinda lo que tienes en el corazón, que esto sea lo que los demás recuerden cuando ya no estemos en este mundo.

LA BELLEZA DE UN CARÁCTER FUERTE.?

Hace muchos años atrás, nació un niño en Rusia que se veía a sí mismo tan feo que estaba seguro que no habría felicidad para él en la vida. Lamentaba el hecho de poseer una nariz grande, labios gruesos, pequeños ojos grises y grandes manos y pies. Su fealdad lo había afectado tanto que le pidió a Dios que hiciese un milagro y lo transformase e un hombre apuesto. Hizo la promesa que si Dios le concedía eso, él le daría todo lo que poseía ahora y lo que iría a poseer en el futuro.

Ese muchacho ruso era León Tolstói, uno de los escritores más famosos del mundo del siglo veinte, renombrado por su gloriosa La Guerra y la Paz.

Tolstói admite en uno de sus libros que con el correr de los años ha descubierto que la belleza de la apariencia física que una vez persiguió, no era la única belleza de la vida. Por cierto que no era la mejor belleza. En su lugar, Tolstói comenzó a considerar que la belleza de un carácter fuerte era considerada a los ojos de Dios como el bien más apreciado.

Actualmente hay muchas personas que gastan enormes sumas de dinero en su apariencia física. El carácter, por el contrario, no es cuestión de dinero ni de apariencia. Es cuestión de hacer lo que está bien sin mirar el dinero y de defender lo justo sin mirar las apariencias.

Su carácter se define por lo que es cuando está solo.

Proverbios 11:3

La integridad de los rectos los guiará.

AMOR

"Mas en cuanto al amor fraternal, no tenéis necesidad de que nadie os escriba, porque vosotros mismos habéis sido enseñados por Dios a amaros unos a otros." 1 Tesalonicenses 4:9

Habíamos estado tomando unas conferencias en Bahía Blanca en el 2005, y este mes de octubre, volvimos para que Miriam hable en una conferencia. Habían pasado tres años desde nuestra última visita y solo habíamos tenido algún contacto por mail con algunos amigos más íntimos. Por lo general, las relaciones se modifican con el tiempo, y nunca para mejor. 

Fue gratificante y sorprendente recibir el cariño y el cuidado que los hermanos de la iglesia tuvieron con nosotros. Hermanos que hacía años que no veíamos, nos abrazaron, mimaron y alentaron con la misma frescura que lo hubiera hecho alguien a quien hubiéramos visto la semana anterior.

¿Qué motiva a estas personas a demostrar tanto cariño y cuidado con personas que no ven durante años y que viven a más de 600 kilómetros de distancia? ¿Cómo pueden demostrar tanto amor a sujetos prácticamente desconocidos?

Me resultó sencillo descubrir la razón, cuando leía este texto. Es por la Gracia de Dios. Personas que aprendieron directamente de Dios la grandeza del amor, y la capacidad de amar a pesar de. Personas, que a los ojos de la sociedad son comunes, sin ninguna cualidad distintiva. Personas que pasarían desapercibidas viajando en el tren, que no descollarían en un concurso de ciencia, o que no serían de una multinacional importante.

Pero son personas especiales que tienen la dignidad del cielo, la grandeza del Reino, la sensibilidad del corazón divino. Personas que en la categoría de Dios, son las más importantes de su Iglesia, personas que viven y sienten como Dios. Personas que tienen la capacidad de amar y de demostrarlo. No lo hacen por obligación, ni por conveniencia. Lo hacen porque Dios lo hace. Y eso es suficiente. 

Aprendí mucho en Bahía Blanca, y una vez más pude ver a Dios actuando. No hubo milagros increíbles, ni eventos espectaculares para asombrar a las multitudes. Pero pude disfrutar de la maravillosa Gracia y Amor de Dios, manifestada a través de hermanos preciosos, que aprendieron directamente de Dios la capacidad de amar a otros.

Perdimos algo de esta Gracia. Nos volvimos algo egoístas y discriminadores. Miramos de reojo y con prejuicios. La sociedad actual, nos impulsa a fomentar el individualismo. ¡Gracias a Dios por los hermanos de Bahía, que los puedas imitar!

Cuando en verdad Jesus este en el corazón de Sus hijos esa ahí cuando nos damos cuenta de que se brinda el amor sin fingimiento, expresándolo en hechos, pensamientos y palabras, por eso El mismo dijo que sabrían si somos Hijos de Dios o no por el amor que manifestamos, que siempre que nos encontremos con alguien que se lleve esta impresión para que El sea Glorificado por nuestra causa.

Los amo y bendigo en Jesucristo.

MAGNOLIA

MÉTELA EN TU CORAZÓN 

Según un predicador escocés, guardar la palabra en el corazón es meter una cosa buena en un buen lugar para un buen fin. Muchos tienen la Biblia en la cabeza, o en el bolsillo.  Lo que necesitan es tenerla en el corazón. -D.L. Moody-

"En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti"

Salmo 119:11

Hola mis amados:

Mucha razón tiene este escritor Ruso al ver por su experiencia que la belleza física es pasajera y no debe ser el centro de atracción, sino la del carácter fuerte, de lo que hay en nuestro interior es lo que se refleja y deja huella en los demás, por esa razón acéptate como eres exteriormente y afirma, haz crecer y brinda lo que tienes en el corazón, que esto sea lo que los demás recuerden cuando ya no estemos en este mundo.

