Derroche de Amor
En los brazos de la debilidad está la fuerza, ansiosa de poder salir.
En las garras del dolor, el placer que espera su momento.
Y en un camino lleno de obstáculos, la oportunidad que se presenta con ellos.
Esto es lo que nos brindan estos maestros en nuestras vidas y
debemos de estarles eternamente agradecidos.
Somos ante todo criaturas del universo: completas,
bellas y perfectas en cada detalle, siguiendo los deseos del infinito.
Así pues, nos merecemos por derecho natural ser amados y
respetados y es nuestro deber no aceptar nada más.
Así como el océano puede verse en una gota de agua,
también nosotros somos la esencia de la vida.
Igual que la marea sube y baja, también nosotros nos movemos
con el flujo de la vida, aceptando que la única constante es el cambio y
que todo es como tiene que ser, aunque muchas veces no sepamos porqué.
Cuando vamos por el camino de la verdad somos conscientes
de que lo que ocurre en nuestro interior es mucho más importante que
lo que hemos dejado atrás o lo que ven nuestros ojos.
Pues lo que sentimos en nuestro interior es nuestro mayor tesoro,
la grandeza del universo en sí mismo.
D Autoria.
Con el Cariño de siempre
Besos miles todo y mas.