Viaje Alado Hoy me acerco a tu alma con las manos amarillas de pájaros. La mirada corriendo por el cielo, y una leve llovizna entre mis labios.
Saltando claridades he recogido el sol en los tejados, y una nube ligera que pasaba me prestó sus sandalias de aire blando.
La tierra se ha colgado a mis sandalias y es un tren de emoción hasta tus brazos, donde las rosas sin querer se fueron unidas a la ruta de mi canto.
La tragedia del mundo de mi senda de amor se ha separado, y hay un aire muy suave en cada estrella removiéndome el polvo de los años.
Hasta mi cara en vuelo las cortinas del mar se me treparon, y mis ojos se unieron a los ojos de todas las pupilas del espacio.
Anudando emociones sorprendí una sonrisa entre mis manos caída desde el pájaro más vivo que se asomó a mirar mi viaje alado.
Por encima del ruido de los hombres una larga ilusión se fue rodando, y dio a inclinar la sombra de mi mente en el rayo de luz de tu regazo.
Como corola al viento, todo el cosmos abrióseme a mi paso, y se quedó en el pétalo más rosa de esta flor de ilusión que hasta ti alargo...
JULIA BURGOS
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