Reporte texto:

2 líneas de desarrollo: el saber y el ser.

El ser debe desarrollarse paralelamente con el saber, pero independientemente de él.

Si el saber crece más que el ser, o el ser cre­ce más que el saber, el resultado es siempre un desarrollo unilateral, y un desarrollo unilateral no puede ir lejos. Está destinado a llegar a una seria contradicción interior y detenerse allí.

¿Qué es comprender?

Saber y comprender son dos cosas totalmente dis­tintas.

La comprensión de una cosa de inmediato lleva a la comprensión de mu­chas otras.

Ni el saber ni el ser pueden inmovilizarse o permanecer en el mismo estado. Si cualquiera de ellos no cre­ce y se fortalece, se hará más pequeño y más dé­bil.

La comprensión puede ser comparada a una media aritmética entre el saber y el ser. Esto demuestra la necesidad de un crecimiento simultáneo del saber y del ser. El crecimiento de uno solo y la disminución del otro no cambiará la media aritmé­tica.

"Comprender" significa estar de acuerdo. Los que se compren­den uno al otro deben tener un saber y un ser igual, sólo entonces es posible una mutua comprensión.

Sólo puede haber una comprensión, el resto es incomprensión o comprensión incompleta.

Compren­der significa la comprensión de una parte en su relación con el todo. Pero la idea del todo puede ser muy diferente en las personas según su conoci­miento y según su ser.

Cada uno comprende todo a su propia manera o de acuerdo con uno u otro entrenamiento mecánico o hábito; pero todo esto es una comprensión subjetiva y relativa. El camino a una comprensión objetiva pasa por las enseñanzas de escuela y por el cambio del ser.

División del hombre en siete categorías:

Toda la vida se considera como dividida en dos círculos concéntricos, el círculo interior (hombres N° 5, 6 y 7) y el círculo exterior (hombres N° 1, 2 y 3) de la humanidad.Los hombres N° 4 están en el umbral del círcu­lo interior o entre los dos círculos. A su vez el círculo interior está dividido en tres círculos concéntricos: el más interno (hombres N° 7), el intermedio (hombres N° 6), y el más externo de los círculos interiores (hombres N° 5).

En el círculo exterior todo sucede, es mecánico, y la gente que vive allí son máquinas. Hay confusión de las lenguas porque todos comprenden todas las cosas de manera di­ferente. La comprensión pertenece al círculo interior de la humanidad.

Cada uno de los tres círculos interiores tiene su lenguaje propio. Nosotros estamos estudiando el lenguaje del más externo de los círculos interio­res.

Nuestra comprensión no siem­pre se encuentra en el mismo nivel.

Sólo se puede comprender a los demás tanto como uno se comprende a sí mismo, y sólo al nivel del propio ser. Pueden juzgar el saber de otras personas, pero no pueden juzgar su ser, sólo pueden ver en ellas tanto como tienen en sí mismos.

División de los centros - Generalidades:

Además de la división en dos partes, positiva y negativa, cada uno de los cuatro centros está dividido en tres partes (mecánica, emocional e intelectual), por lo que serían seis partes. Cada una de estas, a su vez está subdividida en tres partes: mecánica, emocional e intelectual.

Sin atención, o con una atención errante, estamos en la parte me­cánica; con la atención atraída por el objeto de la observación o reflexión y mantenida allí, estamos en la emocional; con la atención controlada y mantenida por voluntad en el objeto, estamos en la intelectual.

Al observar la atención y tratando de controlarla, nos imponemos el trabajar en las partes intelectuales de los centros.

División de los centros - Intelectual:

Parte mecánica: todo el registro de impresiones, recuerdos y asociaciones. Nunca debería contestar a las preguntas dirigidas a todo el centro, ni tratar de resolver sus problemas, ni decidir nada. Para todas las necesidades inmediatas de la vida, es más que suficiente. Sólo puede contar hasta dos. Siempre divide todo en dos.

Parte emocional: con­siste en una emoción intelectual, es decir, el deseo de saber, el deseo de comprender, la satisfacción de saber, el descontento por no saber, etc.

Parte intelectual: capacidad de creación, construcción, invención y descubrimiento.

División de los centros - Emocional:

Parte mecánica: clase más barata de humor prefabricado y sentido grose­ro de lo cómico, amor a la excitación, el amor a los espectáculos sensacionalistas, el amor a la pom­pa, el sentimentalismo, el amor por estar en la muchedumbre y ser parte de ella, la atracción por las emociones masivas de toda clase y la completa desaparición en las más bajas emociones semianimales: crueldad, egoísmo, cobardía, envi­dia, celos, etc.

