Hola mis amados:
Al hombre siempre lo cautivo las aves, por eso hoy en día hay un sinnúmero de aviones y objetos para volar, pero no dejes que tus sueños y anhelos se queden truncos, de ti depende hasta donde quieras llegar, se libre, disfruta, trabaja y sobretodo no dejes que nada se interponga para que logres los objetivos, por eso vuela alto siempre.
ELEVA TUS ALAS
Cuando levantes tus alas para ir detrás de aquella ilusión que amas, no te derrumbes si encuentras personas que no te dejan elevar. Habrá ocasiones en que intentarán detenerte para que no alcances lo que estás anhelando.
Eres el único que decide hasta donde quieres llegar, la actitud que tomes en esos momentos te darán la altitud.
Fortalece tus virtudes con lo mejor de tu juventud.
Si te aferras a lo que deseas, tu vuelo será elevado, aliméntate de aquellos sueños alcanzados, llénate de mil experiencias y transfórmate en ellas; en lo maravilloso de tenerlas y cree en tu ser; no tengas miedo a volar porque siempre habrá personas con tu mismo ideal que te acompañarán, vive el día a día, comprendiendo que sólo vas a tener esa alegría, lo demás será lo que tu decidas, solo vive, y cuando te eleves recuerda lo grande que eres.
(Desconozco el autor)
SER FELIZ….?
Puedes tener defectos, vivir ansioso y estar irritado algunas veces, pero no te olvides de que tu vida es la mayor empresa del mundo. Solo tu puedes evitar que ella vaya en decadencia. Hay muchas personas que te precisan, admiran y te quieren.
Me gustaría que siempre recordaras que ser feliz no es tener un cielo sin tempestades, caminos sin accidentes, trabajos sin cansancio, relaciones sin decepciones.
Ser feliz es encontrar fuerza en el perdón, esperanza en las batallas, seguridad en el palco del miedo, amor en los desencuentros.
Ser feliz no es solo valorizar la sonrisa, sino también reflexionar sobre la tristeza.
No es apenas conmemorar el suceso, sino aprender lecciones en los fracasos.
No es apenas tener alegría con los aplausos, sino encontrar alegría en el anonimato.
Ser feliz es reconocer que vale la pena vivir la vida, a pesar de todos los desafíos, incomprensiones y períodos de crisis.
Ser feliz no es una fatalidad del destino, sino una conquista de quien sabe viajar para dentro de su propio ser.
Ser feliz es dejar de ser víctima de los problemas y volverse un actor de la propia historia.
Es atravesar desiertos fuera de sí, mas ser capaz de encontrar un oasis en lo recóndito de nuestra alma.
Es agradecer a Dios cada mañana por el milagro de la vida.
Ser feliz es no tener miedo de los propios sentimientos.
Es saber hablar de uno mismo.
Es tener coraje para oír un "NO".
Es tener seguridad para recibir una crítica, aunque sea injusta.
Es besar a los hijos, mimar a los padres y tener momentos poéticos con los amigos, aunque ellos nos hieran.
Ser feliz es dejar vivir a la criatura libre, alegre y simple que vive dentro de cada uno de nosotros.
Es tener madurez para decir "me equivoqué".
Es tener la osadía para decir "perdóname".
Es tener sensibilidad para expresar "te necesito".
Es tener capacidad de decir "te amo".
Deseo que tu vida se vuelva un jardín de oportunidades para ser feliz... Que en tus primaveras seas amante de la alegría. Que en tus inviernos seas amigo de la sabiduría. Y, cuando te equivoques en el camino, comiences todo de nuevo. Pues así serás cada vez más apasionado por la vida.
Y descubrirás que... Ser feliz no es tener una vida perfecta sino usar las lágrimas para regar la tolerancia. Usar las pérdidas para refinar la paciencia. Usar las fallas para esculpir la serenidad. Usar el dolor para lapidar el placer. Usar los obstáculos para abrir las ventanas de la inteligencia.
Jamás desistas. Jamás desistas de las personas que amas. Jamás desistas de ser feliz, pues la vida es un espectáculo imperdible. ¡Y eres un ser humano especial!
Autor Desconocido.
La reflexión sobre la felicidad que alguien se inspiró a escribir, no deja de llevarnos a meditar sobre la simplicidad de lo que esta puede realmente ser. Solemos pensar que para ser felices necesitamos que todas las cosas nos salgan bien o que no tengamos problemas con nadie más.
Pero la verdad es otra muy distinta. Podemos ser felices aún cuando las circunstancias no sean las mejores porque, a final de cuentas, la felicidad es un estado o condición del alma que se reconoce bendecida por Dios y demuestra su contentamiento. ¿Y qué de ustedes? ¿Se atreverán a seguir el consejo del pensamiento de hoy?
Los amo y bendigo en Jesucristo.
MAGNOLIA
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