LOS ABUELOS
Los abuelos cumplen una valiosa labor educativa
complementaria a la de los padres. Y no nos referimos solo a
lo práctico que resulta que se hagan cargo de los niños cuando
los padres no pueden, o incluso que los sustituyan
temporalmente si hacen algún viaje. Su papel va más allá...
Una valiosa ayuda
Desde luego que los abuelos son un valiosísimo recurso en estos
tiempos en que tantas
¿Qué aportan los abuelos en la educación de los niños?
Al margen de la ayuda que brindan los abuelos a los padres
otras muchas cosas: tiempo, paciencia, experiencia, tolerancia...
y un sentimiento de familia extensa, de estirpe, de tener
unas raíces que vienen del pasado.
También dan a los pequeños la valiosa posibilidad de diversificar
sus relaciones de apego más allá de papá y mamá.
Actividades con los nietos
La actual generación de abuelos, además, aporta la novedad
de una mayor longevidad, una mayor esperanza de vida,
acompañada de una mejor salud y vitalidad física que
generaciones de abuelos anteriores. Muchos de ellos acompañan
incluso montan en bici, nadan o juegan con ellos al tenis.
Nuestros abuelos no deben ser nuestros canguros
Los padres debemos ser prudentes a la hora de emplearles
como canguros:
- Hay abuelos cuya máxima aspiración es dedicar su tiempo
- a cuidar de sus nietos, pero también los hay que desean
- dedicar el tiempo libre que ahora tienen (o parte de él)
- a disfrutar de aficiones y actividades que no pudieron
- permitirse cuando eran más jóvenes, y eso es muy
- respetable. Tienen derecho a su vida y a su tiempo.
- Otros, según el caso y la edad, pueden tener mermadas
- sus fuerzas y el cuidar de sus nietos puede ser
- agotador para ellos, aunque no lo digan.
- Los abuelos necesitan disfrutar de sus nietos
- (también a la inversa). Los padres no deben
- escatimar
o impedir este contacto.
