“Hay dos tipos de personas en el mundo, los que eligen ser felices y los que eligen ser infelices. La felicidad no llega con la fama y la fortuna, la felicidad viene de adentro. Las personas felices son felices porque se preocupan de SER felices, mantienen una mirada positiva hacia la vida y así están en paz.”
¿Cómo lo logran? Haciendo ciertas cosas diferentes. Y aquí hay 22 de ellas
1. No son rencorosas.
la gente feliz entiende que es mejor perdonar y olvidar que dejar que esos sentimientos negativos sobrepasen a los positivos. Ser rencorosos es malo para la salud, produce depresión, ansiedad y estrés. ¿Para qué dejar que esa persona que te hizo algo mala onda tenga poder sobre ti? Si dejas ir al rencor, tendrás una conciencia tranquila y la energía suficiente como para comenzar a disfrutar las cosas lindas de la vida.
2. Tratan a todos con gentileza.
¿Sabías que se ha probado científicamente que ser amable produce felicidad? Cada vez que haces algo con generosidad, tu cerebro produce serotonina, la hormona de la felicidad. Tratar a la gente con amor, dignidad y respeto te permite construir también mejores relaciones con tu alrededor.
3. Ven los problemas como desafíos.
La palabra “problema” nunca es parte del vocabulario de una persona feliz. Un problema es visto como un retroceso, una lucha o situación inestable, mientras que un desafío es algo positivo, como una oportunidad. Cuando te enfrentes a un obstáculo, considéralo como un desafío.
4. Expresan gratitud por lo que tienen.
Hay un dicho que dice: “la gente más feliz no tiene lo mejor de todo; sino que aprovechan todo lo que tienen de la mejor forma.” Estarás más contento si cuentas todo lo que tienes en vez de añorar cosas que no tienes.
5. Sueñan en grande.
La gente que acostumbra soñar en grande tiene más posibilidades de lograr sus metas que quienes no lo hacen. Si te atreves a soñar en grande, tu mente se pondrá en un estado positivo y enfocado.
6. No se preocupan por pequeñeces.
La gente feliz se pregunta: “¿Importará este problema en un año?” Entienden que la vida es muy corta como para preocuparse sobre situación triviales. Dejar que las cosas ocurran facilitará tu vida para que te puedas concentrar en las cosas realmente importantes.
7. Hablan bien de otros.
Ser amable se siente mejor que tener malas actitudes. Aunque es entretenido, puede dejarte con sentimientos de culpa y resentimiento. Decir cosas lindas de otros te incentiva a pensar en positivo, sin prejuicios.
8. Nunca inventan excusas.
Benjamin Franklin dijo una vez: “quien es bueno inventando excusas pocas veces es bueno para cualquier otra cosa.” La gente feliz no inventa excusas o culpan a los demás. Toman responsabilidad por sus errores y trabajan proactivamente para intentar cambiar para mejor.
9. Se concentran en el presente.
La gente feliz no se queda en el pasado ni se preocupa del futuro. Saborean el presente. Se meten de cabeza en lo que hagan en el momento. Así que para y huele las rosas.
10. Despiertan a la misma hora todos los días.
¿Han notado que mucha gente exitosa se levanta muy temprano? Despertar todos los días a la misma hora estabiliza el ritmo cardíaco, aumenta la productividad y deja al cuerpo en un estado de calma.
11. Evitan la comparación social.
Todos trabajamos a ritmos distintos, entonces ¿para qué compararte a otros? Si crees que eres mejor que otra persona, sólo ganarás un sentido poco saludable de superioridad. Si crees que alguien es mejor que tu, terminarás sintiéndote mal por ti. Serás más feliz si te concentras en tu propio progreso y alabas a los demás por el de ellos.
12. Escogen a sus amigos sabiamente.
La miseria ama la compañía. Por eso es importante rodearte de gente optimista y que te incentiva a alcanzar tus metas. Mientras más energía positiva tengas alrededor, mejor te sentirás sobre ti mismo.
13. Nunca buscan aprobación ajena.
La gente feliz no se preocupa de lo que los demás piensen de ellos. Siguen sus propios corazones sin dejar que los pesimistas los opaquen. Entienden que es imposible complacer a todo el mundo. Escucha lo que la gente quiera decir pero nunca busques la aprobación de nadie más que de ti mismo.
14. Toman tiempo para escuchar.
Habla menos, escucha más. Escuchar te permite tener mente abierta a lo que piensan otros y a tener una visión diferente del mundo. Mientras más escuchas, más tranquila estará tu mente y más contento te sentirás. .
15. Nutren las relaciones sociales.
Una persona solitaria es una persona triste. La gente feliz entiende lo importante que es establecer relaciones fuertes y saludables. Siempre toman el tiempo para ver y hablar con sus familias, amigos o pareja.
16. Meditan.
Meditar silencia tu mente y te ayuda a encontrar paz interna. No tienes que ser un maestro zen para lograrlo. La gente feliz sabe cómo silenciar su mente donde sea y cuando lo necesiten para calmar sus nervios.
17. Comen bien.
La comida chatarra te deja somnoliento y es difícil ser feliz en ese estado. Todo lo que comes afecta directamente la estabilidad de tu cuerpo para producir hormonas, las que dictan tus estados de ánimo, energía y enfoque mental. Come bien para mantener tu cuerpo y tu mente en buen estado.
18. Ejercitan.
Estudios han demostrado que el ejercicio eleva los niveles de felicidad igual que el Zoloft (antidepresivo). El ejercicio también aumenta tu autoestima y te da un sentido mayor de bienestar personal.
19. Viven mínimamente.
La gente feliz raramente tienen excesos en la casa porque saben que cualquier cosa extra los deprimirá, los hará sentirse sobrepasados y estresados. Algunos estudios han concluido que los europeos son más felices que los estadounidenses, incluso cuando viven en espacios menores, conducen autos simples y son dueños de menos cosas.
20. Dicen la verdad.
Mentir estresa, corroe el autoestima y te convierte en alguien desagradable. La verdad te liberará. Ser honesto mejora tu salud mental y construye la confianza de los demás en ti. Siempre sé sincero y nunca te disculpes por eso.
21. Establecen control personal.
La gente feliz tiene la habilidad de elegir su propio destino. No dejan que los demás les digan cómo deben vivir sus vidas. Tener el control completo de la vida propia provoca sentimientos positivos y un gran sentido de valor personal.
22. Aceptan lo que no puede cambiarse.
Una vez que aceptas que la vida no es justa, tendrás más paz contigo mismo. En vez de obsesionarte por lo injusta que es la vida, concéntrate en lo que puedes controlar y cambiar para mejorar.
¿Qué les parece? ¿Cuántas hacen ustedes?