El verdadero trabajo interno empieza cuando un hombre empieza a observarse….
El día sigue la noche y la noche al día
Las horas pasan inadvertidas salvo cuando las hacemos incomodas
Desde la comodidad me es difícil observarme.
Veo mis notas plagadas de emociones negativas… ¿qué realmente estoy practicando?
La maquina se deleita observando otras maquinas, es el entretenimiento quien gobierna su sentido común.
Somos muchos, como un manicomio donde cada personaje sueña ser alguien, armando su personaje escogiendo frases.
Nos engañamos al buscar la verdad a través de elegir sistemáticamente solo lo que nos gusta, midiendo todo con la misma escala.
Si lo veo en ti, está en mí.
Sueño durante el día y la noche, destruyo mi esencia con la autocomplacencia, me arrullo con justificantes por la noche y por la mañana, escojo la cama a mi medida al igual que ricitos de oro.
No hay que esperar a que el oso llegue y nos tumbe de la cama.