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Crisis Social: LA PALABRA DIARIA MES DE OCTUBRE
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De: TATIS-7 (Mensaje original) |
Enviado: 07/10/2010 01:14 |
Sin preocupaciones
Todas las cosas obran para mi mayor bien.
Preocuparme implica que he aceptado que las cosas externas tienen poder sobre mí. Mas cuando aparto de mi mente los pensamientos de ansiedad y temor, descanso en la seguridad de que todas las cosas obran para mi mayor bien. Me doy cuenta rápidamente que no puedo tener pensamientos ansiosos si tengo pensamientos de fe y confianza. Nada puede perturbarme cuando permanezco en la presencia de Dios.
En esta morada sagrada, hecho a un lado la preocupación y centro mi atención en la paz, la fe y la confianza en mí. Permito que los pensamientos positivos eliminen la preocupación y llenen mi mente de manera tal que ya no siento ansiedad. Percibo la vida de un nuevo modo cuando ya no me someto a la penuria de la preocupación.
No os angustiéis por vuestra vida.—Mateo 6:25 |
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De: TATIS-7 |
Enviado: 07/10/2010 20:33 |
Perdonar
Cuando me perdono y perdono a los demás, creo paz.
El perdón proporciona paz, sanando tanto a mis relaciones personales como a mí. Al superar cualquier temor, ira o resentimiento gracias al perdón, encuentro paz. Las relaciones personales tensas son transformadas en relaciones afables, lo cual nos bendice y sana.
Perdono, permitiendo que el amor divino disuelva cualquier dolor y abra el camino para la paz y el gozo. Cuando digo, aunque sea silenciosamente, la palabra “perdono”, invito a la armonía a ser parte de la experiencia. En ese momento, el agravio y el dolor se disipan y el amor lo inunda todo. Al perdonarme y perdonar a los demás, dejo ir las cargas de mi corazón para descansar en el amor de Dios.
Por lo cual te digo que sus muchos pecados le son perdonados, porque amó mucho; pero aquel a quien se le perdona poco, poco ama.—Lucas 7:47
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De: TATIS-7 |
Enviado: 18/10/2010 19:28 |
Ideas nuevas
Atento a la sabiduría de Dios, soy bendecido con nuevas ideas.
Una nueva idea puede surgir en el momento menos esperado: cuando conduzco, voy de compras o doy un paseo. Es como un “cierto saber” que se convierte en una bendición.
Las ideas que recibo son la actividad de Dios guiando e inspirando mis pensamientos y acciones. Quizás no siempre esté alerta a las ideas que vienen a mí. Ya que a veces pueden ser sutiles y efímeras. Sin embargo, puedo hacer el empeño consciente de permanecer receptivo a ellas.
Al proseguir con mi vida con una actitud expectante y un corazón sereno, soy un canal abierto para la sabiduría de Dios. Anticipo que la sabiduría se manifestará día a día.
Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.—Santiago 1:5
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De: TATIS-7 |
Enviado: 19/10/2010 19:52 |
Paz mundial
Expreso paz en todo lo que hago.
La paz del mundo comienza conmigo. Mas quizás piense: “Soy sólo una persona —¿cómo puedo establecer yo la paz?” Sólo se necesita una persona para crear una reacción en cadena de paz. Una oleada de paz surge de mí y llega a mi familia, a mi comunidad y a todo el mundo.
Cuando tengo la atención centrada en el Espíritu, expreso paz en todo lo que hago. Soy el primero en sonreír a alguien. Enfoco mi atención en el bien y dejo ir cualquier resentimiento o ira. Siento amor ilimitado, compasión incondicional y gratitud infinita. Expreso paz al estar en paz. Inicio ondas de paz —y éstas se une a las ondas de otras personas para bendecir al mundo con paz.
Y vino y anunció las buenas nuevas de paz a vosotros que estabais lejos y a los que estáis cerca.—Efesios 2:17
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De: TATIS-7 |
Enviado: 21/10/2010 20:11 |
Guía
Mi sendero es claro y prosigo con fe.
En ciertos momentos en mi vida, puede que me haya sentido solo y perdido. Quizás haya pasado por momentos difíciles en una relación personal, me hayan despedido del trabajo o simplemente haya llegado a un punto en el que cuestione mi propósito. Mas, profundamente, sé que nunca he estado solo. Dios está conmigo. Encuentro paz al recordar que mi camino se aclara a medida que avanzo con fe.
Quizás no sepa lo que sucederá en una semana, en un mes o en un año, pero sé que estoy siendo guiado. Abro mi corazón y mi mente para saber lo que debo hacer, y doy gracias a Dios por la sabiduría interna que avanza mi vida en orden divino.
Condujiste en tu misericordia a este pueblo que redimiste. —éxodo 15:13
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De: TATIS-7 |
Enviado: 22/10/2010 21:46 |
Armonía
Mi cuerpo y mi mente están en armonía con Dios.
Al estar en armonía con Dios, gozo de paz interna. Mi cuerpo descansa. Mi mente se aclara. Percibo la gracia de Dios. Mas, cuando no estoy alineado con Dios, mi cuerpo se siente extraño y mi mente entretiene pensamientos ansiosos. Me siento inestable. En tales momentos, no es que haya perdido mi vínculo con el Espíritu, sino que me he distraído.
Entonces, hago una pausa, digo una oración y paso unos momentos en el silencio. Inmediatamente comienzo a sentir que el espíritu divino fluye en mí y por medio de mí. Las personas precisas, las direcciones correctas y los lugares apropiados son revelados claramente. Sé que hacer y estoy en paz.
Nosotros todos, mirando con el rostro descubierto y reflejando como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados.—2 Corintios 3:18
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De: TATIS-7 |
Enviado: 25/10/2010 03:49 |
Protegido
Confío en Dios para que me proteja y proteja a mis seres queridos.
Soy una creación de Dios, al igual que lo son mis seres queridos. Cuando confío en que estamos protegidos por la presencia divina, experimento paz y templanza. Tomo decisiones sabias. Todos disfrutamos de amor y seguridad inmanentes.
Nuestro deseo innato de crecimiento nos insta a salir de nuestra “zona de comodidad”. En todo momento, recuerdo que cada oportunidad para mi transformación es apoyada por Dios. Confío en que Dios me protege y protege a mis seres queridos porque nada puede separarnos de nuestro Creador. Descanso y tomo decisiones sabias, ayudando a otros a que lo hagan también.
El que vive bajo la sombra protectora del Altísimo ... dice al Señor: “Tú eres mi refugio, mi castillo, ¡mi Dios, en quien confío!” —Salmo 91:1, 2 (Versión Popular)
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