En una dimensión sublime
que te envuelve la sutil naturaleza
vas pasando entre espinas y rosales
admirando su perfume y su grandeza.
Cada una con colores diferentes,
son sus pétalos sencillos o rizados
te van dando una idea que en tu mente
ves mensajes bellamente perfumados.
Con las rojas los amantes se regalan
pasión, ternura y alegría de sentir,
locamente enamorados se pensaban
en un fuego eternamente carmesí.
Rosas blancas de pureza concebida
un manojo de inocencia angelical
compromiso y amistad que de por vida
se ofrecen como ofrenda en el altar.
como soles perfumados, amarillas,
que le cantan al silencio del paisaje
y abriéndose un capullo de puntillas,
regalando sus sonrisas como encaje.
Sus espinas solamente son detalles,
que te dicen que no puedes olvidar,
que las rosas que florecen en los valles
por dolores de un amor se morirán.