Buscar La Felicidad En Todas Las Cosas
"Hay que relativizar todo y no dramatizar nada: es más acorde con la naturaleza humana reírse de la vida que llorar por ella", declara Séneca en su ensayo sobre la tranquilidad del alma.
Desde luego, esto parece más fácil de decir que de hacer. Sin embargo, estar inmerso en las propias preocupaciones y dar vueltas hasta el infinito los problemas en la cabeza termina por tener como principal efecto el de un espejo de aumento que deforma.
Para no dar a los obstáculos de la vida más valor del que tienen es bueno tomar distancia. Pero también hay que recordar que los problemas que nos asaltan son proporcionales a lo que esperamos de la vida.
Así, cuando más deseamos ser felices, más nos consumirá la menor contrariedad.
Aprendamos a tomar las cosas como vienen, a no tener los ojos más grandes que la barriga, en fin, a ver el bien en todas las cosas. Porque hasta un mal puede, bajo engañosas apariencias, ocultar un bien.
Aprender a ver el bien en todas las cosas es sumamente importante para poder obtener paz en nuestra vida, para poder desarrollarnos en un clima de armonía y por sobre todo para gozar de una vida en equilibrio.
Cuando hablamos de felicidad, pensamos que es un estado, un momento de nuestra vida superior, algo distinto que nos llena de euforia y yo creo que la felicidad depende de nuestra actitud ante las cosas que nos suceden, es decir que depende pura y exclusivamente de nosotros para poder existir. No es un estado, no es algo mágico es una actitud nuestra la que permite que la felicidad sea posible .
Tenemos que aprender a ver el lado positivo de todas las situaciones que vivimos. En muchas que nos parecen terribles o muy dolorosas en un primer momento, al pasar el tiempo comprendemos que tenian un lado positivo que si bien no saltaba a simple vista estaba ahí para ayudarnos a ser mejores, y a ser más felices.
Para vivir mejor es necesario que tomemos todo como viene, que nos dejemos llevar, sin resistencia y de esa manera tambien permitirnos fluir y dejar que todo fluya a nuestro alrededor.
Tenemos que comprender que muchas cosas por más que las analicemos una y otra vez no tienen respuesta porque no dependen de nosotros. Tenemos que entender que sólo podemos ser responsables de nosotros mismos y no de los demás. Tenemos que asumir que todos somos maestros y que podemos ayudar a otros a ser mejores pero que si eso no ocurre no está el problema en nosotros sino en el otro. Pero por encima de todo tenemos que aprender a tomar de la vida aquello que nos beneficia dejando de lado lo que nos perjudica y nos lastima... Si pensamos en esto entonces ¿por qué perdemos tanto tiempo de nuestras preciosas vidas navegando una y otra vez por lo doloroso, por lo que nos hizo o nos hace daño, por aquello que hoy por hoy no podemos cambiar?
Cada día es un desafío y el mayor desafío es poder cerrar los ojos al finalizar el día y sentirnos en paz rescatando todo aquello que puso alegria y nos permitió sonreir .
De "El Libro de la Tranquilidad"
Olivia Berhamow