Nos aferramos a nuestros sentimientos, los escondemos.
Pensamos que no merecemos que nuestra verdad esté afuera,
como si nuestra verdad no fuera lo suficientemente buena,
o fuera a quemar a alguien, así que la suprimimos.
Y cuando no nos expresamos,
corremos en un sendero falso,
lo que quiere decir que no llegaremos a donde queremos ir.
Eso es energía desperdiciada.
Energía es todo lo que tenemos, es lo que somos.
Hoy, úsala sabiamente
Yehuda Berg
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