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Además de mi sentir
la luz innata radiante
genera mi esperanza
A través de los árboles, voy
incesantemente como alma vaga, voy
¡Con un buscar! ¡Un propósito!
Pero el corazón roto llora...
Llora desconsoladamente...
Vacío como el aire... ¡A tus pies aflora!
Las lágrimas de lluvia roja caen.
¡Provenientes de mi destruido corazón!
Inundan los bosques, los rostros, el mundo...
¡Pero, no llegan a rociarte!
Mas querer tenerte entre mis brazos, ¡NO!
Tú, con tu voz de ángel me niegas
Evitas nuestro encuentro, destruyes mi querer...
Más aún el soñar cada día
Me encuentro contigo...
Cantamos los himnos inmortales del amor
Correteamos como pequeños niños,
¡Sin preocupaciones!
Hoy como ayer, me levanté tembloroso
quizás no sea el frío, ni el calor
Quizás sea el canto del gallo
acordándome que vivo
Oh quizás sea nuestro sueño,
acordándonos que no nos conocemos...
Es tan solo un sueño eterno, que se hizo realidad en el mundo de las ilusiones,
pero que en nuestra rutina diaria, no existe, solo nosotros la creamos.
Desconozco autor
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