Parte emocional: sentido del humor o de lo cómico tanto como una emoción religiosa, una emoción estética, una emoción moral y así puede llevar al despertar de la conciencia moral. Con la identificación puede ser algo bastante dife­rente, puede ser muy irónica, sarcástica, burlona, cruel, obstinada, mala y celosa, sólo que menos primitiva que la parte mecánica.

Parte intelectual: (con la ayuda de las partes intelectuales de los centros motor e instintivo) incluye en sí misma el poder de creación artística. Es también el asiento principal del centro magnético. Lo que quiero decir es que si el centro magnético existe sólo en el centro intelectual o en la parte emocional del centro emocional, no puede ser lo suficientemente fuerte para ser efectivo y siempre está expuesto a cometer errores o a fallar. Pero la parte intelectual del centro emocional, cuando está totalmente desarrollada y trabaja con todo su po­der, es un camino hacia los centros superiores.

División de los centros – Motor:

Parte mecánica: los movimientos automáticos, que son mal llamados "instintivos", así como la imitación y la capacidad para la imitación que desempeña un papel tan gran­de en la vida.

Parte emocional: está co­nectada principalmente con el placer del movimiento. Cuando la identificación y o­tras emociones se llegan a mezclar con él, pasa a la parte mo­triz de cualquiera de los centros intelectual o emocional.

Parte intelectual:se encarga de las invenciones para realizar cualquier tipo de trabajo físico. El poder de imitar a voluntad la voz, entonaciones, y gestos de otras personas, tal como la poseen los actores, pero en grados más altos o mejores está mezclada con el trabajo de la parte intelectual del centro emocional.

División de los centros – Instintivo:

Parte mecánica: sen­saciones habituales que muy a menudo no las notamos en absoluto, pero que sirven de fondo para otras sensaciones. Incluye movimientos instintivos en el significado correcto de la ex­presión, es decir, todos los movimientos internos tales como la circulación de la sangre, el movi­miento del alimento en el organismo y los reflejos internos y externos.

Parte intelectual: es la mente detrás de todo el trabajo del organismo, una men­te bastante diferente de la mente intelectual.

Recuerdo de si:

El estudio de las partes de los centros y de sus funciones especiales requiere cierto grado de recuerdo de sí. Sin recordarse a sí mismo uno no se puede observar por un tiempo suficientemente largo o claro como para sentir y comprender la diferencia de funciones que pertenecen a distintas partes de los diferentes cen­tros.

El estudio de la atención muestra las partes de los centros mejor que cualquier otra cosa, pero el estudio de la atención también requiere cierto grado de recuerdo de sí.

El recuerdo de sí es un despertar parcial, o el comienzo del despertar. No se puede realizar ningún trabajo en el sueño.

Reporte ejercicio relajación:

Es realmente un arte aprender a relajarse, e ir experimentándolo de a poco es muy agradable. Al finalizar el ejercicio queda esa sensación de que las funciones se encuentran por un lado y uno por otro, el cuerpo parece realmente un objeto, una máquina que se encuentra totalmente quieta y la sensación de yo se encuentra como flotando por encima.

También el realizar el ejercicio con continuidad permite que se alcance un estado relajado más rápidamente, las partes del cuerpo van aumentando en calor a medida que se las recorre y la sensación es realmente placentera.

Además, muchas veces después de relajar todo el cuerpo, al llegar a la parte de los pensamientos y emociones, uno descubre que no hay nada que hacer con ellos, porque ya están en quietud también, como si estos estuvieran almacenados en el cuerpo, y al relajar el cuerpo estos desaparecerían al mismo tiempo.

También me di cuenta de acomodar los hombros, y al hacerlo llevándolos hacia atrás se abría más el pecho, y eso me daba una sensación de apertura profunda.

Otra cosa que experimenté en el ejercicio (y que me había pasado otras veces con otros ejercicios pero no lo había sentido tan conscientemente como hasta ahora), es que al estar totalmente relajado me encuentro en un silencio casi total donde sólo hay sólo un sonido iiiiiiiiiiiiiiiiiii que acompañaba la experiencia, pero no es un sonido que viene del pensamiento, sino que lo siento como que sale desde el cuerpo. Es un sonido iiiiiiiiiiii constante en su intensidad y de tono agudo, es casi como un susurro que sale desde adentro. Alinearme con ese sonido es una experiencia increíblemente agradable que me deja totalmente en paz, a partir de ese momento es como si desapareciera, no hay nada más que ese sonido, no hay experiencia de escuchar ese sonido, porque siento que yo soy ese sonido, yo soy esa vibración.

Muchas gracias por el curso, me ha encantado!!!

Abrazo solar!!!

Reporte, 5ª Conferencia.

       Por ahí tengo unas grabaciones de las cinco conferencias de Ouspensky y en ocasiones, al viajar en vehículo de un lugar a otro, como compañero de viaje las escucho y voy procurando analizar lo que puedo de ellas.

