Así como cada planta crece a partir de una semilla y deviene, al fin, un roble..., así una mujer o un hombre se convierte en lo que ha nacido para ser... Debería llegar allí, pero la mayoría queda atascada y atrapada irremisiblemente...
Podría llegar más lejos si hubiese escuchado las cosas apropiadas, o si hubiese dedicado el tiempo necesario a sí mismo...
Pero no es popular encontrar esto en l
a vida ordinaria, saber dedicar tiempo a uno mismo,
porque nuestro punto de vista adquirido desde la niñez es enteramente extrovertido, es decir, todo nuestro interés, nuestro deseo y sobre todo muestra atención, son atraídos y están atrapados en las cosas y personas de la vida externa...
Lo que necesitamos es el desarrollo del hombre y la mujer espiritual interior, el individuo único, cuyo tesoro está oculto en su Esencia inconsciente que existe en lo más interno de su ser real...
Carlos
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