El sueño profundo, incluso al dormir la siesta, puede aumentar
la inteligencia. El acto de soñar podría mejorar la memoria,
estimular la creatividad y mejorar la planificación futura, a
tenor del resultado de nuevas investigaciones realizadas
a tal efecto.
En un estudio reciente, los sujetos que tomaron siestas
habituales con sueño MOR (fase en la que los sueños
son más intensos) obtuvieron mejores resultados en
problemas sintácticos basados en la creatividad. Es decir,
el sueño profundo o con MOR (movimientos oculares rápidos),
ayudó a las personas a combinar sus ideas de forma
novedosa, según expone la psiquiatra responsable del
estudio, Sara Mednick.
Esto significa que el sueño MOR mejoró la capacidad de
los participantes para detectar vínculos conceptuales de
términos aparentemente inconexos: Las respuestas de los
problemas analógicos que se plantearon en una primera
ronda matutina y las tres palabras asociativas que se
plantearon en una segunda ronda vespertina, después de
que algunos de los participantes durmieran una siesta
de 90 minutos..
Mednick resaltó que todos los grupos recordaron las
respuestas matutinas igual de bien, lo que demuestra que
la segunda ronda no sólo sirvió para comprobar la capacidad
de memorización de los que tomaron la siesta MOR.
En resumen, el sueño MOR “desempeña un papel importante
que permite a las personas desacoplar la memoria de un
término concreto para poder utilizarlo en otros contextos”,
añadió la doctora.
La memoria mejorada y estimulada por el sueño profundo
puede aportar incluso un beneficio adicional: ayudar a
imaginar (y a planificar mejor) el futuro.
El psiquiatra de Harvard Daniel Schacter, cuyas investigaciones
se han llevado a cabo de forma separada de las de Mednick,
comentó a National Geographic News que “al imaginar
eventos futuros, la persona recombina aspectos de
experiencias que realmente han tenido lugar”,
pareciendo que los sueños convierten los recuerdos
en predicciones..
Schacter, que también presentó una ponencia en el
congreso de psicología, ha descubierto que las mismas
áreas del cerebro que manejan la memoria, como el
hipocampo, muestran un aumento de actividad cuando se
le pregunta a sujetos de estudio que imaginen eventos futuros