       A pesar de todo eso y de las ocasiones en que he leído, si no analizado, La Posible Evolución del hombre, me siento como si leyera el libro por primera vez.

       Y aunque entendía que hay dos lados en el Ser Humano que se deben desarrollar, “Comprender” cabalmente esto no es tan así de sencillo como simplemente leerlo. Observo el actuar de las personas, tratando de dilucidar su ser, respecto a su saber y no puedo.

       Al observar mis constantes tropiezos y mi ignorancia respecto a mi  observación del entorno, me doy cuenta que no “Comprendo”, que esta palabrita es mucho más que todo lo que uno pueda decir y pensar de ella. ¿Qué es Comprender? Ouspensky nos dice…” Comprender es siempre la comprensión de un problema más pequeño en relación con un problema mayor. Compren­der significa la comprensión de una parte en su relación con el todo.

       Pero qué es “La relación con el todo”… mi experiencia, mi Saber y mi Ser?.  ¿A qué todo se refiere “La relación con el todo” respecto al propio Cuarto Camino…?  Pues el Señor Gurdjieff, sabía mucho más de lo necesario para esta tierra y “para el cielo”.

         Todos comprenden todas las cosas de manera di­ferente.

Hemos llegado a una definición muy intere­sante de la comprensión. Es algo que pertenece al círculo interior de la humanidad y no nos pertene­ce en absoluto. (Ouspensky).

       Sin embargo, el estudio teórico no es sufi­ciente. Ustedes deben trabajar sobre su ser y en el cambio de su ser.

       Claro, también nos da algunas claves para desarrollar “Comprensión”, esto es… Ahora debemos regresar al estudio de los cen­tros y al estudio de la atención y del recuerdo de sí, porque estos son los únicos caminos a la com­prensión.

Además de la división en dos partes, positiva y negativa que, como hemos visto, no es la mis­ma en los diferentes centros, cada uno de los cuatro centros está dividido en tres partes. Estas tres partes corresponden a la definición de los mis­mos centros. La primera parte es "mecánica", incluyendo los principios motor e instintivo, o pre­dominando uno de ellos; la segunda es “emocional”, y la tercera es “intelectual”. El si­guiente diagrama muestra la posición de las partes en el centro intelectual. El centro intelectual está dividido en dos partes, positiva y negativa; cada una de estas dos partes está dividida a su vez en otras tres. Por lo tanto el centro intelectual en rea­lidad se compone de seis partes.

       Cada una de estas seis partes, a su vez está subdividida en tres partes: mecánica, emocional e intelectual. Pero sobre esta subdivisión hablaremos mucho después, con excepción de una, es decir, la parte mecánica del centro intelectual, de la cual hablaremos ahora.

       La división de un centro en tres partes es muy simple. Una parte mecánica trabaja casi automáticamente; no requiere ninguna atención. Pero debido a esto no se puede adaptar a un cambio de circunstancias, no puede "pensar", y continúa trabajando de la manera en que comenzó, aun cuando las circunstancias hayan cambiado completamente.

       En el centro intelectual, la parte mecánica incluye en sí misma todo el registro de impresiones, recuerdos y asociaciones. Esto es todo lo que debería hacer normalmente, es decir, cuando otras partes hacen su trabajo. Nunca debería contestar a las preguntas dirigidas a todo el centro, nunca debería tratar de resolver sus problemas, y nunca debería decidir nada. Desgraciadamente, de hecho, siempre está lista para decidir y siempre contesta a las preguntas de toda clase, de manera muy estrecha y limitada, con frases hechas, en jerga, con lemas políticos. Todos estos y muchos otros elementos de nuestras reacciones habituales forman el trabajo de la parte mecánica del centro intelectual.

       Esta parte tiene nombre propio. Se llama "aparato formatorio" o algunas veces "centro formatorio". Muchas personas, especialmente los hombres N° 1  es decir, la gran mayoría de la humanidad  viven toda su vida sólo con el aparato formatorio, sin tocar nunca otras partes de su centro intelectual. Para todas las necesidades inmediatas de la vida, para recibir las influencias A y responderles, y para distorsionar o rechazar las influencias C, el aparato formatorio es más que suficiente.

       Siempre se puede reconocer el "pensamiento formatorio". Por ejemplo, el aparato formatorio sólo puede contar hasta dos. Siempre divide todo en dos: "bolchevismo y fascismo" "trabajadores y burgueses", "proletarios y capitalistas", etc. La mayoría de nuestros lemas modernos se los debemos al pensar formatorio, y no sólo los lemas sino todas las teorías modernas populares. Quizá sea posible decir que en todo momento todas las teorías populares son formatorias.

       La parte emocional del centro intelectual consiste principalmente en lo que se denomina una emoción intelectual, es decir, el deseo de saber, el deseo de comprender, la satisfacción de saber, el descontento por no saber, el placer del descubrimiento, etc.; aunque, una vez más, todas ellas se pueden manifestar en muy diferentes niveles.

