CADA VIDA ES UN REPRESENTANTE DE DIOS.
(G.I. Gurdjieff - Perspectivas desde el mundo real)
"En todo lugar donde hay vida hay Amor, comenzando por las plantas y los animales. Cada vida es un representante de Dios. Cualquiera que pueda ver al representante, verá a Aquél que es representado. Cada vida es sensible al Amor. Aun las cosas “sin alma” como las flores, que no tienen conciencia, comprenden si uno las ama o no. Aun la vida inconsciente reacciona a cada hombre de una manera correspondiente y le responde de acuerdo a la manera en que él reacciona."
"Como siembran, así cosecharán, y no sólo en el sentido de que si siembran trigo tendrán entonces trigo. Es cuestión de cómo siembran. Literalmente puede convertirse en paja. En la misma tierra, distintas personas pueden sembrar las mismas semillas y los resultados serán diferentes. Pero estas sólo son semillas. El hombre ciertamente es más sensible que una semilla a lo que es sembrado en él. Los animales son también muy sensibles, aunque menos que el hombre."
"Aquel que quiera aprender a amar a su vecino debe empezar por tratar de amar las plantas y los animales. Quien no ama la vida, no ama a Dios. Comenzar de inmediato a tratar de amar a un hombre es imposible, porque el otro es como ustedes, y devolverá golpe por golpe; en tanto que un animal es mudo y se resignará tristemente. Por eso es más fácil empezar a practicar en animales."
"En el caso de ustedes, una y la misma cosa es amada y no amada; pero hay cosas objetivas que debemos amar o debemos no amar. Por eso es más productivo y práctico que se olviden de lo que llaman malo y bueno y comiencen a actuar sólo cuando hayan aprendido a escoger por sí mismos."
"TIENEN QUE COMPRENDER QUE AMBOS, EL ODIO ORDINARIO Y EL AMOR ORDINARIO, SON MECÁNICOS. DESPUÉS PUEDE SER QUE COMPRENDAN ALGO DEL AMOR VERDADERO"