LA BELLEZA DE UN CARÁCTER FUERTE.?

Hace muchos años atrás, nació un niño en Rusia que se veía a sí mismo tan feo que estaba seguro que no habría felicidad para él en la vida. Lamentaba el hecho de poseer una nariz grande, labios gruesos, pequeños ojos grises y grandes manos y pies. Su fealdad lo había afectado tanto que le pidió a Dios que hiciese un milagro y lo transformase e un hombre apuesto. Hizo la promesa que si Dios le concedía eso, él le daría todo lo que poseía ahora y lo que iría a poseer en el futuro.

Ese muchacho ruso era León Tolstói, uno de los escritores más famosos del mundo del siglo veinte, renombrado por su gloriosa La Guerra y la Paz.

Tolstói admite en uno de sus libros que con el correr de los años ha descubierto que la belleza de la apariencia física que una vez persiguió, no era la única belleza de la vida. Por cierto que no era la mejor belleza. En su lugar, Tolstói comenzó a considerar que la belleza de un carácter fuerte era considerada a los ojos de Dios como el bien más apreciado.

Actualmente hay muchas personas que gastan enormes sumas de dinero en su apariencia física. El carácter, por el contrario, no es cuestión de dinero ni de apariencia. Es cuestión de hacer lo que está bien sin mirar el dinero y de defender lo justo sin mirar las apariencias.

Su carácter se define por lo que es cuando está solo.

Proverbios 11:3

La integridad de los rectos los guiará.

AMOR

"Mas en cuanto al amor fraternal, no tenéis necesidad de que nadie os escriba, porque vosotros mismos habéis sido enseñados por Dios a amaros unos a otros." 1 Tesalonicenses 4:9

Habíamos estado tomando unas conferencias en Bahía Blanca en el 2005, y este mes de octubre, volvimos para que Miriam hable en una conferencia. Habían pasado tres años desde nuestra última visita y solo habíamos tenido algún contacto por mail con algunos amigos más íntimos. Por lo general, las relaciones se modifican con el tiempo, y nunca para mejor. 

Fue gratificante y sorprendente recibir el cariño y el cuidado que los hermanos de la iglesia tuvieron con nosotros. Hermanos que hacía años que no veíamos, nos abrazaron, mimaron y alentaron con la misma frescura que lo hubiera hecho alguien a quien hubiéramos visto la semana anterior.

¿Qué motiva a estas personas a demostrar tanto cariño y cuidado con personas que no ven durante años y que viven a más de 600 kilómetros de distancia? ¿Cómo pueden demostrar tanto amor a sujetos prácticamente desconocidos?

Me resultó sencillo descubrir la razón, cuando leía este texto. Es por la Gracia de Dios. Personas que aprendieron directamente de Dios la grandeza del amor, y la capacidad de amar a pesar de. Personas, que a los ojos de la sociedad son comunes, sin ninguna cualidad distintiva. Personas que pasarían desapercibidas viajando en el tren, que no descollarían en un concurso de ciencia, o que no serían de una multinacional importante.

Pero son personas especiales que tienen la dignidad del cielo, la grandeza del Reino, la sensibilidad del corazón divino. Personas que en la categoría de Dios, son las más importantes de su Iglesia, personas que viven y sienten como Dios. Personas que tienen la capacidad de amar y de demostrarlo. No lo hacen por obligación, ni por conveniencia. Lo hacen porque Dios lo hace. Y eso es suficiente. 

Aprendí mucho en Bahía Blanca, y una vez más pude ver a Dios actuando. No hubo milagros increíbles, ni eventos espectaculares para asombrar a las multitudes. Pero pude disfrutar de la maravillosa Gracia y Amor de Dios, manifestada a través de hermanos preciosos, que aprendieron directamente de Dios la capacidad de amar a otros.

Perdimos algo de esta Gracia. Nos volvimos algo egoístas y discriminadores. Miramos de reojo y con prejuicios. La sociedad actual, nos impulsa a fomentar el individualismo. ¡Gracias a Dios por los hermanos de Bahía, que los puedas imitar!

Cuando en verdad Jesus este en el corazón de Sus hijos esa ahí cuando nos damos cuenta de que se brinda el amor sin fingimiento, expresándolo en hechos, pensamientos y palabras, por eso El mismo dijo que sabrían si somos Hijos de Dios o no por el amor que manifestamos, que siempre que nos encontremos con alguien que se lleve esta impresión para que El sea Glorificado por nuestra causa.

Los amo y bendigo en Jesucristo.

MAGNOLIA

MÉTELA EN TU CORAZÓN 

Según un predicador escocés, guardar la palabra en el corazón es meter una cosa buena en un buen lugar para un buen fin. Muchos tienen la Biblia en la cabeza, o en el bolsillo.  Lo que necesitan es tenerla en el corazón. -D.L. Moody-

"En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti"

Salmo 119:11