Hola mis amados:
Hoy en dia se pregona que se necesita la paz, que no haya mas conflictos entre las naciones o pueblos, que hagamos lo necesario para lograrlo y eso esta bien, pero debemos tenerla es interiormente, mientras en el corazón de los hombres no exista, es ahí donde todo comienza, por eso solo Jesús es quien nos puede llenar y saciar de la verdadera paz para que la demos a conocer con nuestros hechos y palabras.
VIVE EN PAZ
Isaac vivió entre los filisteos, los cuales demostraron ser vecinos intratables. Él se había vuelto tan poderoso y rico que ellos le temían y le pidieron que se fuera de su territorio. Puesto que era mucho más poderoso que ellos, Isaac pudo haber rehusado. Sin embargo, accedió y se mudó a un valle cercano adonde su padre Abraham había cavado unos pozos años antes.
Los filisteos habían obstruido los pozos después de la muerte de Abraham. Cada vez que Isaac abría uno de nuevo, ellos decían que les pertenecía, a pesar de que no lo estaban usando.
Sencillamente eran contenciosos. Pero Isaac prosiguió avanzando hasta que entró en área adonde los filisteos no protestaron por su derecho al agua.
Yo he encontrado gente así. Cuando mis hermanos y yo éramos chicos y jugábamos a la pelota, teníamos que tener mucho cuidado con los lanzamientos, porque el vecino confiscaba todas las pelotas que llegaban a su patio.
Es difícil que a uno le caigan bien personas como esas, pero Jesús hasta llegó a decir que debemos amarlas, orar por ellas y ser buenos con ellas. Puede que no sea fácil, y esas personas intratables podrían no cambiar. Sin embargo, según Romanos 12:18, aún así debemos hacer todo lo posible por vivir en paz con todo el mundo.
Romanos 12:18
Si es posible, en cuanto de vosotros dependa, estad en paz con todos los hombres.
LA ALTIVEZ NOS IMPIDE CRECER...
Por: Fernando A. Jiménez
En la naturaleza humana nos acompaña la inclinación a permitir que la soberbia gobierne nuestra existencia conforme vamos creciendo espiritual, profesional o eclesialmente. Pareciera que la prosperidad --cualquiera que sea su manifestación- - nos perjudica. Es como si construyéramos un castillo que se eleva al cielo, y no estamos preparados para que las circunstancias cambien y debamos volver al comienzo de todo.
Quizás no sea así en su caso, pero puedo asegurarle que un alto porcentaje de las personas que le rodean incurren en este error...
Una persona humilde y sencilla crea puentes de diálogo con quienes le rodean. Constituyen la generación de hombres y mujeres cuya personalidad es atrayente. Los orgullosos y arrogantes --en cambio-- experimentan el rechazo. No crean las condiciones propias para que se les acerquen.
Dios ama la sencillez y no comparte una actitud altiva, como lo describe el salmista: “No hay lugar en tu presencia para los altivos, pues aborreces a los malhechores.”(Salmos 5:5).
Es probable que, sin proponérselo, haya incurrido en la altivez. No lo reconoce porque nadie le había advertido sobre ese peligro. Pero usted puede cambiar. Basta que examine sus actitudes. Si descubre que el orgullo le domina, dispóngase a cambiar y pídale al Señor Jesucristo la fuerza necesaria. Usted puede cambiar Animo Nunca es tarde para comenzar.
Que hermosa es la vida cuando la vivimos con sencillez, no hay nada mas precioso que disfrutar de las cosas pequeñas, de aceptar a cada uno como es y habitar juntos todos sin hacer acepción de personas, el orgullo siempre será una barrera entre el Señor y nosotros porque El mira de lejos al altivo, por esa razón que estemos cerca a El y nos ira mil veces mejor.
Los amo y bendigo en Jesucristo.
MAGNOLIA