NO SÉ SI ES EL AMOR EL QUE REGRESA
No sé si es el amor el que regresa
brotando entre la sombra temerosa,
si es un viejo cansancio que reposa
o una pasión impune que no cesa.
Mi corazón a solas se confiesa
mientras calla la boca perezosa:
nunca fue su verdad tan nebulosa,
nunca fue la penumbra más aviesa.
Yo sé que no es antorcha ni ceniza,
ni tierra fiel, ni duna movediza
ni el asombro total ni la experiencia.
Pero igual que un torrente trascendido
retomo el cauce del amor perdido:
no perturba el estar sino la ausencia.