       El trabajo de la parte emocional requiere atención plena, pero en esta parte del centro la atención no requiere ningún esfuerzo. Es atraída y mantenida por el mismo asunto, muy a menudo a través de la identificación, que generalmente es llamada "interés", o "entusiasmo", o "pasión" o "devoción".

       La parte intelectual del centro intelectual incluye en sí misma una capacidad de creación, construcción, invención y descubrimiento. No puede trabajar sin atención, pero la atención en esta parte del centro debe ser controlada y mantenida allí por la voluntad y el esfuerzo.

       Este es el criterio principal al estudiar las par­tes de los centros. Si las tomamos desde el Punto de vista de la Atención sabremos de inmediato en cual parte de los centros estamos.

       Tomemos el centro emocional. No hablaré por ahora sobre las emociones negativas. Tomaremos solamente la división del centro en las tres partes: mecánica, emocional e intelectual.

La parte mecánica consiste en la clase más barata de humor prefabricado y un sentido grose­ro de lo cómico, el amor a la excitación, el amor a los espectáculos sensacionalistas, el amor a la pom­pa, el sentimentalismo, el amor por estar en la muchedumbre y ser parte de ella, la atracción por las emociones masivas de toda clase y la completa desaparición en las más bajas emociones semianimales: crueldad, egoísmo, cobardía, envi­dia, celos, etc.

La parte emocional puede ser muy diferente en distintas personas. Puede incluir en sí misma un sentido del humor o un sentido de lo cómico tanto como una emoción religiosa, una emoción estética, una emoción moral y, en este caso, puede llevar al despertar de la conciencia moral. Pero con la identificación puede ser algo bastante dife­rente, puede ser muy irónica, sarcástica, burlona, cruel, obstinada, mala y celosa, sólo que de mane­ra menos primitiva que la parte mecánica.

La parte intelectual del centro emocional (con la ayuda de las partes intelectuales de los centros motor e instintivo) incluye en sí misma el poder de creación artística. En aquellos casos en que las par­tes intelectuales de los centros motor e instintivo, que son necesarias para la manifestación de la fa­cultad creativa, no estén lo suficientemente educadas o no les correspondan en su desarrollo, se pueden manifestar en sueños. Eso explica los bellos y artísticos sueños de personas que por lo demás no son nada artísticas.

La parte intelectual del centro emocional es también el asiento principal del centro magnético. Lo que quiero decir es que si el centro magnético existe sólo en el centro intelectual o en la parte emocional del centro emocional, no puede ser lo suficientemente fuerte para ser efectivo y siempre está expuesto a cometer errores o a fallar. Pero la parte intelectual del centro emocional, cuando está totalmente desarrollada y trabaja con todo su po­der, es un camino hacia los centros superiores.

       La parte intelectual es muy grande y muy importante. En el estado de conciencia de sí o al aproximársele, uno puede entrar en contacto con la parte intelectual del centro instintivo y aprender bastante de ella en lo concerniente al funcionamiento de la máquina y a sus posibilidades. La parte intelectual del centro instintivo es la mente detrás de todo el trabajo del organismo, una mente bastante diferente de la mente intelectual.

El estudio de las partes de los centros y de sus funciones especiales requiere cierto grado de recuerdo de sí. Sin recordarse a sí mismo uno no se puede observar por un tiempo suficientemente largo o lo suficientemente claro como para sentir y comprender la diferencia de funciones que pertenecen a distintas partes de los diferentes centros.

El estudio de la atención muestra las partes de los centros mejor que cualquier otra cosa, pero el estudio de la atención también requiere cierto grado de recuerdo de sí.

Muy pronto se darán cuenta de que todo su trabajo sobre sí mismos está conectado con el recuerdo de sí y que no puede proseguir exitosamente sin él. Y el recuerdo de sí es un despertar parcial, o el comienzo del despertar. Naturalmente  y esto debe ser muy claro  no se puede realizar ningún trabajo en el sueño”. Extractos.

… Nuubluz…

       Que difícil…no podemos realizar ningún trabajo en el sueño, pero aquí digo que me cuesta “entender” al Recuerdo de Sí y si en ocasiones realmente estoy en ese estado y también el “estado” de estar despierto, o sea no en, el sueño.

       Respecto al trabajo de práctica, he de decir que no pude sentir mi sol, me da la sensación de que imagino esto, o sea el sol y no que realmente estoy sintiendo mi luz interior como un sol que derrite todo aquello dentro y fuera de mi… entonces me quedó siempre el sabor de que estaba imaginando y no ejercitando como debiera…aunque me esforcé... 

Perdón por el atraso, el reporte lo tenía a la fecha...

Nuubluz.