En mis sueños te beso,
un beso tierno y duradero
y en tus labios una sonrisa
delicada y que me incita,
a besarla nuevamente
y a tocarla suavemente.
En mis sueños yo te miro,
esos ojos de luceros
que se prenden y ya no puedo,
resistirme ante ellos.
En mis sueños yo te siento,
y tu corazón late sin tiempo,
y los dos gritamos al viento,
que todos sepan que nos queremos.
En mis sueños yo te escucho
esa voz angelical,
de poeta celestial
de ternura singular.
En las noches yo te hablo
y te digo que te amo
y susurro a tus labios
que otra vez quiero probarlos.
En las noches yo te huelo
ese aroma de ensueño,
de fragancias sin veneno,
de perfumes esparciéndose
con el viento.
En las noches yo te amo,
sin rumores y sin llanto,
en las cuatro paredes encerrados,
desatamos nuestros corazones, enamorados.
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